𝘼𝙥𝙥𝙡𝙚 𝙒𝙖𝙩𝙘𝙝; 𝙅𝙖𝙘𝙠𝙗𝙖𝙢.

17

A la mañana siguiente se despertó el menor por el dolor de cabeza tremendo que sentía, se percató de que no estaba en su casa, y mucho menos en la de Yugyeom. Maldijo mentalmente. Se levantó rápidamente de la cama y al hacerlo se mareó y de un momento a otro vomito en el suelo. Se sentía demasiado mal, su estomago ardía y su cabeza estaba por explotarle.

Se dirigió al baño y se duchó. Al salir solo agarró una camisa que encontró en el armario de la habitación, se puso un bóxer que también encontró allí en unos cajones y obviamente le quedaron muy pero muy grandes, pero era lo único que había y ni loco saldría de la habitación sin ropa interior. La camisa le llegaba hasta los muslos. Limpio el vomito suyo y después salió lentamente de la habitación midiendo y cuidando su paso.

Cuando estaba abajo pudo percatarse y darse cuenta de donde se encontraba. La casa de su profesor Jackson Wang.

—Carajo -soltó golpeando su cabeza.

—Creo que despertaste con el pie izquierdo -escuchó la voz de su mayor detrás suyo y al instante volteó su mirada hacia el.

—Oh, una disculpa profesor Wang -reverenció algo avergonzado.

—Te queda muy bien mi camisa -le admitió Wang percatándose de la vestimenta del menor mientras se acercaba a él. —¿Estas usando ropa interior? -preguntó rozando su pierna con su mano y eso hizo que el menor tuviera escalofríos al instante de sentir los dedos del mayor rozar su piel descubierta.

—Si -tragó saliva retrocediendo un poco para alejarse del mayor. Aún así el mayor lo seguía acorralando y de un momento a otro cayó de espaldas en el sillón y Jackson se acercó bruscamente a este apoyando sus brazos uno al lado izquierdo de Bambam y el otro a la derecha para dejarlo a él en medio.

—Profesor por favor -habló Bambam comenzando a sentirse algo incómodo, aunque obviamente su miembro no pensaba igual porque empezaba a excitarse.

—¿Tanto así te pongo? -habla Jackson riendo al notar el bulto del menor en su entrepierna. Jackson comenzó a besar su cuello desesperadamente y el menor se dejaba ser mientras gemía por el placer que ese simple acto le causaba pero segundos después lo paró en seco. Se escabulló del sillón para alejarse del mayor.

—¿Que ocurre? -preguntó Jackson confundido.

—Tu eres lo que me ocurre, ¿puedes dejarme en paz? -pidió el menor suspirando y yéndose de allí.

Jackson lo siguió. —¿A donde crees que vas? -preguntó el mayor viéndolo por el umbral de la puerta de entrada al menor que caminaba ya fuera de su casa.

—Me voy a cualquier lugar que esté lejos de ti -soltó el menor volteando a verlo con su mirada fría.

—Te llevó -dice el mayor sacando las llaves de su automóvil de su bolsillo y abriendo el auto.

—¡Déjame en paz! Quiero dejar de pensar en ti, olvidarte ya pero no puedo si siempre vas a aparecer frente a mi de esta forma, deja de ser amable conmigo porque lo malinterpreto. -suelta el menor soltando algunas lágrimas que empezaban a caer por sus mejillas.

—Kunpimook yo -trata de decir.

Bambam solo lo paró en seco lanzándole su zapato en el abdomen. —Te odio -volvió a decir y después se fue corriendo.

Jackson se quejó al sentir el golpe y después solo pudo suspirar.

...

—Muy bien pásense los exámenes y cuando de la señal empiezan a responderlo, solo tienen 45 minutos, ni mas ni menos -habló Wang mientras todos los alumnos se pasaban los exámenes y cuando notó que ya todo estaba en orden los dejó comenzar.