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A la mañana siguiente Jackson despertó rápidamente a Bambam para que fuera a su propia habitación antes de que sus padres despertaran y los encontraran desnudos durmiendo plácidamente.

—Quiero seguir abrazándolo un poco más de tiempo -hizo un puchero el menor. Jackson negó con diversión en su rostro.

—Vamos te acompaño hasta tu habitación -el mayor se levantó de la cama para después vestirse con una pijama y pantuflas.

Bambam bufó pero terminó levantándose de la cama cubriendo su cuerpo desnudo con la sábana de la cama del mayor.

Jackson sacó la pijama del menor de su maleta y se la pasó. Bambam se vistió rápidamente y con paso lento salieron de la habitación tratando de hacer el menor ruido posible.

Al llegar a la habitación del menor Jackson se acostó unos minutos junto a él. Mirándose fijamente a los ojos, el mayor acariciaba la cabeza del menor suavemente, Bambam amaba ese tipo de afecto que el mayor le proporcionaba.

—Te quiero Jackson -soltó en un susurro el menor con sus ojos cerrados.

Jackson sonrió al escuchar eso. —Yo a ti mucho más Kunpimook -besó suavemente su frente y después se levantó lentamente de la cama para regresarse a su habitación.

Al cerrar la puerta con cuidado de no hacer mucho ruido y volteó su cuerpo para regresar a su cuarto se encontró con su hermano menor bostezando. —¡Ay! Pero que susto me diste -se quejó el mayor golpeando el hombro de su hermano suavemente.

Dylan rió por unos segundos. —¿Que hacías allí eeeh? -levantó su ceja en forma pícara.

—Nada -rió Jackson y después caminó alejándose de su hermano, necesitaba tomar agua.

—¿Sabes que apenas son las 4:00? -el menor lo seguía a sus espaldas hasta la cocina.

Jackson negó adentrándose en la cocina, abrió el refrigerador y sacó una botella de agua de allí, la abrió y después bebió de esta.

—¿Por que fuiste a visitar a Bambam a esta hora? -preguntó su hermano con curiosidad.

—Simplemente fui a ver cómo estaba, normalmente es difícil para cualquier persona conciliar el sueño en una casa que no es suya y menos en un país distinto -se quiso excusar con lo que fuera.

—Entiendo -el menor abrió nuevamente el refrigerador y sacó una manzana de allí y la mordió sin más.

—Un momento, ¿tu que estás haciendo despierto a esta hora? -preguntó el mayor.

El menor rió suavemente y rascó su nuca. —Saldré a correr al parque -le contó.

—¿Desde cuando te ejercitas a esta hora? -se burló el mayor.

—Acompáñame a correr, lo necesitas -le bromeó el menor para salir corriendo de allí antes de que su hermano le golpeara por molestarlo.

Jackson lo persiguió hasta que los dos chocaron con el sillón y por accidente lo empujaron y lograron tirar un jarrón de la sala. Se voltearon a ver al mismo tiempo estando en el suelo después de él fuerte ruido cuando el jarrón se rompió. Se comenzaron a reír por la estupidez que acababan de hacer. De un momento a otro las luces de la sala se encendieron y a lo lejos vieron a su padre sosteniendo un bate de béisbol del menor con sus dos manos. Se incorporaron levantándose del suelo lentamente, Jackson se encajó uno de los vidrios en la palma de su mano logrando hacerla sangrar.

—¿Que están haciendo a estas horas? -su padre dejó el bate de béisbol encima de una de las barras para cruzarse de brazos viendo a sus dos hijos jugar como si fueran niños pequeños.

𝘼𝙥𝙥𝙡𝙚 𝙒𝙖𝙩𝙘𝙝; 𝙅𝙖𝙘𝙠𝙗𝙖𝙢.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora