Maldito Murphy

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Capítulo dieciséis

_ ¿Creo que deberíamos hacer un viaje?

_Sería muy buena idea Raquel, nos vendría muy bien, pero ¿puedes dejar el restaurante un tiempo?

_Si sobrevivió sin mis estos meses puede hacerlo un tiempo más.

_Por eso te amo, ya te contagié mi espontaneidad

_Espero que no

Terminamos de comer y salí al patio a despejarme, amaba a mis padres eran caóticos, pero maravillosos y hoy estaban felices.

_Martín podemos hablar de algo?

_Si Ani siéntate

_Gracias por hacer todo esto por mamá y papá, decirle que ya pagaste las deudas del hospital es sacarle un gran peso de los hombros y sé que trabajaste muchísimo por esto.

_Ani que vos estés diciéndome todas estas cosas es por algo, ve al grano ¿qué sucede?

_Hace un tiempo he salido con alguien un poco mayor y estoy muy enamorada de él.

_ ¿Tenes novio?

_Si algo así hemos estado saliendo un tiempo y él quería blanquearlo enseguida, pero se lo prohibí hasta estar segura de sí lo quería o no.

_ ¿Lo quieres?

_Si mucho, aunque en realidad siempre lo quise solo tenía miedo.

_Él siempre estuvo enamorado de ti

_ ¿Sabes quién es?

_Por supuesto Ani, es Fernando estas saliendo con él.

_ ¿Y cómo estas con eso?

_Quiero arrancarle la cabeza y dársela a los chanchos, pero no puedo hacerlo eres mayor, ya tienes 20 y si estás con alguien prefiero que estés con alguien como él que sé que te va a cuidar, o eso espero.

_Lo odias cierto

_Bastante, es raro él es mi mejor amigo desde siempre y tu mi pequeña hermana es difícil de digerir, hubiese preferido que me lo digan de un comienzo, pero supongo que ya lo sabía. ¿Hace cuánto están juntos?

_Saliendo un mes nada más, pero siempre hubo algo

_No me cuentes más solo, cuídate, Ani te amo eres mi hermana, pero Fernando él es, bueno ya sabes Fernando.

_Lo sé, prometo cuidarme

Mejor me fui a casa es viernes y necesito un poco de soledad, entre las vueltas de Emilia, mis padres festejando y mi hermana con mi mejor amigo es mucho necesito estar solo.

Puse música a todo volumen, Pink Floyd-wish you were here, o que tema, hay canciones que depende el momento y el ánimo te pegan fuerte, esté es uno de esos temas y es uno de esos momentos, me senté en el sillón abrí una cerveza y me puse a pensar que es lo que estoy haciendo, donde me estoy metiendo. Suena el timbre y seguro es Fernando para aclarar las cosas.

_Hola, sé que debí llamar antes, pero quiero verte, o más bien necesito verte.

_Emilia, que haces acá

_Puedo pasar? - solo me corrí y paso a mi casa, cerré la puerta y me quedé mirándola.

_Martín necesitamos terminar esto, hoy casi le digo tu nombre a Bernardo, no puedo cometer errores yo nunca hice esto, esto que tenemos no sé qué es, pero debemos terminarlo.

Estaba nerviosa hablaba mucho y movía las manos caminando por mi pequeño departamento, tenía un vestido rosa y el pelo en un moño alto, sus ojos claros resaltaban, es hermosa demasiado para mí lo sé. Me acerqué a ella y se paralizó la besé, quería que deje de hablar, que deje de poner distancia entre nosotros. Paro el beso de golpe.

_ ¿Qué hacemos acá? ¿Qué haces acá Emilia?

_Tengo que dejarte

_Está bien- Me senté en el sillón alejándome, ella cruzo sus manos en su pecho que subía y bajaba agitado.

_A la mierda

Se sentó sobre mí y me besó con más desesperación, a la mierda, esto es lo que quiero su boca, su piel. Subí mis manos por sus piernas y levanté su vestido, de adonde sacaba tanta ropa sexy, concéntrate, Martín, bajé mi boca por su cuello y ataqué sus pechos los sonidos que salían de su boca solo hacían que este más y más duro.

Me encanta como se desarma sobre mí, me gusta escucharla gritar mi nombre, con ella casi desnuda me levanté y la llevé hacia la cama, besé sus piernas y fui subiendo quería saborearla, si me iba a dejar que sea épico, esta noche tenía que ser la mejor.

Saqué su ropa interior y la mía lo más rápido que pude, cuando estaba lista para mi me coloqué el preservativo y entre, se retorció y grito mi nombre, oh podría hacer esto todo el maldito día. Fue rápido duro como sé que le gusta y me giré para que ella suba quería verla sobre mí.

_Muévete

Se sonrojo de una marera tan dulce, no parecía la misma que hace dos minutos estaba diciendo barbaridades debajo mío, pero su movimiento fue haciéndose cada vez más rápido y rítmico ver sus pechos sobre mí y a ella con los ojos cerrados mordiendo su labio, oh dios mío era lo más maravilloso que existe.

Esa noche solo hubo sexo, largo, duro, corto del que pidas, fue eterno, nadie llamo, nadie molesto, éramos nosotros disfrutándonos, amándonos, como me gusta esta mujer.

_Quieres agua?

_No está bien- estaba acariciando su espalda y volví a notar pequeñas cicatrices en su cuerpo.

_Emilia, ¿Qué es lo que te sucedió? ¿Por qué tienes estas cicatrices?

_Hubo un incendio, yo tendría unos 5 años, la casa se derrumbó y quede debajo de varios escombros, por suerte, papá me salvo y aunque estuve varios días en el hospital, no fue nada grave.

_ ¿Un incendio? ¿Fue un accidente?

_Nunca se supo, mi padre cree que fue intencional y que vino por el lado de la familia de mi madre, pero nunca hubo pruebas y todas las investigaciones concluían en nada.

_En tu familia pasan muchas cosas

_Si eso es cierto, siempre creí que estábamos malditos, perdíamos la cosecha o se prendía fuego la casa o desaparecían animales. Siempre sucedieron cosas, se detuvo un tiempo después que mamá murió, pero al heredar mi padre todo solo empeoró.

_ ¿Heredar?

_Uh es una larga historia mis padres se casaron por obligación mi madre tenía 18 y volvía de estar unos años en el extranjero y mi padre tenía unos 20 y estaba por recibirse de abogado y sus respectivos padres decidieron que para la economía familiar era mejor que se casaran entre dos familias muy bien acomodadas. No tuvieron opción y ellos heredaron el negocio familiar cuando mi madre murió mi abuelo decidido darle toda su fortuna a mi padre para que la maneje porque no confiaba en su hijo y según mi padre mi tío es el que hace todas estas cosas para hacernos daño.

_Eso es terrible

_Si lo es, pero yo nunca lo he visto ni lo conozco y dudo que después de tantos años siga odiándonos.

_ ¿Y la policía sabe eso?

_Si lo sabe, pero nunca lo encontraron desapareció hace unos 20 años sé que se casó con una mujer que tenía hijos y se mudó a otro estado, pero nadie sabe de él.

Entre caricias y charla se durmió, Emilia Clark estaba durmiendo desnuda en mi cama y después de varias horas no había huido esto debería ser un milagro.