Elizabeth...
El rostro de mi hermana al ver a Ethan se torno pálido, sus ojos se volvieron oscuros y se puso más seria de lo normal.
Aún no podía creer que después de lo alegre que era mi hermana de niña, siempre con una sonrisa en su rostro, siempre animando a los demas a sonreír; incluso cuando murió mi madre ella me decía:
"No llores más hermanita, mi madre no hubiera querido vernos llorar por su partida, al contrario hubiera querido que siguieramos con nuestras vidas y siempre con una sonrisa"
Hasta podía ver la sonrisa comprensiva que me había dado ese día, la sonrisa que cuatro años después se vio destruida por completo cuando fue llevada a ese horrible lugar.
Aún recuerdo que llegaba de vacaciones, justo a ver a mi hermana, cuando mi padre me dijo que se encontraba en un psiquiátrico. Sentí como mi mundo se venía abajo, la familia poco a poco se fue separando y así mismo, destruyendo. Ya ninguno era igual, Y la sonrisa de mi hermana quizás no volvera.
Sólo pude notar la tensión en el ambiente, como mi hermana temblaba a mi lado y sus ojos y los de Ethan se miraban sin parpadear.
- Eli... - susurró - qui... quiero descansar - sus ojos alfin se separaron de los de Ethan y me miraron a mi.
- ¿Estas bien? - pregunte, iba tomar su rostro con mis manos, pero una de sus manos abofeteo las abofeteo y se alejó un poco de mi. Sus ojos reflejaban miedo.
- por favor - dijo y sus ojos se desviaron a un punto detrás de mi.
- ¿Ella es su hermana, señorita Elizabeth? - dijo Rosa.
- estaré arriba con ella, si llega Nathan dile que... - sonrió con malicia - ya luego le diré yo.
(...)
- ¡Noooo! - un grito agudo me hizo levantarme de golpe de la cama - ¡Sueltame! - sali de la habitación corriendo temblorosa y mire a todos lados, justo cuando llegue a las escaleras, escuche los gritos desde la habitación de Zoé - ¡Ya basta, sueltame! - sali corriendo y abrí la puerta con rapidez.
Encontré a mi hermana retorciendose en la cama, sudando y con lagrimas corriendo por su rostro. Me acerqué a ella y le agarre las manos.
- Zoé, Zoé - la llame y moví varias veces, pero ella no paraba - ¡Zoé! - sus ojos se abrieron de golpe y lo único que mostraban eran miedo - Zoé - susurre, sus ojos me miraron un largo tiempo antes de que me rodeara en sus brazos con fuerza.
- ¿que pasa? - dijo Nathan, quien apareció con Ethan a su lado y nos miraban con el ceño fruncido.
- pesadillas - susurró Zoé mirando a un lado de la habitación.
Observe a Ethan quien miraba a Zoé con inquietud, como si quisiera acercarse y abrazarla.
- ¿estas bien? - pregunto alfin y el cuerpo de Zoé se tenso.
- No - respondió ella y levanto su vista para mirarlo, sus ojos se encontraban cristalizados. Ethan se iba a acercar cuando Zoé grito - ¡No! - y se hizo para atrás, quedando pegada a la pared y cubriendose con la cobija.
- será mejor que vayan a dormir, yo me quedaré con ella - dije.
- si, de igual manera lo iba a hacer, tengo cosas más importantes que hacer - dijo Nathan antes de marcharse al cuarto de baño.
Los ojos de Zoé miraban a Ethan, quien aún seguía en el marco de la puerta con la cabeza pegada ahí, mientras maldecia en silencio.
- ¿estas bien? - le pregunté y el me miro y asintió antes de marcharse, no sin antes darle una mirada a Zoé.
- Él... - escuche decir a Zoé y la mire con el ceño fruncido - ¿Él... no vendrá por... mi?
- ¿quien? - pregunte.
- El asesino de mamá - soltó ella, aún mirando por donde se había marchado Ethan.
- ¿tú lo conoces? - después de mi pregunta, su cabeza se giro hacia mi con rapidez y su respiración empezó a ser rápida - ¿quien es?
- No puedo... - una lágrima todo por su mejilla se pego varias veces en la cabeza con la mano.
- ¡No, no hagas eso! - le agarre las manos y ella se soltó con brusquedad y me empujó antes de salir corriendo escaleras abajo - ¡Zoé! - sali corriendo detrás de ella, hasta llegar al jardin.
Ella se encontraba sentada en el pasto, abrazando sus piernas y sollozaba. Me agache y la abrace con fuerza.
- Tranquila, estoy contigo, no te pasará nada - susurre y le di un beso en la cabeza.
(...)
Luego de eso, mi hermana logró dormir y yo me quedé con ella. Ahora estábamos desayunando.
Mi hermana sólo miraba el cereal en su plato y movia la cuchara una y otra vez sin probar bocado. Ethan comía y en algunos momentos la miraba, mientras yo los miraba a ambos con atención.
- tienes que comer - le dije a Zoé - ahora tendré que ir a la Universidad - mire a Ethan - Y te quedarás con Rosa y con Ethan, ¿estarás bien?
- yo no desayuno - dijo - sólo me aplican tranquilizantes y duermo algunas horas - ladeo la cabeza sin despegar la vista de su plato - ¿donde están mis medicamentos? Son necesarios.
- sólo te hacen daño - tome su mano, pero ella la alejo con miedo.
- ya me acostumbré a ellos - sus labios empezaron a temblar - si no soy yo son ustedes.
- ¿de qué hablas? - intente buscar sus ojos, pero ella fijo los suyos en los míos antes.
- si no me hacen daño con ellos, yo les haré daño a ustedes - ladeo la cabeza y una sonrisa malévola aparecio en sus labios.
Ethan soltó la cuchara, haciendo que el estruendo sono por toda la casa, Ya que todo era silencio y tensión.
- no - negué con la cabeza - tú no eres asi Zoé, sólo te metieron cosas en la cabeza - mi voz se quebró.
- son síntomas de los medicamentos que le dieron - dijo Ethan y la vista de ambas se fijaron en el - Tú sólo eres víctima de ellos, como alguna vez yo lo fui, se lo que sientes, Zoé. Sólo te confunden y te hacen olvidar todos los buenos recuerdos - susurra: - dejando los malos, los que te atormentan.
La vista de Zoé dejo de ser dura cuando Ethan dejo de hablar y soltó un sollozo.
- ¿que te hicieron, Zoé? - los ojos de Ethan se aguaron. Se levantó de la mesa y la rodeó, hasta llegar al lado de Zoé y abrazarla con fuerza.
Al contrario de ayer, Zoé no huyó, sólo se aferró al cuerpo de Ethan y lloro con fuerza.
Alguien entendía lo que le ocurría y sólo el podía ayudarla a salir del miedo.
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¡Espero les haya gustado y me dejen su estrellita!
Este capítulo es dedicado a: @beauty_queen900.
¿Quien quiere una historia de Ethan y Zoé?
Nos leemos pronto, bye.
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La Deuda
OverigElizabeth Johnson se verá obligada a pagar la deuda que tiene su padre con uno de los mafiosos más peligrosos del país. De ella depende la vida de su padre, hermana e incluso la de ella. - ¿en qué consiste el trato? - le pregunto a mi padre. - deber...