4.24 Camino al evento...

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—Buenas noches señor. —14 de Diciembre del año 0156 en curso. Alguien tocaba en la puerta de la casa de la familia Gaona.

—Sí... Así que tú eres el novio de Uma...—Un hombre alto, poco regordete, con gran bigote y cabello canoso había atendido a la puerta.

—N-no... Suemy es...—Iker estaba muy nervioso, vestía de un lindo traje negro, una camisa blanca, y una corbatita naranja de caritas felices que hacía juego con su cabello.

—Ya papá...Te dije que no inventaras cosas...—Detrás de la puerta, se escuchó una voz femenina y después su silueta salió a flote, mostrando su hermoso vestido color dorado descubierto arriba y ajustado del tórax, con una cinta negra en la cintura y suelto a partir de ese punto. Su falda le llegaba tres dedos arriba de la rodilla... Eso sí, su peinado, no había cambiado.

—Está bien. Diviértanse...—Les deseó su papá, dejando salir a Suemy. —Y tú, niño...—Dijo refiriéndose a Iker. —Más vale que la cuides...—Y se acercó amenazándolo del cuello con una llave de cruz.

—S-sí señor... No necesita sacar objetos mecánicos...—Reía nervioso, el papá lo soltó lentamente.

— ¡Y tampoco te sobrepases con ella!—Le advirtió, hundiendo su llave de cruz en uno de los muros de la pared de su casa, haciendo un pequeño hoyo. — ¡Dime tu edad!

— ¡Papá, ya nos vamos!—Suemy cortó la conversación alarmada, se fue llevándose a Iker del brazo con velocidad.

— ¡Uma no puede tener novio hasta los dieciocho! ¿Escuchaste?—A lo lejos, el grito de su papá había sido captado por estos dos, que estaban alejados de la escena.

—Disculpa a mi padre, es muy protector conmigo...—Le explicaba Suemy, se detuvieron en la esquina de la calle.

—Claro, no te preocupes, pero...

— ¿Por qué no dejé que le mencionaras tu edad? Pensaría que eres un asaltacunas...

— ¡Si sólo tengo dieciséis!—Se quiso justificar.

—Sí... Dile eso a la pared que agujeró. —Dijo con sarcasmo.

—Derek nos está esperando a la vuelta, él nos llevará al evento. —Le explicaba, caminando del otro lado de la esquina de la calle.

— ¿Y por qué a la vuelta?—Le preguntó.

—Ah, eso es porque si se estacionaba enfrente de tu casa, se estaría burlando de todo lo que yo hiciera...—Se ruborizó.

Por tal confesión, Suemy no pudo esconder la pequeña sonrisa que se formó en sus labios. —Entonces hay que apurarnos ya...

— ¡Sí!—Se animó, había notado la pequeña sonrisa de Suemy. —Él tiene un MazdaCX911 blanco, así que cuando veas ese auto....

—Ya lo vi...—Le dijo, señalando el carro que se encontraba pasos más adelante. —Parece que sí cabemos muy bien todos ahí.

— ¡Sí! Es un alivio. Todos nos esperan. —Y se fueron en dirección al carro que blanco que estaba estacionado.

—Muy bien, recuerden esto: —Derek les advertía, desde el auto, a sus demás compañeros. —Este es un evento formal así que por favor, guarden la compostura. —Tenía mucha seriedad en su voz.

—Sí... —contestaron los tres chicos restantes: Maney, Tim y Zuley, ésta última, sentada delante con Derek. La puerta del auto se abrió, para que Iker y Suemy pudieran entrar.

—Ya estamos...—Comentó Iker, dejando que Suemy entrara primero al auto, y después entró él. —Felicidades atrasadas Maney.

— ¿Tim... nunca te quitas tu gorra?—Preguntó Suemy, mirando que Tim, a pesar de traer un traje azul marino, camisa blanca y corbata verde oscuro, traía puesta la misma gorra de siempre.

— ¡No! ¡es sagrada!—Le contestó, agarrando su gorra.

—Bueno.... Será mejor que ya nos vayamos...—Les aconsejaba Zuley.

—Sí, sí...—Los calló Derek, poniendo sus manos al volante y moviendo las palancas de velocidades. Pronto, arrancaron, la parte de atrás estaba apretujada con Tim, Maney, Suemy e Iker en ese orden.

—Estás manejando muy rápido Derek...—Zuley comenzó a regañar.

—Tú querías que nos diéramos prisa, ¿no?—Le decía en tono burlón.

—Sí, pero quiero llegar viva.

—Ya, ya...—Iker trataba de pararlos. —No peleen, recuerden que hoy tiene que ser un día alegre. ¡Vamos a ver a los Trinux de nuevo! Y en un evento completamente lleno de clase.

— ¡Es cierto! ¡Casi como regalo para Iker y Maney que cumplen 16 años en este mes! ¿No es una linda coincidencia?—Zuley estaba muy alegre, y les sonreía.

— ¡Claro!—Iker sonreía más. Era el primer cumpleaños en mucho tiempo que podía decir, celebraba a lo grande.Sin atender las peticiones de Zuley, Derek aceleró todo lo que pudo para llegar a tiempo al lugar señalado...

Memories 2 - Los TrinuxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora