Capítulo 44

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- ¡Volvieron!- gritó una tarde Renesmee, corriendo hacia su padre, quien la cargó.

Había salido a cazar junto a Jasper, Edward y Emmett, en una esperada "tarde de chicos", y no emprendimos el camino de vuelta a casa hasta que notamos que el sol comenzaba a caer.

- No podía estar ni un minuto más lejos de ti- le respondió mi hermano, haciéndola sonreír.

Al bajarla, la niña entró a la casa corriendo, y luego de seguir sus pasos me encontré con una verdadera sorpresa. Mi nombre estaba escrito en diferentes decoraciones, y la fecha definitivamente delataba la razón.

- ¡Feliz cumpleaños!- exclamaron todos, y Nessie corrió hacia mi para abrazarme.

- Te hice un dibujo, tía Matt- me dijo la niña, entregándome un pequeño cuadro con un papel en el que se veían ilustradas dos figuras: ella y yo-. Jake hizo el cuadro, ¿te gusta?

- Me encanta, gracias- le sonreí, mirando también a Jacob, quien hizo un gesto con la mano como restándole importancia-. Pero, ¿sabes qué otra cosa me gustan? Los abrazos de cumpleaños- le susurré agachándome a su altura, y ella me envolvió con sus brazos de inmediato.

- Nessie insistió en que festejáramos tu cumpleaños. No deja de hablar de eso desde que se enteró.

Yo reí ante las palabras de Bella, imaginando la situación. Ahora la insistencia de mis hermanos para que saliéramos a cazar justo ese día tenía más sentido.

Cuando me separé de la niña me acerqué a Seth, quien me observaba sonriente.

- Es extraño no verte estudiando. Uno diría que después de dos meses habrías logrado ponerte al corriente- me burlé.

- Bueno, no todos hemos abandonado la escuela- respondió él.

- Sí, supongo que no todos se han graduado una veintena de veces...

- No me dijiste que era tu cumpleaños- cambió de tema.

Yo me encogí de hombros.

- Nunca lo he festejado.

- ¿Jamás?- preguntó, y yo negué con la cabeza en respuesta- Pues entonces espero que sea un buen primer cumpleaños- comentó, y yo reí ante sus palabras.

Sin embargo, mi risa se detuvo al ver la pequeña caja de madera que me extendía.

- Seth, no tenías que...- comencé, pero él me interrumpió.

- Todo está hecho por mí, desde la caja hasta su contenido- sonrió orgulloso.

Yo abrí la caja con cuidado, para encontrarme con un cuaderno rústico con tapa de cuero y un hilo de color marrón que lo mantenía cerrado con un moño. Debajo de él, una pluma artesanal reposaba al lado de un pequeño tintero de vidrio.

- Bueno, ahora que lo pienso, casi todo. No sé hacer tinteros- se corrigió, haciéndome reír.

- Es hermoso, Seth. Me encanta- le dije con sinceridad mientras lo miraba a los ojos, que se iluminaron a la vez que una sonrisa se formaba en su rostro.

- Ah, mi madre te manda saludos... y esto es de Leah- habló entregándome un pequeño brazalete compuesto de hilos de color verde trenzados.

- ¿Leah? ¿Tu hermana me regaló algo por mi cumpleaños? ¿Intencionalmente?- le pregunté, incrédula, provocando su risa.

- Pues sí, y hasta te llamó Matt. Aunque estoy seguro que esa parte se le escapó- comentó, riendo.

- ¿Oyeron eso?- le pregunté a mi familia, aún sin creer lo que decía mi novio- Es lo más cercano a una declaración de amor que llegaré con Leah.

No Eres un Monstruo - Seth Clearwater✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora