Mi Pequeña Hermana Mayor Volumen 2)

Capítulo 46.5

Souta volteo a ver cómo era "vigilado", el chico suspiro, y dejo de caer la pila de papeles acumuladas en un armario, ya no había necesidad de ser cautelosos con lo que estaba haciendo.

- ¿Tanto miedo te da que sepa de ti? - No era bastante cumplicado saber porque esa niñita en específico estaba viendo lo que el muchacho hacía.

Aunque no lo podía culpar después de lo que ha pasado por los últimos días, más por parte de Yun quien se ha visto muy desanimada y desganada.

O todo lo contrario, donde solo quiere que la carguen y se vuelve inconsolable cuando ya sea Sora, Souta o incluso Aoi salen aunque sea a clases.

Un cambio muy drástico y preocupante.

- ¿Eso es? ¿te da miedo? - El chico le volvió a preguntar la razón a la pequeña niña. La bebé se encogió de hombros y asintió levemente mientras miraba hacia otro lado.

Souta no iba a culparla, aún así este se cruzó de hombros y miró hacia arriba mientras se podría decir que estaba pensando en que decir.

- ¿Qué te vea de otra forma? - Souta finalmente se giro completamente para ver de frente a la niñita. Y se sentaba al estilo "indio" para estar a la altura de la niña y verla a los ojos que se notaban completamente como un cristal que en cualquier momento se rompería.

Chii asintió sin ánimo alguno y coloco una expresión amarga, si bien es un motivo, tampoco es que pueda hacer mucho para ayudar a Yun. Ella temía el día en que su "hermanita" recordará ese pasado, de que sufriera lo mismo y esa historia se repitiera.

Chii lo sabía hace tiempo, que Yun era su "Yo, antes de eso"

Aun así la sensación inútil de no haberlo evitado solo provoca más ansiedad, y el hecho de tener esa conexión con la psudo gemela sigue siendo como una clavada en el pecho y sal a la herida.

Otra cosa que le impide ayudarla de manera efectiva, no puede, si en el fondo sabe que también necesita ayuda contra eso. Ni ella misma lo ha superado, la pérdida y el abandono.

La soledad.

- Unas bebés que ya superan toda lógica. - Souta interrumpió para sacar de sus pensamientos a la niña que se notaba por lenguaje corporal que estaba a punto de romperse

La niña levantó la vista confundida y luego sintió como el muchacho la tomaba para ponerla sobre sus piernas.

- Hacen planes elaborados, tienen "telepatía" les gusta engañar a la gente, les asusta los juegos de zombies, cuando es el baño debe haber un pato para jugar, les gusta jugar con el talco cuando las cambian, les encanta los osos y los pingüinos, odian la leche de frutilla, siempre van juntas, hablan su propio idioma, en el fondo hacen lo que quieren.

El chico vio como la niña no entendía la razón de nombrar esas cosas, pero había funcionado levemente, ya no se veía tan asustada.

- Pero no importa, lo que vea, me digan o lea, yo solo las conozco a ustedes. A las que les digo Yun y Chii.

- Umu - Como una afirmación total, la niña vio como el muchacho finalmente le mostraba una carpeta que en su interior tenía numerosas hojas.

El chico lo había encontrado hace rato, una caperta que había traído de la casa de sus padres en el pueblo desde la última vez, cuando recien había olvidado a su hermana. Le había llamado la atención porque Chii se asustó cuando Yun la dejó caer al chocar con ese mueble.

Aunque nunca lo abrió solo decía "Antecedentes de adopción"

Chii se quedó viendo la portada de ese documento, no importaba si tuviera algo escrito, ella era incapaz de leerlo

Ya había perdido ese conocimiento "adulto" hace mucho.

- Sacate esto - El chico tiro del chupete que ya andaba usando como era costumbre Chii -Si hablamos de esa manera en el pasado...

Sonriendo con total confianza y decidido, el muchacho abrió la caperta.

- Hay que ayudar a nuestra "hermanita"

La razón principal, era Yun, saber el pasado para no cometer error en el ahora.

Chii asintió sin ánimo, mientras comenzaba a temblar ligeramente por el temor de revivir más profundamente a esa herida.

El muchacho trago saliva y simplemente la abrazo y le susurro al oído - Te dije que te enseñaría lo maravilloso de este mundo.