Capítulo 12

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Luego de haber vivido ciento trece años, podía decir que había adquirido cierto grado de inmunidad a sorprenderme frente a distintos situaciones que ponía la vida en mi camino. Sin embargo, la escena que vi ante mi al llegar a casa luego de un largo día ayudando a Bella a empacar sus pertenencias en casa de Charlie me descolocó por completo, y aún más lo hizo la explicación de Edward al ver mi expresión perpleja mientras observaba a la manada perderse en el bosque en sus respectivas formas lupinas.

- Ya puedes cruzar el límite del pacto. Pero sólo tú, y también tienes prohibido cazar animales en su área.

¿Cómo demonios permitieron eso?

- Fue a pedido de Seth, como una especie de regalo de cumpleaños- respondió mis pensamientos.

Yo lo golpeé en el brazo.

- Te he dicho que no leas mi mente. Además, nada de esto tiene sentido. ¿De verdad piensas que me creeré que modifican un tratado de tantos años sólo por el cumpleaños de un adolescente que ni siquiera es el jefe de la manada?

Él se encogió de hombros.

- No fue tan sencillo como lo dices.

- Pero el resultado sigue siendo el mismo, Ed.

- Digamos que Seth se ganó una especie de derecho a hacer ese reclamo.

- ¿Qué puede haber...?- comencé, pero mi hermano me interrumpió, pasando un brazo sobre mis hombros y comenzando a guiarnos a ambos al interior de la casa.

- Ya deja de pensar tanto y disfruta de tu privilegio, sé perfectamente que te alegra tanto como a Seth, sólo que eres más dura para demostrarlo.

Yo rodé los ojos, y él me picó las costillas, haciéndonos reír.

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- ¿Qué se le regala a un licántropo adolescente por su cumpleaños?- le pregunté a Bella mientras llevaba las cajas que ya había empacado a un lado de la habitación.

Ella rió, negando con la cabeza.

- No debes preguntarte eso. No estás pensando en qué regalarle algo a cualquier hombre lobo, sino a Seth.

- Que es un licántropo adolescente...- repetí yo, resaltando mi punto.

Bella suspiró, dejando a un lado el libro que estaba analizando.

- Piensa en qué le gusta, o en algo que pueda ser significativos para ambos.

- No es como si hubiese pasado el suficiente tiempo...

- Matt, ya se conocen desde hace meses- me interrumpió Bella.

Yo me quedé un momento en silencio.

- Le gusta la miel, pero ya no se acostumbra regalar esas cosas por los cumpleaños, ¿no?

- No, definitivamente no- respondió mi amiga.

- También le gusta comer, pero no es como si hubiera necesitado cocinar algo en los últimos cien años...

Bella rió.

- No, creo que no sería muy buena idea.

Me quedé un momento con la mirada perdida entre la pila de libros que tenía la humana a su alrededor, mientras recordaba cada una de las conversaciones que había tenido con Seth, esperando que alguna me diera una pista, una idea de qué podía darle.

Y luego se me ocurrió.

"Piensa en qué le gusta, o en algo que pueda ser significativos para ambos", había dicho Bella.
"Algo que pueda ser significativos para ambos."

- ¡Lo tengo, lo tengo!- exclamé levantándome rápidamente, asustando a mi amiga.

- ¿Q-qué?

- Ya sé qué regalarle. Ay, Bells, eres una genio- dije, abrazándola-. Debo irme, adiós.

Bajé las escaleras con la mayor rapidez humanamente posible, y saludé a Charlie antes de cerrar la puerta del frente, para comenzar a correr ahora sí a mi propia velocidad.

Cuando llegué a la librería conseguí un papel de regalo bonito, pero casi me sentí ofendida al ver que no tenían la parte más importante, el libro. Sin embargo, mi orgullo se recuperó cuando la señora que atendía me dijo que ya se habían llevado todos por la nueva ola de chicos que habían comenzado a leer los libros frente al furor de las películas.

Ese fue un día largo y poco exitoso, por lo que tuve que tomar prestado el auto de mi hermano a la mañana siguiente para lograr mi objetivo. Al volver a mi casa, ya a la tarde, tomé mi nueva adquisición, "Las Crónicas de Narnia: El León, la Bruja y el Ropero", y escribí una pequeña dedicatoria en una de las primeras páginas del libro, que estaba completamente en blanco.

"Para Seth,
                     Quien tiene el valor de Peter, le gentileza de Susan, la diplomacia de Edmund y el corazón de Lucy. Este es el primer libro que escribí, aunque luego decidí ordenarlos de manera diferente. Tiene todo lo que era en ese momento, y una parte de lo que soy ahora.
                    Espero que lo disfrutes, y que logres ver en él la luz que este libro fue para mi en aquel momento.
                    Con cariño,

Matilda E. Cullen
31/07/2007"

Dejé el marcador a un lado, comenzando a envolver el libro en el papel de regalo que ilustraba un mapa del planeta Tierra, mientras las palabras que acababa de escribir resonaban en mi mente como una verdad nunca antes dicha.

Porque era cierto. Todo lo que había escrito.

Seth había logrado, sin siquiera intentarlo, ser la personificación de las mejores cualidades de los Pevensie, aquellas que había escrito como una forma de esperanza, algo que me daba la energía que necesitaba para salir adelante, y también una forma de expresar mis sentimientos. Porque se sentía un gran vacío al no poder llorar, no tener la posibilidad de descargar todos esas emociones negativas, aquellos pensamientos que aún podían sentir rompiéndote por dentro, pero que jamás lograrían destruirte por completo.

Y ahora el licántropo había llegado, haciéndome recordar un poco de esa Matilda que necesitaba escribir sobre personas buenas que cometían errores para sentir que tal vez en algún momento alguien, o ella misma, no se viera como un monstruo.

"Sé que es algo que parece atormentarte pero... no eres un monstruo...", había dicho Seth, sin saber que sus palabras habían tenido sobre mi un impacto mayor del que cualquiera hubiera imaginado.

Y con un extraño nudo de sentimientos en mi pecho, pegué el moño color miel en el regalo, deseando que el chico sintiera lo mismo que yo había sentido al escribir aquellas palabras.

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Gracias @BridGgittell por darme una de las ideas que me inspiró a hacer este capítulo. Ya te lo dije pero lo voy a repetir: sos un amor❤

Y gracias a todos los nuevos lectores que están apostando por esta historia, y a los viejos que nunca se fueron a pesar de mis demoras, mis problemas y mis bloqueos. Son los mejores lectores que podría haber pedido❣

No Eres un Monstruo - Seth Clearwater✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora