Adiós año Nuevo

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Mi nombre es Omar y quiero contarles mi historia. Era primero de enero del año 2013 cuando decidimos empezar el año con una gran experiencia en familia. Mi esposa Mary, mi hijo axel, y yo nos levantamos temprano para dirigirnos a una playa, la cual quedaba a una hora de distancia de nuestro pueblo. Como la mayoría de los argentinos llevamos carne para hacer un asado de año nuevo, con un poco de sueño y entre bostezos abrochamos los cinturones de seguridad y partimos hacia nuestro destino.

Era una mañana hermosa, el sol brillaba en el cielo azul sin ninguna nube que la interrumpa. Justo antes de ingresar a la ruta noto una cubierta mas baja que las demás, me bajo y observo un clavo encajado en la rueda, no me hice mucho problema ya que tenia dos mas de auxilio. Me tomo unos veinte minutos cambiarla así que subí apurado al auto y seguí camino a la playa. Mientras mi hijo iba entre dormido en el asiento trasero, mi esposa cebaba unos mates para despavilarnos y no caer en el sueño.


Los minutos pasaban y cada vez estábamos mas cerca de llegar, en el momento que estoy por tomar uno de los mates de mi esposa justo pasamos por un pozo, el movimiento hizo volcar el mate caliente en mis piernas, provocandome quemaduras y sin querer me desvio con el auto al carril contrario, al levantar la mirada alcanzo a observar un vehículo que venia de frente, pero con un movimiento veloz logre esquivarlo. Fue raro, en ese momento tuve una sensación extraña de ver pasar toda mi vida frente a mis ojos, en esa fracción de segundo pude ver o imaginarme el choque con el otro vehículo.

Frene al costado de la ruta, lo primero que hice fue chequear que mi esposa y mi hijo se encontraran bien, ninguno sufrió ni un rasguño así que seguimos. Luego de cinco minutos llegamos, por fin sanos y a salvo. Nos bajamos del auto, mi hijo corrió con entusiasmo hacia el agua, mi esposa se tiro en la arena a tomar sol, mientras yo buscaba todo tipo de ramas secas para iniciar el fuego del asado, sin darme cuenta las nubes habían tapado la mayor parte del cielo, el sol ya no brillaba, no le di mucha importancia y seguí buscando. A lo lejos escucho sirenas de todo tipo, de ambulancia, de policía, de bomberos.

Corrí de inmediato a avisarle a mi familia pero no logro encontrarlos por ningún lado, mi hijo ya no estaba en el agua, mi esposa ya no estaba en la arena,busco el auto y tampoco estaba. Entre en pánico, mi cabeza era una calesita que giraba a toda velocidad, sentía gritos, se me daba vuelta todo, luego sentí una presión en la cabeza, estaba a punto de explotar, no podía gritar, cerré fuerte los ojos y escuche en mi mente una frenada brusca y un impacto ensordecedor que me dejo helado.

Al abrir los ojos, me veo tirado en el asfalto con los ojos dados vuelta y mi cabeza rodeada de un charco de sangre, sin dudas me veía muerto. Mi vehículo destrozado, unos bomberos sacando a mi esposa y a mi hijo de adentro del auto, por suerte los dos con vida. Luego observo que hay otro vehículo volcado que se me hacia conocido. Ahí entendí todo, cuando se me volcó el mate en las piernas no esquive al auto que venia de frente, y recordé que luego de cambiar la cubierta subí tan apurado que olvide abrocharme el cinturón de seguridad, Por eso yo salí despedido y mi familia logro salvarse.

Siempre escucho a mi esposa pensar en mi, resuena en su cabeza mi nombre, Omar… Omar! Y yo acudo a visitarla. Ahora estoy muerto, me esperan miles de años vagando sin razón, espero que llegue el día de poder descansar. Mientras, visito desconocidos,me gusta ver que sienten mi presencia, que los observo. Si leíste mi historia no pienses tanto mi nombre… Tal vez pueda aparecer junto a ti!

#Fabula Gótica

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