zero one [0-1]

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01. lost

Los ojos de Seonghwa se movían con rapidez sobre el pergamino, sus manos apuntando todo lo que eran capaces. Casi podía sentir cómo los conocimientos llenaban su mente.

Desde joven, el chico había soñado con escribir. Con escribir, viajar y escribir sobre sus viajes. Hacía tiempo que esperaba la oportunidad para la gran aventura de su vida, pero a sus diecinueve años, esta aún no había llegado. No había duda, eran todo señales de los astros: si estos aún no le habían dado lo que él tanto deseaba, significaba que debía buscarlo él mismo.

Por esa razón se encontraba encerrado en aquella vieja biblioteca pública, entre tomos olvidados y vagabundos intentando esconderse tras las estanterías para poder pasar la noche allí. Pero ni los susurros de estos ni el sonido de las ratas royendo el suelo eran capaces de desviar su atención de los apuntes que tomaba. Estaba concentrado en cumplir su sueño.

Después de buscar gente interesante por las calles, probar a colarse en palacio, pretender haber descubierto una princesa perdida y haberse acercado demasiado al fuego, había encontrado el ambiente perfecto para su gran aventura: el océano.

Pero no sería algo sencillo, no. Él podría colarse en un barco de mercancías, le sería sencillo comprar un pequeño navío para salir en busca de alguna isla o incluso hacerse amigo de algún contracorriente. Pero eso era demasiado fácil, una historia que no llegaría a llenar una novela en condiciones. La idea de Seonghwa era mucho mejor, sí señor: actuar como un pirata, conseguir llamar la atención de alguno, ser aceptado en su tripulación y apuntarse junto a ellos a la búsqueda de algún tesoro. Entre estos requisitos mínimos, también aceptaba poder disfrutar de las riquezas que el oro le proporcionaría, o la compañía de alguna hermosa mujer. Poder beber buen ron, aprender a utilizar el sable. 

Seonghwa no dudaba de sus posibilidades, pues tenía un plan. Un plan que, estaba seguro, era infalible. ¿Cómo no iba a serlo, si lo había leído en un ㅡviejo, casi ilegibleㅡ libro? Estos siempre estaban repletos de conocimiento de gente sabia. Los escritores siempre eran los más inteligentes, los que más mundo conocían. Aquel tomo cuyo título incluía las palabras vida y piratas ㅡno había sido capaz de descifrarlo entero, algunas hojas estaban arrancadas y el cuero de las tapas desgastadoㅡ era sin duda su llave para vivir una aventura digna de pasar a la historia.

Los rebeldes mechones oscuros cayendo sobre sus ojos, Seonghwa cerró el libro con fuerza haciendo volar el polvo que tenía entre las hojas, recogió todas sus pertenencias y salió casi corriendo del viejo edificio. Llegó pronto a su pequeña casa, en la que ya sólo quedaba él, y se dirigió a la cocina con rapidez. Después de machacar las plantas que debía y agregar agua hasta la mitad del cuenco, bebió el somnífero casi de un trago y se lanzó directo a la cama. Tenía que dormir pronto y bien, pues dudaba que fuera a volver a hacerlo en un futuro cercano. El próximo día pensaba empezar con su plan. La paciencia no era una característica suya, la verdad. Cerró los ojos, pues, y no tardó en sumergirse en sus sueños. Sueños que, si todo iba bien, no tardarían en hacerse realidad.

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Probablemente, todo había sido en vano.

Seis días eran los que llevaba navegando en su pequeña barca, de isla en isla, deseando encontrar algún barco pirata buscando un tesoro, o simplemente de paso. Seis días eran los que había dejado a un lado la comodidad de dormir en una mullida cama, y había preferido vivir sentado sobre unas ligeras tablas de madera. Seis días había durado, vivo, pero sabía que poco más si seguía así. Su situación continuaba de la misma manera que había comenzado: el sol abrasándole la piel y la sal del aire marítimo entrando sin permiso en sus ojos. Sabía que no tendría más opción que volver a casa, además de que las ㅡno pocasㅡ provisiones que había llevado al viaje, estaban por terminar. Necesitaba un milagro y mucha fuerza para poder sobrevivir.

pirate king ㅡ ateezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora