Élite Carmesí [Jin X Jisoo]

Es Posible Una Guerra?- Narrado Por Kendrix

Veo a Jendren alejarse y siento como se me rompe y estruja el corazón. Entiendo que esté herido, pero casi que le suplico que no me deje aquí sola, sin embargo se fue y me dejó.

-Ken, vamos a casa- dice Crimson colocando su mano en mi hombro.

Yo me libero bruscamente de su agarre. No quiero que me toque. El único lugar en el que me sentía segura y lograba que me olvidara de esta maldita amnesia era en el castillo y Crimson acaba de arruinarlo con todas las tonterías que no deja de lanzar. Estoy sumamente enojada con el.

-Sueltame, contigo no iré a ningún lado. Lo has entendido?

-Pero qué te sucede? Por qué te enojas conmigo? Es con el imbecil ese con quien deberías enojarte.

-Si? Pues tu eres el imbecil con el que estoy enojada. Arruinaste todo. En serio no tengo idea de lo que hablaste, no recuerdo nada de eso, de verdad. Tampoco me interesa seguir con ese plan que supuestamente teníamos, así que puedes irte olvidando de eso también, ok? No quiero ser parte de esto. Así que no vuelvas a buscarme.

-Kendrix, espera, no puedes hacer eso, tienes que volver con tu madre.

-Lo siento pero ni siquiera recuerdo tener madre y hasta que no lo haga no volveré a ningún lado que no sea el castillo. No confío en ti y mucho menos en ella.

-Se desatará la guerra cuando ella lo sepa, Kendrix. Y todo será tu culpa.

-De qué hablas? Se desatará la guerra porque no vuelvo con mi madre? No seas ridículo, sólo exageras.

-Te juro que no. No exagero. No sabes lo importante que eres para tu madre y para el clan. Debes volver.

-Pues dile que se vaya olvidando de que no s mi madre. No quiero saber nada ni de ti, del clan, ni de ella, ni de nadie. Déjenme en paz, no me vuelvan a buscar. Entendiste?

Lo miro fijo, para que comprenda que es mi última palabra. Y Crimson está furioso, se le nota. Pero no me importa, no me haré cargo de sus sentimientos. Doy media vuelta y comienzo a caminar nuevamente hacia el castillo. Recuerdo más o menos el camino de vuelta, solo espero no perderme.

No se cuanto tiempo ha pasado, seguramente más de hora y media, cuando por fin consigo llegar al castillo. Todos están adentro, lo cual es entendible porque deben ser más de la una de la mañana.

-Señorita. Que busca?- me pregunta uno de los guardias de turno.

-Hola, discúlpeme. Yo estoy viviendo temporalmente aquí. Me han abandonado en el bosque, por eso llego a estas horas. Podría por favor abrirme la puerta?

-De ninguna manera- me contesta tajante.

-Por qué no? No tengo otro lugar a donde ir.

-Pues no puede quedarse aquí. Hace un par de horas atrás hubo un ataque aquí, muchos resultaron heridos, es por eso que nadie entra ni sale de este lugar.

-Señor, por favor, no puede dejarme aquí afuera.

-Claro que puedo- dice dándome la espalda y comenzando a marcharse.

Mientras lo veo alejarse comienzo a ponerme muy nerviosa. Aquí afuera hace bastante frío y no creo que pueda encontrar un lugar donde pueda descansar y permanecer minimamente abrigada. Aunque no me guste demasiado la idea, tendré que buscar una forma de entrar al castillo, no puedo quedarme aquí afuera.

Comienzo a dar vueltas por todo el perímetro buscando alguna rendija o abertura por donde pueda ingresar a la fortaleza, pero no la encuentro. Aunque... Si me trepo por el enrejado de manera silenciosa, me encontraré en el jardín de tulipanes en pocos minutos, luego no tardaré mucho en correr hasta mi habitación para recostarme en esa confortable cama para dormir bien abrigada. Ese pensamiento me motiva muchísimo. Así que vigilo a mi alrededor que no haya nadie, pero lamentablemente los guardias están acercándose a la zona en donde estoy, así que me escondo entre los árboles.