Capítulo 34

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—Ustedes dijeron que no habia nadie ahi— El tono roto que se hacia cada vez mas notable en cada una de sus palabras; el cual parecio hacer reaccionar a Ian, quien se habia dado cuenta de la gravedad de sus palabras.

—Se lo que dijimos— Entonces una tercera persona aparecio: Percy. —Pero todo se realizo en base a la estrategia establecida por el cuerpo de seguridad de los Hermanos Newman Gill, y en el protocolo de emergencia establecido por el difunto señor Newman— la mirada superficial de Percy era lo suficientemente burlona que estuvo a nada de acompañar aquella con una sonrisa Estaba tan satisfecho viendo a Hero así. 

—El protocolo no dice eso— hablé enfrentándome a  Percy, quién me miraba burlón.

—Lo dice, cariño— puntualizó sonriente Percy.

—Me utilizaste...— las palabras de Hero tenían tanto dolor, que no me faltaban ganas de abrazarlo pero tenia miedo de que me rechazara. —Me hiciste salvar a tu familia, pero tu no fuiste capaz de salvar a la mía— una pequeña lágrima resbalo por la mejilla de Hero, quien ahora nos veía con dolor a los 3.

—De verdad ¿crees  que Ian Newman dejaria que su hermana anduviera con un Don nadie?—Una amarga risa broto de la garganta de Percy— Por dios, Hero; ¿Acaso no piensas?—

—Percy, cállate— La voz de mi hermano era demasiado seria, intentado disimular que estaba tan arrepentido por lo que había pasado minutos antes. Percy sonrió satisfecho mientras veía a mi hermano.

—Hero...— dije con un hilo de voz mientras trataba de acercarme a el, pero solo me miró como un cachorro asustado y se echó a correr. —Dime que no es verdad— voltee a ver a mi hermano asustada  pero, el solo miraba tras de mi viendo como Hero se alejaba por la playa —Ian, dime que no es verdad— repetí tomando su rostro entre mis manos, entonces sus ojos cristalizados se toparon con los míos y giro su cabeza, negando.

—Es verdad.

Una pequeña parte de mi corazon se rompió, Mi hermano jamas me había fallado, el no era asi; pero al parecer todo había cambiado.

Sin dirigirle alguna mirada a ninguno de los dos, gire sobre mis talones, decidida a buscar a Hero.

— Verónica, regresa aqui — Percy trato de tomar mi brazo, pero imitando a Hero me aleje de él.

—No iré a ningún lado contigo— El pánico en mis palabras era evidente — Eres un mounstro— la expresión en su rostro cambio de triunfante a seria y antes de permitirle decir algo más me eche a correr al mismo lado de Hero.

Hero Fiennes 

No tenia idea de cuanto tiempo llevaba alejado de el equipo, tampoco sabia si ya se habían ido y siendo sincero eso era lo que menos me importaba justo ahora. 

Estaba sentado en la orilla de la playa, contemplando las tranquilas olas acercándose y alejándose, cuando el sonido de unos pasos acercándose a mi, causaron que me alarmara.

—¿Hero?— por un momento pense haber escuchado la voz de mi hermano pequeño , pero al levantarla vista note que estaba equivocado, era Alex, quien me miraba con un alto grado de preocupación —Gracias, por defenderme— una sonrisa chueca se dibujo en sus labios.

Aparte la mirada mientras secaba algunas lágrimas y intentaba cambiar mi gesto, pero fue inútil.

—¿Por que no estas con Ainhara?— pregunte aclarando mi garganta, con tal de evitar que mi voz fallara.

—No me gustan las despedidas— aquellas palabras causaron que posará toda mi atención en él, cuando estuve a punto de preguntar; el hablo. —Me alejaré de ustedes— confesó.

—¿Por...?— fruncí el ceño.

El chico que estaba frente de mi parecía tan sereno, parecía que no le preocupaba en lo absoluto dejar a su hija pequeña sola.

—Causo más problemas estando aquí... De alguna manera si soy un traídor— admitió sin cambiar su semblante mientras veía el terreno azul. —La muñeca de ahinara tiene un GPS, lo noté hasta hace poco e intentaba deshacerme de ella pero siempre se me olvidaba; este GPS lo inserto Stefan a todos para evitar que escaparamos, pero hasta ahora lo note— Si la situación hubiera sido diferente, lo hubiera golpeado. — Solo quiero pedirte unas cosas: 1.- Hay personas que hacen cosas a su conveniencia y se que uno de  los Cassey es así; ten cuidado con Vero e Ian, 2.-  No seas un idiota, piensa Hero—Estuve a punto de replicar pero el hablo antes. —3.- Cuida a Ainhara y dale esto en algunos años — su voz sonaba melancólica y su mano, al entregarme la carta, temblaba.

—¿La dejaras?.

—Hay veces que cuando quieres cambiar, es demasiado tarde— en un abrir y cerrar de ojos su semblante tranquilo, desaparecio después de las lágrimas rebeldes,  cayeran —No quiero ser un Eerend, ya no quiero hacer daño a las personas— Arrepentimiento, arrepentimiento puro. —Me quitaron a Alika, mi vida y Ahinara; todo por mis acciones y por diferentes influencias; no dejes que te quiten a lo que amas realmente, lucha por ello— asentí, entonces Alex me abrazo y de manera incómoda lo acepte, unos minutos más tarde me soltó y finalmente dijo fin sinceridad. —Que tengas una larga y feliz vida, en este mundo de mierda—

Esas fueron sus últimas palabras, antes de que se alejara caminando por la orilla del mar con la muñeca en la mano y una pistola.

Desde ese día Alex paso a ser parte de la historia y sus consejos que ocultaban algo detrás, se conviertieron en clave, para descifrar los eventos futuros, pero eso aún no lo sabia.

(...)

El atardecer está vez fue agrio, lleno de reflexión, lágrimas y despedidas. había tomado una decisión firme y no la cambiaría por nada.

El sonido de la arena crugir bajo mis pies, me acompaño en todo momento antes de llegar a dónde anteriormente se había instalado el campamento.

«¿cómo estás tan seguro de que siguen ahi?» pregunto la molesta y tonta, voz en mi mente; y yo solo sabía que mi corazón y mi mente estaban confiados en que Verónica no me dejaría (Cabe mencionar que yo tampoco la dejaría) y por lo tanto Ian no la dejaría a ella.

Tal y como lo había planeado las camionetas aún estaban ahí, con un Percy furioso mirando hacia la playa junto a un Ian preocupado mirando a su hermana, quién estaba más adelante en la playa sentada.

—Hero— la chica de inmediato se levantó y corrio a mis brazos. —Crei que no regresarias— susurró asustada.

—Regrese por ti, a ti jamás te dejaria— admiti. —Solo por ti— hable viendo a Ian y Percy duramente.

The Start | The Eerend Virus #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora