𝘼𝙥𝙥𝙡𝙚 𝙒𝙖𝙩𝙘𝙝; 𝙅𝙖𝙘𝙠𝙗𝙖𝙢.

21

Llegaron a Hongkong después de unas cuantas horas de viaje, en el aeropuerto los esperaba el hermano menor de Jackson. Un chico delgado, más alto que su hermano mayor y que Bambam, buen parecido, muy atractivo y de tez muy blanca. Los saludó desde lejos moviendo su mano.

Ellos se acercaron lentamente al menor, Jackson dejó las maletas y momento para abrazar a su hermano menor fuertemente, claro que lo había extrañado muchísimo. El menor veía desde el hombro de su hermano al chico atrás de Jackson.

—El es Kunpimook Bhuwakul -presentó Jackson al separarse de su hermano. —Bambam, el es mi hermano menor Dylan Wang.

Los dos menores sonrieron suavemente, y reverenciaron frente a ellos.

—Un gusto Bambam, ¿es tu mejor amigo o? -preguntó Dylan volteando a ver a su hermano mayor.

Porque si, el menor ya sabía la orientación sexual de su hermano mayor, su familia lo apoyaba y todo desde que él les contó. Pero habían pensado que Jackson jamás volvería a traer a nadie a casa así como así desde que su ex-prometido lo lastimara y le rompiera el corazón. Ya habían pasado casi 5 años de eso, pero no pensaron posible que Jackson conseguiría a alguien más porque pensaban que jamás dejaría de amar a Zhoumi.

...

Llegaron a casa después de varias horas de camino ya que había muchísimo tráfico. Dylan estacionó el automóvil fuera de casa, lo apagó y después comenzaron a bajarse los tres del auto.

Bambam y Jackson comenzaron a bajar el equipaje mientras que Dylan hacía una llamada urgente a su madre.

—¿Hay retratos de Jackson con Zhoumi en su habitación? -preguntó cuando su madre respondió.

—No lo sé, ¿por que pre- su madre no pudo de terminar la pregunta que quiso hacerle a su hijo menor y que este colgó al instante cuando vio a los chicos acercársele.

—¿Con quien hablabas? -preguntó Jackson confundido.

—Nadie en especial -mintió rascándose la nuca.

Los tres caminaron hasta la entrada, Dylan abrió la puerta y atrás de esta dentro se encontraba la madre de los dos chicos. Sophia Wang.

La mujer se sorprendió al instante de ver a su hijo del medio junto a un chico, nótese menor que el.

Jackson notó la expresión de su madre y se acercó a ella para envolverla en sus brazos dándole un fuerte abrazo cálido. La mujer abrazó también a su hijo felizmente, mientras veía al tailandés que estaba cabizbajo.

—Anda Kunpimook pasa -le dijo Dylan al menor mientras lo ayudaba con su equipaje.

Bambam asintio suavemente y entró reverenciando. Se quitó sus zapatos en la entrada y se colocó unas sandalias.

—¿Quien es el muchacho Jiaer? -preguntó la mujer en voz baja para que sólo el hongkonés la escuchara.

Jackson agachó su cabeza un poco y le susurró al oído. —Las explicaciones para después mamá-le besó la mejilla tiernamente y después tomó su mano para caminar junto a ella a la sala donde los esperaba su padre sentado en el inmenso sofá.

Al llegar Bambam estaba parado en el medio de la sala reverenciando ante su padre. Este se levantó dejando su teléfono móvil en el sillón y reverenció cortamente. El ambiente era un poco incómodo.

La madre de los dos Wang se sentó en el sofá junto a su esposo mientras veían frente a ellos al tailandés y a Jackson juntos. Se notaba que el menor estaba muy nervioso.

El menor de los Wang se sentó junto a su madre mientras veía también en dirección a los recién llegados.

Jackson aclaró su garganta mientras tomaba suavemente la mano del menor. Los presentes frente a ellos agacharon su mirada para ver las manos entrelazadas de los chicos. Su madre cubrió su boca al instante con su mano, mientras el padre abrió los ojos de par en par, mientras que Dylan simplemente sonrió de medio lado cruzándose de piernas.

—El es Kunpimook Bhuwakul, mi novio -les contó y después suspiró, sentía como si hubiera terminado con un peso de encima. Logrando un aplauso por parte de su hermano menor que los veía con una sonrisa de oreja a oreja, porque ahora que su hermano estaba ahí, lo notaba mucho menos deprimido que antes de que se fue de Hongkong hacia Seul para poder olvidar a su ex-prometido. Había sufrido demasiado viendo a su hermano mayor llorar todas las noches, hasta sufriendo en sus sueños ya que despertaba sudoroso y con lágrimas en los ojos gritando. Su padre y su hermano volvieron a verse con una expresión sin explicación.

—Es un placer conocerlos -Bambam reverenció hasta el suelo, se levantó después de unos minutos y sonrió suavemente.

Jackson lo sostuvo de la cintura.

—Cariño, si tu eres feliz con este muchacho nosotros no dejaremos de apoyarte jamás, siempre y cuando estén bien -se levantó el padre tocando el hombro de Jackson suavemente con una sonrisa en los labios. —Gracias por llegar a la vida de nuestro hijo -acarició suavemente el hombro del tailandés. Este sonrió y reverenció un poco.

—Lo único que te pido es que por favor no vayas a lastimarlo nunca -le pidió la madre de Jackson al levantarse, notaron cómo tenía lágrimas en los ojos.

El hongkonés se acercó a su madre y la abrazó suavemente. Su madre lloró un rato en el hombro de su hijo al recordar por todo lo que tuvo que pasar su hijo después de su relación con Zhoumi.

...

Después de haber conversado un tiempo con los recién llegados, después de que comieran se dirigieron junto hasta sus habitaciones. Por que si, estarían por separados por respeto a su familia.

Jackson se quedó unos momentos más en la cocina trayendo unos snacks para los dos mientras tanto para ver alguna película o algo así.

El tailandés entró a la habitación de mayor allí, en la repisa vio varios retratos volteados hacia la pared. Tomó el primero en sus manos y visualizó a un Jackson mucho más joven con uniforme de preparatoria abrazando a un chico mucho más alto que él por la cintura que no vestía un uniforme. Tenía mucha curiosidad sobre el pasado de Jackson, pero le daba miedo preguntar, sentía que el mayor se enojaría o se sentiría triste al tener que recordarlo. Volvió a dejarla en el mismo lugar en la misma posición que la encontró y luego tomó otra de la orilla, la levantó y la visualizó. El más alto cargaba al hongkonés en su espalda y sonreían de oreja a oreja. Suspiró y la dejó allí de nuevo. Se sentó en la orilla de la cama cabizbajo, sentía curiosidad por ver más retratos, así que se levantó y comenzó a abrir los cajones, solo ropa y más ropa hasta que abrió el último y se encontró con retratos también volteados, alzó varios en sus manos y todos estaban rotos del vidrio. Pero de los tres que encontró, uno fue el que más le llamó su atención. Jackson vestido con un traje formal blanco y el otro tipo con un traje formal negro y el más alto lo abrazaba por detrás mientras le depositaba un beso en la mejilla.

¿¡Está casado!? -pensó el tailandés completamente confundido.

Regresó las imágenes al cajón pero sin cerrarlo y quedándose ahí mismo sentado, muy confundido, mientras continuaba con la ultima foto en sus manos. Suspiró fuertemente.

—¿Que estás haciendo? -escuchó la voz de su profesor detrás de si. Dio un brinco en su mismo lugar ya que se sorprendió con su llegada, y dejó rápidamente la foto en el cajón.

Rápidamente se levantó del suelo después de cerrar el cajón y negó sin más cuando Jackson se encontró frente a él.

—¿Viste estas fotos? -le preguntó el hongkonés después de rodearlo para agarrar los retratos de su repisa suspirando tristemente al verlos. Tanto le dañaba el hecho de solo ver esas viejas fotos de su pasado.

Bambam seguía volteado, se sentía triste por alguna razón. Jackson las dejó sin importancia en donde estaban, se acercó a Bambam y lo abrazó por detrás.

—Honestamente no tengo la valentía de hablar sobre mi pasado en este momento, pero cuando me sienta listo lo haré, te lo prometo pequeño -dijo en voz baja y después beso suavemente su cuello. El menor soltó un fuerte suspiro al sentir los húmedos labios de su mayor en esa zona delicada. Se volteó y después terminaron besándose agitadamente allí mismo parados.