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No Quiero Dormir

A veces algunos niños se pueden asustar muy fácilmente, como es el caso que te diré a continuación. Un niño de 7 años pasaba todos los días con su amigo Bobby, un oso de peluche que le encantaba, pero la amistad entre ellos se fue disminuyendo por cosas inexplicables. Te cuento.

Lian era un niño de 7 años que vivía con sus papás, mamá y papá. Era hijo único por lo que para mantenerlo distraido a falta de un hermano siempre le compraban juguetes. Ya sean carros, aviones, lo que se les ocurra, a Lian ya se lo habían comprado.

Un día, sus padres le regalaron a Bobby, un oso de peluche muy suave y al parecer lindo. De todos los juguetes que Lian tenía, éste le llamaba más la atención.

Pasan los días y era imposible separar a Bobby de Lian, hacía todo con el. Tanto para comer como ir a la escuela. Los demás juguetes ya ni sabía de su existencia.

Pero el comportamiento de Lian fue cambiando cada día más, le decía a sus papás que el oso de peluche cada noche mencionaba cosas que para el, eran aterradoras, y batallaba mucho para dormir ya que le daba terror que mientras estuviera dormido, se hicieran real.

Cuando sus papás escuchaban esas cosas le empezaron a preguntar quien era realmente el que no lo dejaba dormir. Lian les contesta nuevamente que su oso de peluche. Claro que esto dejó a los padres un poco raros debido a que el oso era imposible que tuviera algo si lo compraron en una tienda.

Llegaron a la conclusión que eran imaginaciones del niño y simplemente lo dejaron pasar. Una noche el pensamiento de los padres cambió completamente.

Eran las 8:30 de la noche y los papás hicieron la misma rutina para dormir a su pequeño hijo. Le pusieron la pijama, lo ayudaron a lavarse los dientes y le leyeron un cuento. A la hora de que terminaron de leerle, Lian le dice a su mamá 3 palabras las cuales fueron: " No quiero dormir".

Al escuchar esto, la madre le dice que tiene que dormir porque ya es tarde. Así que le da su osito, lo tapa y le cierra la puerta. Pasan unos 5 minutos cuando Bobby le habla a Lian. Tenía razón, el oso si hablaba realmente.

Lo mas aterrador de todo, es que su voz era muy gruesa, como si fuera un demonio. Le empieza a decir a Lian muchas cosas, por ejemplo que lo más divertido era cuando lo observaba dormir.

Tal vez tu te preguntes, si era tan aterrador el oso con Lian ¿Porque lo seguía conservando? Bueno, es que al principio el oso no hacia esas cosas, ni si quiera hablaba, pero conforme pasó el tiempo, esto fue empeorando. Y en ese determinado tiempo Lian le agarró mucho cariño y confianza al oso. Pensó que tal vez cambiaría. Lo cual no fue así.

Total, esa misma noche Bobby le dijo al niño que si se dormía, habría consecuencias. Que tenía que aguantar toda la noche despierto, sino lo iba a lamentar. Que también estaba vigilandolo.

¿Ustedes saben que tan difícil es aguantar una noche sin dormir? Ahora imagínate lo complicado que es para un niño de 7 años. Bueno, ahí ves al pobre Lian aguantando para no dormirse, pero lo inevitable tuvo que pasar. A eso de las 11:00 de la noche. El pequeño cayó dormido.

A la mañana siguiente los padres van a levantar a Lian, cual fue la sorpresa, no estaba, pensaron que tal vez había bajado a ver la televisión o al baño, entonces ahí van a buscarlo.

No lo encuentran por ninguna parte de la casa y se empiezan a desesperar. Deciden ir a checar a su cuarto nuevamente y en el momento en que abrieron la puerta, vieron algo que jamás se les olvidará. Bobby estaba en el piso, y de el colgaban cables y un pequeño micrófono. Era un oso de peluche que contenía una cámara y un micrófono.

Los padres llegaron a la conclusión de que un extraño había metido tanto un micrófono como una cámara al oso de peluche, pero la pregunta es ¿Como lo hizo? Y ¿Como supo donde vivían?.

Al Lian tener a Bobby siempre y llevarlo con el a todas partes, al secuestrador no le costó trabajo saber la dirección del niño, ya que cuando salía de casa el nombre de la calle estaba ahí. El extraño todos los días, veía al niño desde la cámara y a veces desde su propia ventana...

El niño, nunca fue encontrado... Y lo peor de todo, el secuestrador, jamás fue identificado.

¿Te sentiste triste o asustado? Comentamelo #Fabula Gótica