Juntos .Lunay.

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Salí de mi casa y vi al frente el taxi me llevaria hasta el centro comercial porque tengo que comprar unas cosas para mi y otras cosas que necesito para los estudios.

Escuche mi celular sonar, lo miró y era una personita que ha estado muy perdido últimamente.

- Dichosos los ojos que te ven - dije al mirar su imagen en la pantalla.

- Si, lo mismo digo - ríe - Cómo yo no te llamo tu tampoco lo haces ¿verdad?

- Asi es la vida - me escogí de hombros.

- Si ujum - dice completamente serio.

- Ay ya, no te molestes, ya estas hablando conmigo.

- ¿Dónde estás?

- Voy camino al centro comercial a comprarme unas cosas - voltee a ver hacia la ventana para ver por donde íbamos, aún falta - Y tú ¿Qué haces? - lo miré.

- Estoy en el mall esperando a que las mujeres de la familia salgan de un spa - sonríe sin ánimos.

- Uhh un spa - alce las cejas - Eso suena relajante.

- Relajado esta mi culo que llevamos más de dos horas esperando.

- Jeimax no seas exagerado - achine los ojos.

- No es mentira - deja de mirar el celular y mira hacia un costado - Pa ¿Verdad que llevamos más de una hora aqui sentados?

- Si aproximadamente - escuche la voz de Max.

- Ves - dice Jeimax mirándome.

Reí.

- ¿Y por eso me llamaste? ¿Para sacarte el aburrimiento?

- Si - asiente.

- Mmm no me parece - negué - Yo creyendo que me llamabas para saber de mi y hablar un rato conmigo, pero no resulta que ahora soy la distracción de otros.

- Si te digo que te llame para saber de ti ¿Estarás mejor? - sonrie.

- No Jeimax.

El taxi se detuvo, ya llegamos así que le pagué y baje.

- Mera woo - escuché por el teléfono - Andrea.

N le preste atención  unos segundos porque estaba entrando al centro comercial y me aseguraba de tropezar con alguien o caerme y también por buscaba a mis amigas me dijeron que iban a estar aquí.

- ¿Me vas a seguir ignorando? - escuche a Jeimax un poco molesto.

- Dale, hablamos después - miré la pantalla.

- No espera...

- Saludos por allá, chao Jei - colgué.

Jeimax siempre me anda molestando por cualquier cosa, creo que ese es su fin en hablar conmigo y molestarme.

Creo que somos peor que una relación, uno de los dos se enoja pero siempre a la final terminamos hablando.

Ya iba llegando a la feria y vuelve a sonar mi celular.

Omar.

- Hola bebé - sonreí.

- Hola princesa ¿Cómo estas? - dice con su vos gruesas.

- Bien ya que me llamaste ¿Y tú?

- Emocionado porque te voy a ver hoy.

- Cierto - dije acordándome de que su viaje familiar terminaba hoy - Me avisas cuando llegues.

- Uhh ¿Algo especial me espera?

- Eso es sorpresa - dije bajito.

- Me encantan tus sorpresas.