4. "La proposición"

2.1K 257 54
                                        

Intercambiamos miradas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Intercambiamos miradas. No sé qué piensa él justo allí sobre lo que está sucediendo. Debe parecerle irónico hallarse conmigo luego de las palabras que compartió con Kunpimook sobre mí. Seré para él como una piedra horrible en el zapato.

—Mucho gusto, Jungkook ssi —respondo con educación mientras realizo una reverencia de lo más inclinada—. He tenido el honor de coincidir con usted en algunas ocasiones.

—Sí, es cierto —responde el muchacho con rapidez—. Sus compañeras y usted habéis hecho un buen trabajo durante mucho tiempo.

Si eso me lo hubiese dicho antes de enterarme de la opinión que tenía sobre mí, habría sido un gran halago oír la buena forma en que aprecia el trabajo que hacemos mis compañeras y yo. Pero ahora todo es diferente.

—Se lo agradezco. De verdad.

Evitando estallar en risas, me mantengo falsamente agradecida con él.

—Por favor —intercede Bam Bam entonces—, ¡hablaros con más confianza que esto es una fiesta! No estamos en la gala de un evento político.

Bam se ríe. Yo lo hago. Jungkook, por último, lo hace, pero se ve que lo hace con obligación. Así que digo:

—Preferiría no hacerlo, Bam. Podría irritar a Jungkook ssi.

Ambos se quedan perplejos. Puede que sea Jungkook quien se sobresalte más al escucharme.

—¿Cómo dice? No, jamás pasaría eso, Lisa ssi —afirma.

Yo hago el intento titánico de no contradecirlo y me le quedo mirando a lo largo de varios segundos. Él me sostiene la mirada, sin embargo.

—Verá, es que tiendo a ser deslenguada y a reírme por todo —explico, soltando una risita, tapándome la boca—. He oído comentarios sobre que a los demás no les gusta que sea así.

La explicación resulta ser más comprometedora y, aunque las sospechas se levanten en los dos, decido seguir hablando sin preocupación alguna. Le digo que su compañero Jimin es un excelente bailarín y que es una lástima que no haya ido hoy.

Un poco confuso por el cambio de tema (y tal vez, por todo lo demás que ha salido por mi boca), Jungkook asiente.

—Sí, tuvo un compromiso en Europa y ha tenido que ausentarse.

—Perdone que me atreva, pero ¿podría decirle lo muy admiradora que soy de él?

Jungkook alza las cejas y yo me río.

—Quiero decir, ¡no me malinterprete! Usted también merece mi admiración, Jungkook ssi... Baila maravillosamente. Todos los miembros de Bangtan sunbaenim son unos expertos en cuanto a baile se refiere. Tengo mucho que aprender de vosotros. Pero me declaro fan de Jimin ssi. ¡Es el mejor!

—Francamente —me responde tras un breve momento en que nos vemos a los ojos sin mirar a otro lado—, dudo mucho que tenga que aprender nada de nosotros, Lisa ssi. He visto que usted es una gran bailarina. Poco podría envidiarnos, pero no se preocupe, que le haré llegar a Jimin ssi su mensaje.

Aunque educado y adulador, sé que está molesto. Soy capaz de sentirlo. Quizá no le ha gustado el desaire que le he hecho diciéndole que es un buen bailarín, pero no tanto como su compañero de grupo. De cualquier modo, no me importa. Se lo merece.

—Oh, ¡es usted tan amable! —contesto pues con evidente sarcasmo—. Estaré muy agradecida si pasa mis palabras a Jimin ssi. En fin, debo irme, no os importuno más.

—Espera, Lisa —me detiene Kunpimook antes de girarme e ir de vuelta por donde he llegado—, ¿por qué no bailáis un poco y veis quién de los dos es mejor en el baile? —El ofrecimiento de mi amigo me para en seco, pero él ni se inmuta y se sonríe—. Venga, no sois unos niños ya. Será divertido.

Kunpimook me acerca por la espalda hacia Jungkook, quien, si bien está sorprendido, parece que no va a rechazarme, cosa que me confunde y me molesta. No tiene por qué hacerme favores o quedar bien con su amigo.

—Perdona, Kunpimook, pero no recuerdo haberte dicho que quería bailar —exclamo con voz firme—. No supongas que he venido hasta a ti para que me busques pareja.

—No, está bien. A mí me gustaría, ¿por favor? —Oigo que Jungkook susurra para mí y siento que mi cuerpo entero se reblandece con un escalofrío. Jamás hemos estado a una distancia tan corta—. Para mí sería increíble compartir con usted algunos pasos de baile.

—Anda, Lisa —sigue animándome Kunpimook por los hombros. Entre aquellas dos figuras, me veo de pronto de lo más pequeña—. Sabes que eres buenísima en esto. ¿Acaso nos vas a dejar con las ganas de verte bailar?

La insistencia de Bam Bam es en vano. Estoy decidida, además de enfadada.

—Ya me has visto bailar durante toda la noche y, créeme, he estado muy feliz bailando para mi propio placer —contesto finalmente, soltándome de su agarre—. Además, ya te he dicho que no me interesa complacer a otros sólo para no tener problemas. Así que, con vuestro permiso.

Les miro a ambos y me retiro con una venia. No voy a ser la burla ni el juego de ninguno de los dos por más tiempo. Ya he tolerado bastante.

 Ya he tolerado bastante

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Orgullo y prejuicioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora