20- Descanso

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Era domingo por la mañana, era el día de descanso tan merecido por la semana tan estresante que tuvieron. A pesar que Joaquín dijo que se tomaría un descanso después de el exceso de trabajo por la línea de ropa, al parecer no lo logró, tenía que ver diferentes problemas con la revista que publican además de alguna situación que tuvo con los encargados de la distribución de su línea de ropa. Por su parte Emilio no era tan diferente solo que el estaba trabajando muchísimo en la producción de su nuevo disco, aunque ya habían terminado de grabar las canciones les faltaban los videos musicales los cuales eran bastantee pasados de grabar. Ayer cuando llegaron a la casa por eso de las nueve de la noche, ni siquiera cenaron y ambos de inmediato se fueron a dar un baño, donde se noto el cansancio del rizado, ya que diente todo lo que duró el baño ni siquiera intentó algo sexual, lo cual era imposible en otras situaciones. Al salir del baño se colocaron unos boxers y se acostaron cayendo totalmente rendidos en los brazos de Morfeo.

Pasan de las once de la mañana, Joaquín se encuentra perfectamente dormido, pero para su desgracia el sol que entra por la ventana refleja directo en el rostro, se voltea intentado ignorar los rayos del sol, pero a pesar de su intento el sol lo sigue molestado, abre los ojos resignados a ya no poder seguir durmiendo. En ese momento es cuando se da cuenta de que seguramente esta cerca de medio día es cuando el sol pega en su lado de la cama, sonríe al recordar la batalla que tuvo con Emilio al exigir que le diera el lado derecho de la cama que era donde dormía Emilio, aunque ellos ya habían dormido juntos no se habían preocupado por los lados de la cama, ya que solo dormían en juntos en algunas ocasiones; después de una ligera discusión, Emilio sedio a darle el lugar. Cuando terminó de recordar lo sucedido, se levantó de cama miro a Emilio plácidamente dormido, sonrió inconscientemente, camino hacia el baño, hace sus necesidades y sale del mismo. Baja a la cocina, enciende la cafetera mientras ve que puede preparar de desayuno, al final se decide por unos huevos revueltos. Casi cuando termina el desayuno siente como besan su hombro y en seguida unas manos en su cintura.

— ¿Qué debo hacer para encontrarte todos los días así? —menciona con una gran sonrisa, Joaquín se separa en poco de él para poder voltearse y quedar frente a frente — Necesito que cocines más seguido en boxers, te vez tan sexy —susurra mientras se acerca a besar el cuello ligeramente.

Joaquín jadea ligeramente por la sensación que le provoca —Emi hay que desayunar, antes que cualquier otra cosa —pide pero Emilio lo ignora tomándolo de los muslos para cargarlo dejándolo sentado en la mesa de la cocina.

— Joder bonito, algo rápido he pasado todo la semana sin ti —continua besando el cuello del menor pero este lo toma de los hombros deteniendo los besos por completo — ¿Qué pasa?

— Solo no tengo ganas de tener sexo ahora —murmura sinceramente, como puede separa a Emilio de él, logrando bajar de la mesa, incorporándose en una de las sillas.

— ¿Te sientes mal acaso? ¿Te duele algo? —pregunta al notar la expresión cabizbaja que tiene Joaquín— Me estas preocupando

— No es que me sienta mal, si acaso me duele un poco la garganta solo eso, no tienes nada de que preocuparte tal vez solo no tengo ganas en este momento. Lo lamento —lo último lo susurra bajando la mirada casi logrando que Emilio no lo escuchara

— ¡Ey! No —toma el mentón de Joaquín logrando que suba la mirada — Jamás en la vida te disculpes por algo así, si tu no te sientes cómodo para hacerlo no haremos nada, ambos debemos sentirnos cómodos, así que jamás me pidas perdón por no querer tener sexo ¿de acuerdo? —asiente el castaño como respuesta— Muy bien ahora usted señorito —separa la silla de la mesa para poder tomar los muslos de su pareja cargando lo— Vamos a llevarlo a la sala para que este más cómodo — lo deja sentado en uno de los sofás mientras él va por el desayuno y una cobija para taparlo —No deberías estar tan descubierto bonito —lo cobija y le da el desayuno

Seré lo que necesites Donde viven las historias. Descúbrelo ahora