ѕerendιpιтy
Diez.La señora Park daba vueltas afligida por la cocina, viendo entre sus abarrotes y refrigerador lo que le quedaba del mes. La despensa estaba poco surtida y el hecho de que a Jimin le molestará comer cualquier cosa, era sin duda algo que aquejaba el cerebro de la mujer.
Cada día.
Rojo, naranjo o verde, ninguno de estos colores podían poblar el plato del bailarín. Los chicos como él lo detestaban en su mayoría. Su palador refinado y su olfato agudo podían advertirlo ante cualquier mínimo esfuerzo de su madre por ocultar un pequeño trozo de zanahoria o pimentón entre el arroz o fideo.
Verduras y frutas, el enemigo letal de ellos.
¿Legumbres? No eran el ingrediente número uno en la lista de compras, pero de vez en cuando era el truco de magia que la señora Park realizaba, triturando el alimento para echarlo en posillos desocupados y lavados de flanes.
Un engaño, un pequeño engaño.
Mucho color o sabor hacía feliz a la gente, pero a ellos no. A los que eran como Park Jimin, no.
Luego de las 9 a.m. la señora Park solía trabajar como asistente de una dentista en el centro de la Ciudad, no era profesional, pero había rogado por el puesto asegurando que era capaz de aprender lo que sea muy rápido. Y así fue, la mujer llevaba al menos seis años trabajando allí.
El sueldo no era mucho, el dinero se extinguía tal cual los dinosaurios favoritos de su hijo.
A veces estaba lo suficientemente cansada como para dormir mínimo doce horas, pero no podía olvidar que solo ella mantenía a su único hijo.
━ mamá, te dejé en tu me-mesita de noche algo. ¿Lo-lo viste?
━ ¿cuántas veces debo pedirte que dejes de hacerlo hijo? La que debe darte dinero soy yo y no al revés. Tu sólo estudia y sé el mejor en eso.
━ n-no voy a soportar un n-no por respuesta mamá. ━ el chico abría el refrigerador notando que este a penas sostenía una caja de leche agria que podía oler muy bien con su distinguida nariz, una banana rancia, una horrible lechuga del color que odiaba; verde, queso amarillo que estaba tan duro que parecía un trozo de madera y un jarrón con agua fría. ━ p-por cierto, hoy debo salir, n-no tardaré tanto ma-mamá. Y no olvides que las ba-bananas no van en el refrigerador ma-mamá ━ Murmuró rodando sus ojos.
━ ¿vas a salir con Namjoon?
━ n-no. Pero talvez venga a De-dejar mi mochila.
━ ¿tu mochila? Porqué Nam tendría tu mochila... ━ se mofó cruzándose de brazos frente a él.
━ Es-s una larga historia. Y debo irm-me pronto.
━ ¿no vas a tomar desayuno hijo?
Park Jimin quiso decir que si, que le encantaría, pero si lo hacía ¿qué pasaría con la señora Park? Qué podría ofrecerle si no había absolutamente nada apto para el consumo. El estómago del bailarín rugía, estaba tán acostumbrado a gastar tanta energía en sus entrenamientos que parecía que su organismo le exigía proteínas. Pero agradecía que su madre no hubiera alcanzado a escucharlo o notarlo.
━ iré por unas co-cosas a mi habitación y-y me iré.
La señora le miró cuando corría por el pasillo para desviarse a la escalera. No pudo evitar sentir cierta nostalgia por notar cuanto había crecido su hijo y lo bien que lo había criado para que este fuera un ser tan especial.
15 Años atrás
━ y entonces dígame doctor ¿es operable? Talvez algún tratamiento de pastillas, no losé, usted es el experto. Por el dinero no se preocupe. ━ el médico observaba a aquél hombre frente a él, quien en vez de apretar la mano de su esposa para mutuamente darse valor, hablaba de sumas de dinero aún bajo su circunstancia. Claro, el señor Park era bastante reconocido, un abogado como él jamás sería irreconocible, porque incluso tenía su propio bufet bajo su nombre. ¡el dinero no era ningún problema!
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Serendipity I 🔭🧸[Trilogía Cielo amarillo] [TERMINADA✔] PRONTO EN FÍSICO
Lãng mạnSantino: Jimin Noah: Jk Santino, un joven autista que lucha día a día sus propias batallas internas, debe comenzar una nueva, al enamorarse perdidamente de un chico frío y homofóbico llamado Noah Jeon. Lo que parecía un mundo gigantesco, se minimiz...