Overlord volumen 15 - La ciudad Blanca de Ebasha (Fanfic)

Capítulo 1 - La tierra prometida (Parte 7)

Tras un breve encuentro, Serg se encontraba preparando su equipamiento que había sido traído a este lugar por uno de los guardias de la ciudad. Aparentemente, el permiso de portar armas dentro de la ciudad, también podía ser emitido por Aura.

Serg pensaba en cosas varias mientras preparaba su equipamiento. Principalmente, trataba de disipar su nerviosismo. Pronto la mujer que enfrentaría en breve cruzo la puerta para prepararse para la batalla.

- Eres bastante rápido ¿No es así?

- ¿Qué quiere decir Leinas-Sama?

- Hablo del tiempo que te tomo prepararte.

- Soy un soldado, por lo que es bastante normal ¿Verdad?

- Ya veo...

- ¿Puedo preguntar algo?

- Claro ¿Qué se te ofrece?

- ¿Qué son las sacerdotisas? Escuche muchas cosas sobre ustedes, pero la verdad no entiendo muy bien a qué se referían.

- Mmm... Eso es algo complicado de responder en este corto tiempo, pero para resumir... supongo que seriamos algo como las protectoras de los templos de los Seres Supremos.

- E-Espere... ¿Quiénes son estos Seres Supremos?

- Existencias más allá de la humanidad ¿No es obvio?

- ¡Eh! No me refiero a...

- ¿Están listos?

Una pequeña asomaba su cabeza para verificar que los preparativos hayan sido completados satisfactoriamente.

- Emilia-Sama, ya esta todo preparado.

- En ese caso apresúrate. Sabes que a Aura-Sama no le gusta esperar.

- L-Lo siento. Serg esta pequeña discusión tendrá que esperar hasta otro momento.

- S-Si.

Los contendientes caminaban hacia el centro de la arena para dar inicio a su combate. Si bien, Leinas había sido aceptada recientemente, como una de las sacerdotisas del templo. Ella no podía estar más orgullosa de dicho título y defendería el honor de su posición hasta su último aliento y hoy sería el día en que su resolución sería puesta a prueba, al igual que las dos sacerdotisas principales, Neia y Emilia.

Era cierto que las sacerdotisas gozaban del mismo estatus, pero era una norma no escrita considerar a las pioneras sus líderes. Sumado a esto, Neia y Emilia se habían sometido al ritual de los dioses y regresado con vida del infierno. Aunque uno diga regresar, lo cierto era que Emilia vivía en el Infierno, por lo que era llamada extraoficialmente por sus hermanas la Sacerdotisa Infernal.

Leinas había visto brevemente al guardián que se encargaba de la protección de ese sitio, pero Emilia le dijo que era una existencia igual o superior a Jaldaboth. Tras esa afirmación sus otras hermanas parecían bastante inquietas, pero era bien sabido del don de Emilia para desenmascarar las mentiras, por lo que mentirle resultaba extremadamente difícil. Este fue el motivo por el que pese a la angustia que les causaba, simplemente decidieron tomar las palabras tal como fueron dichas sin darle muchas vueltas al asunto.

Aparentemente, el guardián infernal no había dejado su morada salvo en la ocasión en la que Emilia enfermo. En el caso de Neia, ella casi muere a causa del ritual. Su agonía se alargó aproximadamente un mes, pero ella dio testimonio de los esfuerzos de Emilia y aquel Demonio por mantenerla con vida.