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— ¿desde cuándo es tan importante para ti ir a rendir? — preguntó wonwoo con el ceño fruncido pero sin dejar su tono burlesco.

junhui, quien estaba muy apurado, lo miró un segundos y continuó guardando todo lo necesario en su mochila.

— simplemente no quiero volver a repetir el año. — contestó por lo bajo.

y en parte era cierto, no quería volver a hacer el último año. pero, la otra parte se debía a que chan siempre le decía que debía estudiar, que no se saltara clases, que era muy capaz de graduarse. y él, por alguna razón, quería hacer todo lo que a chan le hubiera gustado que haga. algo tarde, claro.
aunque no había estudiado mucho, estaba seguro de que podría aprobar. sólo que su cabeza estaba en otro lado, no se sentía en el mundo. extrañaba dormir abrazado a su pollito de cabellos rosados, extrañaba despertar y ver su hermoso rostro dormido, lleno de paz. extrañaba sentir como sus energías eran recargadas con cada beso que le daba.

extrañaba todo.

pero ya era tarde. no supo aprovecharlo, bueno, en realidad no supo valorar a quién tenía a su lado. y se sentía un gilipollas, por no haberse dado cuenta de todo lo que hacía dino por él, de todo lo que él le causaba. sabía por demás que no era el indicado en la vida de lee. no era con quien debería pasar el resto de su vida, porque no le hacía bien. y no sabía cómo cambiar aquello.

las clases habían acabado hace casi un mes, por ende, ahora eran las mesas de exámen para aquellos que no habían aprobado. y jun era parte de esos aquellos. pero, para su sorpresa, sólo debía rendir dos materias. una de ellas era hoy, e iba a aprobarla. a chan le gustaría que la apruebe.
cómo le hubiese gustado que su pollito estuviera allí dándole ánimos, diciéndole que iba a aprobar. pero no estaba. estaba solo, porque wonwoo se había ido con mingyu a quién sabe dónde. y de mínghào ni hablemos. no habían vuelto a dirigirse la palabra desde aquel día, y no pensaba hacerlo. ya demasiados problemas tenía como para aguantarse a un mínghào gritándole por todo.

bueno, había obtenido un 60/100, estaba aprobado. aunque le hubiera gustado tener una nota un poco más elevada, estaba conforme con su sesenta. se sintió levemente más relajado, ahora tenía dos meses para estudiar y sacar matemática.

salió del salón con la hoja en manos en dirección a la salida, pero cierto enano de cabellos (ahora) grisáceos que rebotaban contra su frente, lo hizo frenar y sentir que el aire se le acumulaba en el pecho. ¿cómo aquel color podría quedarle tan bien a una persona? ya no había rulos, ni uno. era un cabello liso y suave, muy liso.

no sabía si acercarse sería lo mejor, pero necesitaba, por lo menos por un segundo, sentir su aroma a manzanas y oír su melódica voz. así que, armado de valor, caminó hacía él, quien estaba a punto de entrar a la biblioteca.

— chan — dijo fuerte y claro llegando hasta él. el mencionado volteó con los ojos más abiertos de lo normal. un delicioso aroma a cítricos invadió sus fosas nasales, haciéndolo sentir que con eso ya podría sobrevivir toda la semana. pero de inmediato entró en crisis, no tenía ni idea de qué decirle. — ¿cómo estás? — genial, junhui, genial.

chan frunció muy levemente el ceño.
— bien...— murmuró y se dio vuelta dispuesto a seguir su camino, pero no se dio por vencido y lo sostuvo suavemente de la muñeca. el menor, a la defensiva, se soltó con un poco de brusquedad.

— yo... lo siento — se disculpó por haberlo agarrado. — me gustaría... me gustaría que hablemos. — dijo en voz baja.

pero supo que había dicho lo equivocado cuando vio una expresión enojada e irritada en su rostro.

— ¿hablar de qué? — preguntó irónico. — no quiero hablar, no quiero volver a verte, ¿qué no lo entiendes? — preguntó harto y con los ojos cristalizados. — ¿para qué quieres que hablemos? ¿para seguir haciéndome daño? ¿para eso? déjame en paz. — pidió y posteriormente entró a la biblioteca hecho humos.

¿era tarde para decir que estaba más que arrepentido?

(...)

llegó a su monoambiente y antes de entrar cogió un sobre blanco del suelo. se estaba planteando poner un buzón. entró y se tiró en la cama frustrado. ¿cuándo iba a salirle algo bien? deseaba poder regresar en el tiempo, al día que le pidió ser novios a chan, el día en el que probablemente fue más felíz. aquel día en el que sus manos tocaron por primera vez su delicada cintura, cuando sus labios se conectaron con los de él por primera vez, cuando lo vio sonreír tan brillante y tan felíz por primera vez. sí, el mejor día de su vida.

dispuesto a dejar de pensar en ello, abrió el sobre que yacía en su pecho y comenzó a leerlo con atención.

Para: Wen Junhui.
De: Zhang Yixing.

Me complace informarle, desde la presente edición de Universal Information, que ha sido aceptado en el puesto de informática robótica en la ciudad de Beijing.
Se lo esperará en la misma el día 24 del presente mes, donde se le otorgará los días hábiles necesarios para acabar sus estudios con responsabilidad. Sin más que agregar, mis más sinceras felicitaciones.

Zhang Yixing.

imposible.

no podía creerlo. ni siquiera recordaba (hasta ahora) que había hecho un exámen para entrar a una empresa china, el año pasado. no creía que iban a aceptarlo, más que nada porque no había terminado sus estudios.

si mal no recordaba, quería entrar allí porque extrañaba china, además de que en ese momento estaban muy alejadas las posibilidades de que él y chan hablaran siquiera dos palabras.
estaba felíz, claro que lo estaba. pero, ¿realmente quería irse?

sí, extrañaba con todo su cuerpo a su país, sus amigos de la infancia, todo. pero no se sentía demasiado capaz de irse y dejar a chan, wonwoo, su casa. no sabía, no estaba seguro. aún tenía tres semanas, iba a pensarlo, a analizarlo y a decidir qué hacer.

(...)

— venga, jun, piensa en qué quieres hacer tú. no pienses en mí, ni en chan, piensa en ti. — retó wonwoo secándose el cabello con una toalla.

el mayor suspiró, intentaba hacerlo, realmente estaba intentando pensar en él.

— lo intento, pero no lo sé. — dijo frustrado colocando una almohada en su rostro.

— sabes, eres mi mejor amigo, te quiero y mucho, pero en esta decisión no cabo. estoy muy felíz y orgulloso por ti, has logrado algo que venías planeando hace dos años, jun. piénsalo, ¿qué quieres hacer? ¿qué te haría felíz? — preguntó dejando el trozo de tela por algún lado y se sentó en el colchón mirando a su frustrado amigo.

— yo... quiero ese puesto, realmente lo quiero y lo anhelo. eso me haría felíz. — confesó triste.

sólo que dejar a chan no me hace felíz...

(...)

1157 palabras.

ea, sé que os habéis quedado con la intriga de qué le respondió chan a soon,en el próximo cap se sabrá.

amar es difícil. -  juno svt.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora