Capítulo 3 - Dos caminos

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Hoburn, la antigua ciudad capital del Reino Santo, había cambiado mucho desde que el nuevo gobernante había tomado el control de la misma. Ahora era la ciudad sede del mausoleo principal del Dios de la Muerte. El antiguo palacio real había sido convertido en un gigantesco mausoleo dedicada exclusivamente a rendir culto al nuevo rey del país.

La sacerdotisa a cargo de este sitio era Calca Bezzarez, la antigua monarca de esta tierra, quien voluntariamente había cedido su puesto al nuevo rey, y no solo eso, también apoyaba su gobierno abiertamente ante el público.

Las sacerdotisas del rey eran consideradas tesoros nacionales. A cada una de ella se la había asignado un lugar para vivir y proteger. Si uno se acercaba a cualquier ciudad grande dentro del Reino Hechicero y buscaba la capilla central, tenía altas posibilidades de encontrar la sacerdotisa a cargo de la protección de aquella ciudad.

Hoy la capilla central a cargo de la Sacerdotisa de la estrategia y la sabiduría, recibiría tres visitantes bastante peculiares. Tres esclavas que habían sido recomendadas por el rey para realizar las pruebas.

Así fue como un elegante hombre lagarto investido con una reluciente armadura de cuerpo completo, decorada con púas que lo hacían ver bastante imponente, llegó a las puertas del mausoleo escoltando a tres mujeres cuyas orejas habían sido cortadas.

Las mujeres portaban ropa que un esclavo llevaría; realmente no se debía a que no se les haya proporcionado ropa adecuada, ellas sencillamente seguían tomando su ropa de esclavitud, ropa harapienta, en lugar de las nuevas prendas que se les había proporcionado.

Si uno las miraba detenidamente notaria que estaban profundamente asustadas y nerviosas la mayor parte del tiempo. Aparentemente, las elfas creían seguir siendo esclavas, pero este realmente no era el caso, si ellas hubiesen decidido vivir tranquilamente en la tierra de ensueño a la que se las había llevado, probablemente nadie les hubiese dicho nada.

El hombre lagarto se acercó a los guardias que custodiaban las puertas del mausoleo, y habló con uno de ellos. Admiro por última vez el exquisito diseño y arquitectura de aquel mausoleo, estos templos eran llamados de varias manera, pero "Templo de la muerte", era el nombre más usado con diferencia, sin embargo, cada templo tenía el nombre del título de la sacerdotisa lo custodiaba.

- Hola. Remedios-San, Lian-san, ha pasado mucho tiempo.

- Zaryusu-Sama, le damos la bienvenida al templo de la sabiduría.

- Pueden tratarme normal ¿Saben? Después de todo, somos compañeros que comparten el mismo rango.

Los guardias se habían arrodillado ante este Demihumano debido a que lo consideraban uno de sus venerables maestros, debido a que se le había encomendado la tarea de subir lo más posible el nivel de los guardias antes de ser enviados a la prueba real.

- Entiendo, Zaryusu-San. ¿A qué debemos su visita?

- Se me pidió que trajera a las personas que harán la prueba de las sacerdotisas.

Después de darles un rápido vistazo Remedios resoplo involuntariamente.

- Zaryusu- Sama, si me permite ser honesta, dudo que estas mujeres sean dignas de tal cargo.

Remedios había cambiado mucho, pero hay ciertos hábitos y comportamientos que simplemente son difíciles de cambiar y ella seguía despreciando a personas que consideraba inferiores por su posición. Cuando las elfas la escucharon no pudieron evitar bajar aún más sus ya bajas cabezas y empezar a temblar.

- Si mi memoria no me falla, tu eres una criminal Remedios y eso no te impide ser la persona a la que le confiamos nuestras vidas.

Esa voz provino de una mujer con cabellera dorada que salía del interior del gigantesco mausoleo. Ante la voz remedios se retiró y realizó una respetuosa reverencia.

Overlord volumen 15 - La ciudad Blanca de Ebasha (Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora