Siempre fuiste tú

Capítulo 60

El viento soplaba arduamente, la naturaleza estaba enojada con nosotros; estábamos pagando por nuestros errores. Errores que creímos jamás cometer.

Las personas dicen muchas cosas estúpidas cuando no saben qué decir. Prefieren hacer sentir mal a otras personas y ellos sentirse bien pensando que la estas ayudando.

A lo largo de la vida te vas dando cuenta que no todo es lo que parece, qué hay personas que no son lo que crees y eso da más miedo de lo que crees.

Sam ya no estaba conmigo y jamás lo estaría. La vida se lo llevo como una hoja caída en medio otoño.
Aun recuerdo ese día... Han pasado 3 semanas y yo aun lo recuerdo una y otra vez.
Recuerdo como le marqué a Nikki sollozando tratando de explicarle que el hijo que crió y amo, acababa de quitarse la vida. Recuerdo ver a Harry llorar en el funeral y gritar ¡Por qué Sam! ¡Por qué tú!. Recuerdo a Paddy en silencio con los ojos llorosos tratando de calmar el dolor de su familia. Recuerdo ver a Dominic abrazando con todas sus fuerzas a Nikki cuando bajaron el ataúd de Sam para enterrarlo. Recuerdo fugazmente a Thomas, callado y sin expresión alguna; recuerdo como se fue en el funeral porque no podía aguantar el dolor que lo estaba consumiendo.
Y también me recuerdo a mi, llorando en el baño para demostrar ser fuerte y ayudar a los Holland, me recuerdo tirada en el piso pensando en el... en su sonrisa, en su cabello, en sus pecas, en el. Me recuerdo viendo el anillo y aferrándome a él como si fuera el, como si eso me mantuviera cerca de él.

¿Por qué Sam?

Narra Tom:

Estaba acostado en mi cama, viendo a la pared blanca con millones de pensamientos en mi cabeza. Con recuerdos de Sam.
Todos la estábamos pasando mal, pero intentábamos seguir, intentábamos "superar" lo insuperable.

-Venga tom, ya sal de ahí hijo- mire a la puerta y ahí estaba mi madre con una bata blanca y con un café en las manos- No has salido de tu cama desde hace 3 semanas.

Mamá tenía razón, me la había pasado encerrado en mi recámara, sólo pensando. Pero no tenía fuerzas para ver a la cara al mundo, no tenía fuerzas de levantarme y de seguir, mucho menos de luchar.

-No puedo mamá, todo pesa.
-Thomas- se acerco a mi y se sentó en la cama- se que te duele, como a todos nosotros. Pero tienes trabajo pendiente. Ya retrasaron 3 semanas una grabación porque tú no apareces.

La mire a los ojos y vi el dolor y la tristeza en ellos. -Perdón mamá- comenté- pero lo extraño demasiado.
-Yo también- me abrazó- yo también lo extraño, pero tenemos que ser fuertes. No podemos estancarnos- Si voz comenzó a cortarse.

Después de hablar con mi mamá y consolarla por el dolor de su corazón decidí bajar a la sala.
Ahí estaba Harrison viendo el teléfono vestido con una playera, unos pants y una gorra.
-Costó pero aquí está- comentó mi mamá secándose las lágrimas.
-¿Qué?

Harrison se dirigió a mi y me agarro para, literalmente, arrastrarme fuera de la casa.
-Harrison, no- este momento hacía caso y seguía caminando- ¿A donde vamos?

Se escuchó a lo lejos como el seguro de un coche se desactivó y caminamos a el. Se que suena como si no estuviera poniendo mucha resistencia pero cuando digo "caminamos" es Harrison. Porque me estaba cargando por el hecho que no quería dejar mi casa y tuvo que hacerlo.
Como pudo me subió al carro y luego se subió a el.
Condujo hasta una bahía la cual estaba completamente vacía y se bajó. No quedaba de otra así que también baje con el y lo seguí.

Apenas iban a dar las 8 a. m. El sol se estaba poniendo y se podía ver perfectamente el amanecer.
Nos conocíamos cerca de la orilla de la bahía y así nos quedamos viendo al agua y a la puesta de sol.

Sam, Sam, Sam, mi hermano, Sam.

Lágrimas comenzaron a salir de mis ojos, todo estaba en silencio. No había llorado por Sam, ni si quiera cuando fue el funeral había llorado.
Pero esta vez todo el muro que construí se derrumbó, con un simple sol.

Harrison me agarro del brazo y me abrazó fuerte. Seguía sin decir algo; sin embargo lo decía todo.

-Mi hermano haz... mi hermano ya no está- estaba sollozando, no paraba de temblar por el dolor- Se fue... Sam se fue...
-Lo se tom, lo sé- susurró y me agarró más fuerte.
-¿Que voy a hacer? ¿Cómo lo haré sin el?- no podía pronunciar las palabras correctamente, realmente todo dolía.

Haz me soltó y caí al suelo por la falta de fuerzas. Seguía llorando. Nada podía calmarlo.
-Aquí estoy hermano, aquí estoy- Harrison de agacho y volvió a abrazarme- escucha, tom. Sam sabía que todo esto iba a pasar, pero no te estanques. Tienes toda una carrera, tienes talento. Aprovéchalo.
-No quiero dejar a mi familia sola haz.
-¿Por qué la dejarías sola?
-Por que están grabando en LA.

Harrison me convenció de irme a grabar.
Mi familia se iba a quedar sola, pero tenía que hacerlo.
Fueron a dejarme al aeropuerto y antes de subirme paddy me abrazó y me susurro "no te preocupes Thomas, yo los cuidare"

Me subí al avión y derrepente Harrison de asusto apareciendo de la nada. Su excusa fue que no me dejaría solo, no en estos momentos.

-Hazza, quiero respuestas...
-¿A que te refieres?
-¿Por qué lo hizo? ¿Por qué se... suicidó?
-Esas respuestas solo puedes encontrarlas en un lugar.

Narra ___:

Estaba acostada en mi cama viendo una película como siempre; sin embargo esta vez estaba con Robert. El me estaba acompañando en mis días de dolor y soledad.
-Esto es demasiado cliché- comentó Robert mientras veíamos "diario de una pasión"
-Odio esta película
-¿Entonces por qué la estamos viendo?
-Porque a Sam le gustaba... era demasiado lindo, le gustaban estas cosas.

Antes de que Robert dijera algo alguien tocó la puerta y el como de costumbre fue a abrir. No quería lástima en este momento.

Se escucharon voces en la puerta y ya había tardado mucho. Me levante y fui a ver que era lo que estaba pasando. Quien me estaba molestando.

-Robert que es lo que está pasan... Thomas.