Seré lo que necesites

1- Honestidad

Joaquín dueño de una de las mejores y más importantes marcas de ropa en México y varios países, es considerado un gran icono de la moda a sus cortos veinticuatro años, a pesar de dirigir una gran compañía a su edad, es alguien muy responsable y centrado en lo que quiere. Justo en este momento está por sacar una nueva temporada de ropa, está en su oficina, cuando escucha que alguien toca la puerta.

— Pasen —dijo  el castaño dándole el paso a quien tocaba la puerta, mientras revisa unos papeles bastante importantes.

— Joaquín le traigo noticias —mencionó su asistente Ana con una gran sonrisa.

— Dime —pidió Joaquín algo curioso por la emoción que tiene su asistente.

— Acaban de conseguir la nueva imagen principal para la nueva temporada, es el cantante Emilio Osorio —murmuró la joven.

— Creí que no hacía, promocionales para marcas de ropa —susurró el menor, ya que él mismo cantante lo había dicho.

— Supuestamente no, pero al parecer cambió de opinión, se presenta mañana a las nueve de la mañana —avisó Ana.

— Está bien, diles a los camarógrafos que se preparen y a los de vestuario que más tarde voy a terminar de elegir la ropa, puedes retirarte —comentó Joaquín regresando toda su atención a los papeles.

— Por supuesto —dijo la joven antes de retirarse.

[...]

Emilio Osorio un gran cantante muy reconocido, tiene múltiples premios, tiene once discos en el mercado, acaba de terminar su última gira. Posee un gran éxito para sus veinticinco años, ahorap mismo se encuentra en su mansión en la ciudad de México descansando en el momento que recibe una llamada.

— Bueno ¿quién habla? —preguntó el rizado ya que no vio de quin se trataba antes de contestar.

— Caperucita roja... Idiota ¿no reconoces a tu representante y mejor amigo? —dijo Diego del otro lado de la línea.

— Ah ¿qué necesitas? —intrigó el mayor restándole importancia al insulto.

— Se que dijiste que necesitabas un descanso, pero te conseguí que seas la imagen principal de la marca del niño bonito —musitó con gran entusiasmo el joven.

— ¿Enserio? ¿Hablamos de Joaquín Bondoni? —preguntó Emilio levantándose, oues le sorprendió demasiado aquella noticia.

— Por supuesto que sí, recuerdo que me dijiste que se te hacía lindo y su marca te ofreció trabajo y no dudé en aceptar —mencionó Diego sonriendo ampliamente sabía que la noticia le gustaría.

— Vaya normalmente te mataría por hacerme trabajar en mi descanso, pero hacerme pasar tiempo con Joaquín es una buena oportunidad —susurró el rizado pensando en volver a ver a aquel joven que vio en una premiacion.

— De hecho yo te acompañaré pues hasta donde sé la hermana de Joaquín estará ahí y necesito conocerla.

— Por supuesto que sí—aceptó de inmediato.

— Necesitamos estar mañana a las nueve —avisó Diego antes de terminar la llamada.

[...]

Al día siguiente, cada uno por su cuenta se levantó, baño, desayuno y se dirigió a la empresa. El primero en llegar fue Emilio acompañado de su amigo Diego.

— Hola, soy Emilio y él es Diego, se supone que tengo sesión de fotos dentro de cinco minutos —habló dirigiendose a la recepcionista.

— Claro, tendrá que esperar, ya que el joven Joaquín no ha llegado, si sube al cuarto piso, la segunda puerta a la derecha está el estudio ahí lo puede esperar —indica amablemente.