zero one zero [0-1-0]

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¡Hola! He vuelto. Si podéis, por favor, agradecería mucho que leyérais el mensaje que he escrito en el tablero de anuncios de mi perfil. Muchas gracias, gracias por seguir aquí. <3

010. do never give up


Nunca había sido suficiente.

Hiciera lo que hiciera, incluso tras días de continuo trabajo y noches llenas de nuevas ideas. Incluso tras infinitos intentos, siempre había un fallo más. Siempre había algún error. Nunca llegaba al mínimo.

No se dio cuenta de ello hasta muy tarde, cuando ya había vivido demasiadas decepciones que había intentado disfrazar con pensamientos positivos. Pero toda sonrisa forzada se había terminado. No podía seguir mintiéndose a sí mismo. No cuando se la habían llevado a ella.

Sus padres eran las personas que más importancia tenían en su vida, desde pequeño habría dado todo por ellos. Sin embargo, la familia de ella no aceptaba a su padre ㅡun simple artesano que vivía en una casa como un pueblerino normal y corriente. Ellos deseaban que su hija optara a algo más grande, más importante.

Pero no puedes escoger de quién te enamoras, sólo lo haces. Y entonces no hay quien te pare.

La mujer decidió casarse en secreto con aquel hombre experto en las propiedades de las plantas, decidió también huir de su hogar para mudarse a una casa en una calle cualquiera, y decidió, por último, formar una familia con el que sabía era el amor de su vida. Consiguió vivir ocho años de esta manera, en secreto.

Aquella fresca mañana de marzo, la mujer se encontraba junto a su marido, con su hijo sentado en su regazo. El pequeño la escuchaba atentamente, con una sonrisa inocente y un brillo de ilusión en la mirada.

ㅡ¿Otro? ㅡpedía, haciendo un puchero casi inconsciente.

El hombre soltó una carcajada suave, pura. Su madre, por su parte, ensanchó su sonrisa y por supuesto, aceptó.

ㅡEstá bien, mi pequeño príncipe... ㅡhablaba con su dulce voz.

ㅡ¡No, no! Yo no soy un príncipe... ¡Yo soy un pirata!

La mujer rió.

ㅡMi pequeño pirata será. Déjame pensar... Érase una vez, una sirena que-

Entonces llamaron a la puerta. La madre, sonriente, dejó al niño con su padre entre quejidos infantiles mientras se acercaba a abrir. Viendo la hora que era, supuso que sería algún cliente o un amigo de su esposo. Cuán equivocada estaba.

ㅡBuenos días ㅡcomenzó, abriendo la puertaㅡ, mi marido saldrá ahora mism-

No le permitieron acabar.

ㅡ¡Te he encontrado! Pedazo de puta

Se trataba de un hombre de avanzada edad. Agarró a la mujer por la manga del vestido y la arrastró a la calle, tirándola al suelo

ㅡ Te dimos todo lo que teníamos, ¡todo! Lo único que tú tenías que hacer era escoger un buen marido. ¡Pero huyes de casa y vienes a casarte con un pobre!

El recién llegado, de cabellos canosos y mirada cansada pero furiosa, comenzó a patalear el frágil cuerpo de la muchacha a sus pies.

ㅡDebo admitir que subestimé tus habilidades, no pensé que sobrevivirías con ese chico durante tanto tiempo. Entonces eras una tonta niña de dieciséis años... Aunque, por lo que veo, sigues siendo igual de débil y estúpida por mucho tiempo que haya pasado.

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⏰ Última actualización: May 01, 2023 ⏰

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pirate king ㅡ ateezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora