Lisa se ha prometido algo ese fin de año. Hará, por todos los medios que le sean posibles, que la tímida de su compañera Rosie sea amiga de Namjoon ssi, el miembro de BTS.
Sin embargo, se topará con un obstáculo muy grande e imprevisible: Jeon Jungk...
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—Los miembros de Bangtan son muy educados y elegantes, además de sencillos —decía nuestro manager Bokyung el domingo—. Aunque todavía me pregunto qué los condujo para semejante cumplido de regalaros un álbum.
Nuestra manager Sangwon también está atónita por lo que hacen. Esos chicos no tienen obligación de darnos un álbum. ¿Qué los ha conducido a hacerlo?
—La amistad que tienen con vosotras es muy superficial —dice Sangwon unnie, escarbando igual en las acciones extrañas de esos chicos—. A la única conclusión que puedo llegar es que alguno de ellos está enamorado de vosotras, chicas.
Hiperventilo. ¿Acaso Sangwon unnie quiere matarme de la impresión y de la vergüenza?
Es una suerte que no se entere de nada, aunque sospeche de todo.
—Personalmente —interviene Jisoo—, ninguno es mi tipo, pero puedo decir con mucha facilidad que Jungkook ssi es muy guapo..., aunque no tanto como Taehyung ssi. Él tiene unas facciones perfectas, ¿a que sí, Jenjen?
Jen ratifica con un movimiento positivo de cabeza. Chaeyoung y yo suspiramos. Entonces veo que la situación es igual de incómoda para ella. Después de la intrascendencia de su relación con Kim Namjoon, nuestros managers prometieron no mencionar el tema, pero ese domingo parecen olvidarse que podrían hacerla sentir mal, incluso si en ningún momento de esa charla nombran a ese chico.
Temerosas de las preguntas o suposiciones de nuestros agentes, Chaeyoung y yo soportamos el tiempo suficiente para oír sus comentarios favorables acerca de los miembros de Bangtan y, nada más llegar a nuestra residencia, nos apresuramos a bajar. Sin embargo, no nos separamos de ellos.
Esa tarde tenemos una mini celebración, pero, puesto que al día siguiente hay agendada una grabación en un programa de variedades, la fiesta se acaba antes de las diez de la noche.
Yo pienso aquella noche en Jungkook más aún que la noche del sábado. Me parece larguísima, pero no lo bastante para determinar mis sentimientos hacia él.
Después de tumbarme en mi habitación, durante una hora intento descifrar lo que habita en mi pecho. Pongo el disco nuevo de Bangtan, escuchando una canción tras otra, como para entrar en conexión espiritual con mi mente y mis sentimientos.
Hay una canción que me llama poderosamente la atención y agudizo mejor mi capacidad interpretativa. Es un solo de Jungkook y la canción se titula "Thief of hearts (ladrona de corazones)".
La escucho. Es una música melódica y bonita. No hay nada más en mí que encanto al inicio, pero cuando entra el puente, mi corazón da un vuelco. Esta parte dice algo así:
