Serendipity I 🔭🧸[Trilogía Cielo amarillo] [TERMINADA✔] PRONTO EN FÍSICO

CINCUENTA Y UNO

Jimin abrió sus ojos y sintió que la cabeza le dolía horrible. Como si un camión lo hubiese atropellado. Miró a su al rededor y pudo notar que seguía en el mismo lugar, el sofá. ¿Qué hora sería? ¿Ya habría vuelto Jungkook? ¿Se habrá topado a su madre? ¿Esta le habría dicho algo malo? Eran tantas preguntas y el bajito sentía que su cerebro le quería explotar.

Puso su pequeña mano sobre su mollera y lentamente se sentó.

Su olfato pudo darse cuenta del rico aroma que espelava de la cocina. Y los ruidos que de allí mismo provenían. El estómago del bailarín gruño al darse cuenta que era Jin Hyung quien tarareaba una canción desde el lugar mientras cortaba algunos vegetales y fritaba pollo. Porque, absolutamente nadie cocinaba como Seok, nadie. Jin era el amo y señor de las ollas.

Jimin se levantó y se calzó en sus pantuflas. Arrastró perezosamente los pies hasta la que ahora sería su nueva habitación y lentamente abrió la puerta de ésta, solo para cerciorarse, de que su chico estuviera allí.

━ ¿Ko-kookie? ━ consultó. Las cortinas de la habitación estaban cerradas y el cuarto muy oscuro.

━ enciende la luz, Jimin.

Le obedeció inmediatamente, tocó el interruptor y luego sus labios formaron una enorme O. Sus ojitos brillaban al notar la nueva y renovada habitación que yacía frente a él.

Los muros cubiertos de una pintura amarilla, sus dinosaurios de juguete adornando el espacio... la luna que tiempo atrás le había regalado a su Jeon estaba sobre una de las mesitas de noche, el edredón de extintas criaturas dinosaurias cubriendo la cómoda cama...

━ Kookie...

━ ¿te gusta?

━ Kookie... ¿si me gusta? ━ le miró ━ ¡me encanta! ━ Jimin entró y comenzó a recorrer el lugar, tocando los bordes de cada cosa. Sus deditos temblaban también.

Park Jimin comenzó a dar saltitos de felicidad olvidando por completo la compostura y el control de sus emociones. Era como si una estrella hubiera estado mucho tiempo sumergida en el fondo del mar y luego de muchos días, al fin la dejaban en su sitio, el cielo.

Jeon le observaba, dejando una sonrisita tatuada en sus labios. Jimin solía conformarse con tan poco esfuerzo. Era feliz con cosas pequeñas, sin embargo por los demás hacía cosas muy grandes sin darse cuenta.

El chico saltaba y aplaudía. Jungkook quizá no lo sabía todo acerca del Autismo, pero si, que cuando una persona con esa condición "saltaba", "aleteaba" o se movía "hacia delante y atrás" en un vaivén, no era por ser un "tonto mental". Sino, porque de ese único modo, ellos buscaban su equilibrio frente a muchas emociones circulando en su sistema en ese minuto.

Se regularizaba.

━ Kookie ¡se siente como en casa! ━ dejó sus mejillas rosadas y le observó mientras daba aplausitos pequeños pero seguidos.