Capítulo 27: Suplicio.

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Hola de nuevo ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ XD

Como, intento que sea, todo los días cuelgo otro capítulo de mi historia Jamás pensé en ti: Mentira.¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ =^.^= 

Esta vez, es el capítulo 27: Suplicio ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Xp 

Espero que os guste (como digo en todo el rato o.0)¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ 

Divertíos y solo deciros que me alegra que os guste mi historia y que dentro de nada llego a las 3000 lecturas¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ GRACIAS¡¡¡¡¡¡

En este capítulo narra Ryan y Aria principalmente, ya que son nuestros protagonistas. Cómo os habeís podido dar cuenta Ryan ha dejado claro ya sus planes hacía Aria, pero...

¿Qué hará Aria con Ryan?

La relación tan peculiar entre estos dos "sujetos" continua comenzando¡¡¡¡ Entre ellos dos quedan muchísimas cosas más.... que prometo que nadie se esperará. ¡¡¡

A leer y divertíos¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

=^.^=


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Ryan.

X entonces es igual a... ¡Mierda!

No me sale. 

Llevaba tres cuartos de hora con aquel maldito problema de Matemáticas, y por mucho que intentara de todo, el resultado siempre me salía incorrecto. 

¿Qué estaba haciendo mal?

Suspiré preparado de nuevo para volver a hacer el ejercicio, cuándo una estupenda idea cruzó por mi cabeza.

Definitivamente era un genio.

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Aria.

Estaba tranquila en mi habitación, mañana teníamos exámen y por suerte, con el poco tiempo que había cursado en aquel initituto,  había entendido la mayoría por no decir todo.

Tenía un buen cerebro. Quizás lo mejor de mí. 

Miraba pensativa por la ventana cuándo él, me interrumpió. 

Llamó a la puerta dos veces seguidas y antes de que me diera tiempo, ya había entrado en mi habitación. 

-Hola.- me saludó Ryan con esa despanpanante sonrisa que utilizaba siempre.

Le miré confundida. 

Llevábamos practicamente mes y medio conviviendo juntos, dentro de poco sería veinte de diciembre, y la navidad empezaría, y seguía sin comprenderle. 

En algunos momentos me ignoraba en otros me hablaba, algunas veces me miraba como si me taladrara y otras como la persona más amable del mundo. Aquel chico empezaba a preocuparme. 

Pero esta vez, no tenía idea alguna de que hacía en ese momento en mi cuarto, parado en frente mía como si nada.

Arqueé las cejas mientras esperaba una contestación suya o motivo de que estuviera ahí. Cinco segundos después vino.

Jamás pensé en ti: Mentira. EN PAUSA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora