Capítulo 12

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Y volví al principio, no había regresado porque en realidad pensé que no lo necesitaba, desde que al fin conseguí trabajo y pude enderezar un poco mi vida, no había vuelto porque sentía que si lo hacía, iba a retroceder, volvería justo donde empec...

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Y volví al principio, no había regresado porque en realidad pensé que no lo necesitaba, desde que al fin conseguí trabajo y pude enderezar un poco mi vida, no había vuelto porque sentía que si lo hacía, iba a retroceder, volvería justo donde empecé, aquí.

— Que bueno verte Marey, toma asiento por favor. - Cerré la puerta detrás de mí y me senté, sacando mi abrigo y dejándolo a un lado, estaba ansiosa, mordí mi labio inferior una y otra vez mientras observaba el lugar, estaba como siempre.

— Hola Sarah. - La miré un poco apenada, venir aquí después de varios meses me hacía sentir inestable, ella me sonrió, una sonrisa cálida que logró hacerme sentir menos incómoda.

— Hola, tanto tiempo sin verte, ¿Cómo te sientes?

— Pues... - Las palabras quedaron atascadas en mi garganta y solo me quedé en silencio, mirando a su dirección pero no precisamente mirándola a ella.

— ¿Te sientes bien? - Me cuestionó al ver que no respondía.

Suspiré hondo. — No, en realidad no pero...¿Quién se siente bien en estos días? - Me reí de mala gana, tratando de normalizar la situación y la miré, volviendo a estar seria de un segundo a otro.

Sarah mi psicóloga ladeó la cabeza un tanto confundida. — ¿Por qué dices eso?

Suspiré otra vez, sabía que tenía que hablar, se supone que debo decir lo que siento, y me sentiría aún más avergonzada si le hacía perder el tiempo a la pobre Sarah, ya me había soportado lo suficiente. — Pensamos que estamos bien, pero luego miramos muy dentro de nosotros y nos damos cuenta que hay muchos hoyos que tapar, que siempre hay algo haciéndonos caer una y otra vez...y estoy harta de eso.

Sarah asintió frunciendo un poco el ceño y volvió a cuestionarme. — ¿Cómo han sido estos últimos meses? - Miré la punta de mis zapatos sin saber cómo empezar a hablar moviendo un poco mi cabeza para quitarme el cabello de la cara.

— Han sido... - Pensaba en cómo decirle todo lo que había pasado, pero me limité a decir. — Ha sido loco.

— ¿En serio? Cuéntame.

— Conseguí empleo. - Sonreí — Es uno muy bueno pero...cómo yo soy yo, siento que probablemente lo echaré a perder cómo lo hago con todo.

— Estoy segura que eso no pasará ¿has hecho algo más?

— Fui a un club y...fue una decisión estúpida, no debía hacerlo.

— ¿Por qué no?

Dude en si decirle o no, ella estaba siendo muy comprensiva conmigo, solo hacía las preguntas necesarias y se lo agradecía, no obstante decidí no contar más de la cuenta. — No debí hacerlo, ahora todo puede salir mal en cualquier momento, no sé qué debo haber.

— Solo has lo correcto, lo correcto siempre funciona.

Genial Sarah, me has resuelto la vida.

Nótese la ironía.

The Player [El club 1] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora