Elizabeth...
Termine de arreglarme y salí con mi hermana de la habitación, firme algunos papeles, me dieron la orden de salida y entramos al ascensor.
- Zoé... - ella me miro - ¿recuerdas algo que papá haya hecho en el pasado?
- algo... ¿cómo que? - pregunto, Y justo el ascensor llego al último piso.
- alfin bajan - dijo Ethan y comenzó a caminar nuestro lado, en dirección a la salida.
Pare en seco y agarre el brazo de Zoé.
- Dime la verdad, ¿que te hizo? - la agarre por los hombros e intente mirarla a los ojos, pero ella evadia mi mirada - ¡Dimelo, Zoé! - tome su rostro y la hice mirarme - ¡Aquí estoy, puedes contarme todo!
- Si, aquí estas, ahora - murmuró - Pero ahora es tarde, ¿te das cuenta de eso, Elizabeth? - separo mis manos de su rostro - las cosas ya pasaron y tú... tú... no estabas - Me miro con sus ojos llenos de lagrimas.
- Zoé... sabes que yo...
- Que tú, ¿que? - limpio sus lagrimas - ¡¿Qué tú que, Elizabeth?! - grita - Tú, desde que murió mamá... - susurró lo último - sólo piensas en ti - hundio su dedo en mi pecho y se fue sollozando.
- Chicas, pensé que venían de... Zoé, ¿estas bien? - intento agarrar su brazo y ella lo esquivo.
- déjame en paz, Ethan - sé fue.
Lleve una mano a mi boca y solloce, sólo ahí me di cuenta que algunas lagrimas comenzaban a salir.
- ¿Que paso? - me pregunto él - ¿de qué hablaban?
- Yo... - solloce - Yo la deje... sola - susurre - ella... fue mi culpa - cubri mi rostro y comencé a llorar como una adolecente.
- ¿Por qué Zoé esta llorando? - escuche la voz de Nathan - ¿que paso?¿todo está Bien?
- Si - respondió Ethan.
- No - respondí.
Nathan se acercó a mi y me abrazo.
- imaginé muchas emociones al verme pero ninguna era triste - beso mi frente - ¿que tal si vamos a casa y hablábamos de esto?
- Soy... soy un asco de hermana mayor, Nathan - él negó varias veces y limpio mis lagrimas.
- iré con Zoé - informó Ethan y se fue.
- No lo eres - dejo un beso en mis labios - ven, vamos a casa y hablamos, ¿si?
Asenti y comenzamos a caminar.
Todo el camino fue un silencio total: Zoé estaba mirando por la ventana, con su cabeza apoyada en ella, Ethan tenía la cabeza en sus piernas y ella acariciaba su cabello.
Nathan tenía su vista en el camino y en algunas ocasiones me miraba; mientras mis pensamientos sólo estaban en el pasado y el infierno que vivió mi hermana en manos de papá y Gregory Smith, Pero... ¿Y si ellos no fueron los únicos? Tenía miedo.
De verdad, y aunque Nathan diga lo contrario, yo era un asco de persona, no merecía a Zoé como hermana, nuestro sueño siempre fue viajar juntas, no yo sola, y simplemente lo arruine; como arruinó todo.
¿como una persona que fue tan alegre puede ser tan depresiva ahora? Sencillo, tener a Arthur Johnson como padre, tenerme como hermana y soportar todo lo que ella soporto.
Antes yo era su ejemplo a seguir, por ser la mayor, ahora ella es el mio, con apenas 17 años de edad, es la persona más fuerte que puedo conocer.
Llegamos a casa y tanto Zoé como Ethan salieron del auto y entraron a la casa tan rápido y sin decir una palabra, o bueno, Ethan tuvo que salir corriendo detrás de ella.
- ¿ahora si me dirás que paso? - pregunto Nathan.
- creo que... - suspire - tengo que hablar con Zoé.
- yo creo que tienes que dejarla sola unos minutos, ella también necesita su espacio para pensar, sea lo que haya pasado, se nota que no están bien y tienes que dejarla descansar un poco.
- Sola... ¿dejarla sola? - lo mire - Si por dejarla sola es que ella está así - me pase una mano por el cabello, con desespero - ella siempre me necesito y yo sólo la deje... sola.
- Deja de pasarte esa palabra por la mente - desabeocho su cinturón y se acercó - porque... si, no hiciste lo correcto antes, pero ahora están juntas, ahora la puedes ayudar.
- ¡¿cómo arreglar algo que yo misma rompí?! - trague saliva y salí del auto.
- Elizabeth... no te hagas más daño, no puedes estar asi - me volteó y abrazo - tranquila, todo estara bien, ella estara bien - acaricio mi cabeza - Zoé es fuerte.
Poco a poco mis lagrimas cesaron y me sentí cansada, pero la culpa no se fue, era como sentirse encerrada en ella.
(...)
Estábamos todos desayunando juntos y en silencio, sólo estaba el sonido de los cubiertos.
- Esto parece un funeral - dice rosa desde la cocina - señor Nathan, su padre...
- Gregory - La corto Nathan - sólo Gregory.
- Bien. El señor Gregory dice que vendra para la cena, tiene... - Zoé soltó los cubiertos y se quedó mirando el plato.
- Zoé... - me levanté, me senté a su lado y tome su mano - sabes que estas conmigo, ya no te voy a dejar sola.
- Él no vendrá a esta casa - declaró Nathan y miro a Rosa - No es bienvenido.
- Esta bien, pero se molestará mucho.
- Me importa una mierda como se ponga o lo que haga - sé levanto - él no pisa esta casa.
- Se lo haré saber - Rosa se retiró.
- ¿ahora que quiere? - pregunte.
- No lo sé - me dio un beso en la frente - Me tengo que ir - salió.
- ¿Él... no me hará más daño, verdad? - me pregunto Zoé temblorosa.
- No, no lo hará, tranquila - la abrace - ya no estás sola.
- ¿Esta vez si te quedarás?
- Lo prometo - la abrace más fuerte.
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¡WENAS, WENAS!
SIGO VIVA XD
HASTA AQUÍ ESTE CAPÍTULO CHIC@S
¿QUE TAL LES PARECIO?
¿QUÉ CREEN QUE SUCEDA?
¿QUIEN QUIERE LA HISTORIA DE ZOÉ Y ETHAN PARA YA?
DEJEN SUS VOTOS, SUS COMENTARIOS...
LOS QUIERIIII, NOS LEEMOS PRONTO Y PERDÓN POR LA DEMORA, BYE.
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La Deuda
RandomElizabeth Johnson se verá obligada a pagar la deuda que tiene su padre con uno de los mafiosos más peligrosos del país. De ella depende la vida de su padre, hermana e incluso la de ella. - ¿en qué consiste el trato? - le pregunto a mi padre. - deber...