Solo tú. [COMPLETA/EN EDICIÓN]

Epílogo.

El día estaba frío, el viento soplaba con fuerza, y se notaba que los tiempos de lluvia se acercaban.

Ahí estaban los nombres de dos personas que quiso con su vida, en la primera lapida estaba el nombre de su madre y en la segunda el nombre de quien fue su esposo.

Dejó el ramo de margaritas en la de su madre y los tulipanes lilas en la de su difunto esposo mientras sonreía, pues se acordaba de cada momento que vivió a su lado.

Respiró hondo y decidió hablarles.

-Hola mamá, hola Ángel.- Volvió a respirar, le costaba hablar- Las cosas han cambiado mucho en estos meses. Oliver ya camina y dice mamá, papá, tita, tito, tete, y niega o afirma con la cabeza. También quiero contarles que dentro de poco seré madre nuevamente, es una niña y ya casi son seis meses y pesa demasiado, no me acordaba de que fuera así.

Respiró nuevamente, pero las lágrimas ya corrían por sus mejillas.

-Me casaré...Nuevamente con el hombre que amo, y no me malentiendan, te quise mucho Ángel, pero siempre supe que Matt era para mí. Camilo dentro de poco será papá, en cualquier momento Dahian dará a luz, solo es esperar. Parece que todo está tomando su cauce. Ya por último Jonh se encuentra en la cárcel al igual que la señora Vicent solo que a ella le dieron más años, esperamos que les sirva para reflexionar.

Sonrió.

-Me costaba decirle mamá a mi mamá, o papá a mi papá y en ocasiones me siento algo incomoda pero solo creo que es cuestión de tiempo.

Golpeó con la palma de su mano las lápidas.

-Nos vemos dentro de poco, les agradezco todo lo que hicieron por mí, tu mamá por cuidarme y darme tanto amor. Y tú Ángel por está en los momentos más tristes.

Se dio vuelta y comenzó a caminar hacia el parqueadero, donde la esperaba Matt.

Sonrió al verlo jugar en su celular. Abrió la puerta y se sentó en el asiento del copiloto. Poniéndose el cinturón de seguridad.

-¿Cómo te fue?

-Bien, sabes que las hormonas no me tienen bien sentimentalmente.

Matt tocó el vientre abultado y este se movió en respuesta.

-No hagas eso, me duele.

-Lo lamento pero es obvio que seré el favorito.

-Repítelo hasta que te lo creas.

Riendo puso el auto en marcha para la casa de la familia Howland. Durante el camino se instaló un silencio que fue interrumpido por la entrada de una llamada al celular del pelinegro.

Se puso el auricular en la oreja y contestó.

-¿Si?

Su cara cambió radicalmente al mismo tiempo que tomaba un retorno.

Ana lo miró interrogante y este le hizo una señal con la mano para que aguardara.

-Ya voy en camino- Esperó un momento- Si esto con ella ya nos vemos.

Y finalizó la llamada.

-¿Qué pasó?-Preguntó La castaña con preocupación.

-Dahian rompió fuente.

-Oh mi Dios!

-Lo sé, ya vamos.

En el trayecto se sentía la tensión y la expectativa y aún más cuando llegaron a la sala de espera donde estaban todos a excepción de Sofía quien se quedó en casa con Oliver.

-¿Y Camilo? - Preguntó Ana.

-Entró Con Dahian. – Contestó Luisa.

-Apuesto 100$ a que sale de la sala en cualquier momento. – Intervino Mark.

-Yo digo que 150$ a que se desmaya.

-No es hora de apuesta. -Intervino Luisa – Es un momento serio, pero 200$ a que sale en silla de ruedas.

Todos se rieron y de esa manera se alivianó un poco el ambiente. Tiempo después Ana se sentó puesto que el vientre la cansaba demasiado.

-¿Está todo bien?- Preguntó Matt sentándose a su lado.

-Sí, solo que me cansó demasiado.

-¿Te imaginas que en unos cuantos meses estaremos en las mismas?

-Aún sigo sin poder creerlo.

-¿A qué te refieres?

-A todo, a enamorarme de ti, a tener un hijo, a volverme a enamorar de ti, a pasar muchas cosas y que al fin de cuentas nos uniéramos nuevamente, y ahora viene ella- Dijo señalando su vientre.

-Todo esto parece una locura.

-Sí, pero siempre lo supe.

-¿Qué cosa?

-Que eras tú, solo tú.

Gracias por todo, espero verlo en mis otras historias.

Nos leemos a la próxima.

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Soloyo.