Curiosa Criatura

~78~

-Que bueno tener a la familia unida-

Lía entro con una pistola en su mano, Elle tenía algo parecido a una bazuca pero mucho más pequeño, quizás con eso volaron la puerta, no es muy poderosa ya que solo rompieron los seguros, las grandes estructuras aún están en su sitio

Todo está más frío que lo normal, soy consciente que afuera está nevando pero adentro del castillo no suele hacer frío, pero puedo jurar que éste es diferente al que se siente cuando estás afuera mientras nieva, éste frío asusta y cala los huesos

Tengo un mal presentimiento

-Te he dicho alguna vez qué te pasas de intensa?, pero no precisamente en el buen sentido-

-Siempre lo has pensado, pero nunca me lo has dicho Regina-

Entraron al salón muchos grandulones que venían fieles a Lía y Elle, todos con armas, André y yo estamos atentos a los costados de Selene, los tres reguardando la guadaña la cual sin que nos diéramos cuenta ya estaba en las manos de Selene, todos estamos bastante nerviosos pero la Reina está tranquila y sonriendo confiada casi que felíz

Qué estará tramando Selene?

Qué fue lo que vieron ella y Regina?

-Entreguen la guadaña y el trono-

-Ja, sí claro-

La Reina recibió un disparo en su hombro derecho por su corta oración

-Madrina-

Regina, con el miedo grabado en esos ojos negros, ahora está junto a nosotros intentando que no caiga más sangre de la herida

-Eres capaz de matar por el poder?-

Lía soltó una fuerte carcajada

-Mi pequeña Regina, no le has dicho verdad Selene?-

Las miradas de las tres mujeres que encontraron, más ninguna de las dos adultas dijo nada

-Decirme qué?, deja los juegos y habla claro-

Regina está de pie, frente a nosotros mirando a Lía con mucho odio y a la vez nerviosismo

—Digamos que aquí le llaman accidente de tráfico a seis disparos en el pecho, tu querido padre y abuela se fueron al más allá por mi pequeña pistola, me ahorró tu abuelo su propia muerte, ahora sólo queda Selene, por último tú y ya está, el trono es mío—

Regina recibió un disparo en la pierna izquierda, cayó de rodillas, luego siguió el brazo de André y el otro hombro de Selene haciendo que la gran guadaña caiga al lado de Regina

—A ti no te dispararé bestiecilla, Marcos ya te hizo sufrir mucho, que por cierto felicidades Regina, de lo fuerte que le has estirado los brazos hacia atras le has fracturado la columna, quedó cuadripléjico—

—Por qué no ser lo que mi padre siempre creyó que eras?, una mujer bondadosa, por qué no cambiar y llegar al poder de una manera justa, en vez de ir por el buen camino le robaste la vida de tres inocentes, maltrataste a una mujer que nisiquiera conoces y destruiste una familia—

—No seas ingenua Regina, eres muy joven para darte cuenta pero el poder y la felicidad son cosas que deben tomarse, ahora quítate y dame la guadaña—

—No—

—O te quitas o mato a todo el mundo maldita niña insolente—

Elle intentó acercarse a buscar la guadaña del suelo pero Regina le arrojó el pequeño y ahora cerrado cilindro haciendo que su seguro se salga, rompiéndole la nariz a la pelirroja dejándola inconsciente con la gran barra de titanio sobre ella

—Regina quitate—

La princesa se puso de pie como pudo mirándome a mí y a sus padrinos agarrando sus heridas, Selene estaba perdiendo mucha sangre, André y yo sosteníamos cada hombro

Regina extendió sus brazos a los costados en forma de cruz, cubriéndonos

—Tu problema soy yo, tu problema siempre fui yo, la maldita niña de la calle que el príncipe recogió, no soy de ésta familia, al igual que tu yo soy una don nadie, pero a diferencia de ti, a mí me tendrás que matar a para llegar a ellos—

Lía río ante las palabras fuertes y frías de la princesa

—Será un placer—

Había disparos por todo el cuerpo de Regina, la sangre caía por sus brazos, por su torzo, sus piernas, todo es mucho más notorio ya que ella aún tiene puesto su conjunto de hacer ejercicio, la sangre espesa y roja contrasta perfectamente con su blanca piel

Las lágrimas no pueden parar de caer por mis ojos, pero aún intento hacer fuerza en los hombros de Selene que está cerca de quedar totalmente inconsciente, ella no reacciona se está por dormir

No sabe lo que está pasando

Regina escupió sangre, pero sigue de pie delante nuestro

-Tu espíritu noble es algo que siempre admire, pero aveces sólo debes quitarte del medio-

Lía engatilló su pistola y sonrió apuntandole a la cabeza

—Larga vida a la Reina—

El último disparo le dio en la frente a la princesa que cayó de rodillas

Mi cabeza viaja por los recuerdos donde ella es la protagonista, la primera vez que nos vimos en la caye, cuando la vi en el salón de clases, nuestra primera cita, nuestro primer beso, cuando me dijo "Te Amo", cuando me pidió matrimonio, momentos que siempre voy a atesorar en mi corazón

Cayó al suelo boca abajo al lado de la guadaña, cayó Muerta...