Capítulo 16 - Misión de Reencuentro

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HACE DOS SEMANAS
(Exactamente cuando Miku abandonó el castillo)

Miku y Maih avanzaban por el sendero que alejaba al imponente castillo de sus vidas, al menos por ahora. La noche comenzaba a envolverlo todo, y la joven de cabello celeste volteó una última vez para observar la majestuosa estructura perderse entre las sombras.

Miku: (pensando) Espero que todo salga bien...

El silencio del momento fue interrumpido por Maih, siempre directa y sin paciencia para las melancolías.

Maih: Bien, ¿dónde está la casa de tu amiga?

Miku: ¿Eh? Pero... aún no podemos entrar a la casa. Hay que pagar la deuda primero.

Maih: ¿Así? (arquea una ceja) Entonces dime, ¿dónde piensas dormir esta noche?

Miku: Pues... estaba pensando en buscar algún hotel...

Maih: (interrumpiendo) Claro que no.

Miku: ¿Eh? Entonces, ¿qué quieres que hagamos?

Maih: Ahora ya es de noche. Nos iremos a la casa de tu amiga y dormiremos ahí. Nadie se dará cuenta, y por la mañana pagamos la deuda.

Miku: Bu... bueno, supongo que es un buen plan. Nos ahorraríamos tener que pagar un hotel...

Maih: ¿Ya ves que sí? (sonriendo de manera triunfal)

Miku: Está bien, es por aquí. (señalando)

La caminata continuó hasta llegar a la casa de Jill, una estructura que se asemejaba más a una mansión que a un hogar convencional. Desde afuera, un amplio patio y un ambiente tranquilo parecían darles la bienvenida, aunque de manera silenciosa y sobria.

Miku: (mirando a su alrededor) Wow... es mucho más grande de lo que recordaba.

Maih: (con una calma fría) Parece que tu amiga ha tenido mucho éxito.

Miku: Sí... Aunque ahora me pregunto, ¿de cuánto era la deuda?

Maih: Mañana lo recordaremos. Por ahora, entraremos con cuidado.

Ambas avanzaron hacia la entrada principal, asegurándose de no hacer ruido. La puerta cedió sin resistencia, lo que indicaba que Jill no solía preocuparse por visitas inesperadas, o quizás confiaba demasiado en la seguridad del barrio. Una vez dentro, el lujo de la casa las dejó sin palabras.

Miku: (sorprendida) Esto es... genial...

El interior era impresionante: cinco habitaciones amplias, cada una con su propio baño; una cocina espaciosa con electrodomésticos de última generación; una sala enorme que parecía abarcar el espacio de dos habitaciones de lujo; un comedor con una mesa lo suficientemente grande para acomodar a diez personas; y un segundo piso con detalles que reflejaban un gusto refinado. Incluso había baños adicionales en la sala y el patio.

Maih: (observando con serenidad) Sin duda, tu amiga ha ganado muchos zenis.

Miku: (todavía maravillada) Sí... Pero, ¿es en serio que nadie notará que estamos aquí?

Maih: Nadie lo hará, si te calmas y dejas de susurrar tan fuerte. Ahora, busca una habitación y descansa. Mañana tenemos que resolver esa deuda y prepararnos para la misión.

Miku: (asintiendo) Está bien.

Cada una tomó una habitación distinta. Miku eligió una decorada con tonos pastel y detalles elegantes, que contrastaban con el caos de sus pensamientos. Al recostarse en la cama, sintió un peso en el corazón: estar lejos de Luka nunca era fácil.

Amor Elemental (Miku x Luka)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora