«Problems.»

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               C a p í t u l o  2 3

                   «Problems.»

Llegué a casa tratando de no encontrar a nadie en ella, supongo que los chicos están en el Instituto. Entré a mi habitación y cerré la puerta recargandome en ella, quedandome a oscuras, suspiré. Prendí la luz y me encontré con un Chris molesto sentado en mi cama, reprimí un grito por el susto.

—Emma, ¿Dónde estuviste?, mejor dicho ¿Con quien estuviste? —dijo Chris con una mueca en su rostro, tratando de no parecer alterado.

—Chris...—susurré mirándolo con suavidad, él levantó una ceja hacia mí— Con Travis —murmuré con desprecio dandome por vencida, Chris se sorprendió y su rostro formó una mueca de desagrado—, él me usó para sus jueguitos, otra vez.

—Pero el problema es que tú lo dejaste —dijo con un tono serio y molesto. Lo miré incrédula.

—¿Qué? No, claro que no lo hice. Yo estaba durmiendo, ¡De pronto despierto y estoy en Las Vegas! Chris, tu sabes que mi pasado no es algo que me enorgullezca —expliqué cruzandome de brazos. Él suspiró frustrado y se acercó a mi.

—Te quiero Emma, y me preocupa que ese... hombre te haga algo malo —dijo tranquilizandose un poco, le sonreí.

—Tranquilo, yo le dejé muy claras las cosas —dije con una sonrisa de maldad, sonrió.

—Esta es la Emma que yo conozco —susurró divertido, reí ante su confesión. De pronto se separó bruscamente de mí, soltando un suspiro.

—¿Qué pasa? —pregunté confundida.

—Ustedes tuvieron algún contacto ¿cierto? —dijo de pronto, lo miré confundida— Emma, ustedes... ¿Se acostaron? —preguntó con miedo en sus palabras. Abrí mi boca para cerrarla a los dos segundos. Su rostro formó una mueca de decepción—. Eso pensé.

—¿Qué? Chris no... No te vayas —murmuré con dolor. Maldita sea, eso me pasa por estúpida.

Me dio una última mirada y giró sobre sus talones. Lo último que escuché de su parte fue un portazo. ¡Yo lo sabía! Lo sabía y lo temía, lo lastimé. Escuché los rápidos latidos de mi corazón haciendo eco en mis oídos, sentí un nudo en mi garganta.

«¿Este es el fin?»

No, Chris no puede dejarme. Se que lo arruiné todo pero Chris es todo lo que tengo, yo lo quiero y mucho. De un momento a otro sentí mis ojos arder y unas pesadas lágrimas correr por mi rostro.

Christopher Banks me dejó.

—No, tú no Chris —susurré con dolor, él ahora está decepcionado de mí— ¡Tú no, Chris!

[...]

Han pasado tres malditos meses desde que vi a Chris por última vez, eso me dejó muy claro que él y yo no podemos ser más que amigos o conocidos. Después de llorar hasta secarme en todo este tiempo, ahora estoy sentada en mi balcón enfrentandome a una adicción que ya había olvidado. El cigarro.

—Emma... —susurró una voz masculina, Liam. Lo miré y al ver su rostro decepcionado me quebré, caí de rodillas al suelo llorando sin poder controlarme.

—¡Lo volví a hacer, he decepcionado a las personas que más quiero! Primero a mamá, Robert, después a Chris y ahora... tú —dije con dolor. Liam me abrazó y acarició mi cabello.

—Ven, ¡Vamos a olvidar los problemas por un momento! —dijo con una sonrisa, sonreí a medias y lo seguí.

Liam me hizo vestirme de manera sensual. Un vestido muy ajustado de color negro, junto a unos tacones oscuros con una gran plataforma. Me maquillé y peiné, para así estar lista. Caminé junto con Liam a su coche y partimos hacia un bar.

Compartimos unos cuantos tragos, algunas carcajadas y muchas palabras.

—Bien, aquí es donde nos separamos —dijo sonriendo mientras se pone de pie. Le miré con una ceja alzada—. ¡¿Qué?! Soy hombre, sin novia, con buen físico y muchas ganas de follar.

—No olvides usar condón, rompecorazones —dije soltando una carcajada. Él me guiñó.

Me quedé sentada mirando con una sonrisa divertida hacia Liam, que ahora se dirige a una castaña. Negué con la cabeza y pedí algunos tragos más. Que bien se siente perder el control.

N i a l l

He estado un poco serio este tiempo, aunque consiente de que Emma lleva algunos meses soltera y dolida. Ella ha estado encerrada en su habitación o simplemente estudiando, he notado que ha ido a bailar en algunas ocasiones, ya que regresa con todo su atuendo sudado y con una sonrisa de relajación.

Estoy llegando a un bar ahora mismo, en Irlanda estoy acostumbrado a tomar mucho y ahora no me he divertido mucho, creo que ya es momento.

Caminé y me dirigí a la barra sentandome al lado de una chica,aunque no la miré mucho. El barman me atendió y ahora estoy un poco tomado, en realidad aún estoy consiente. La chica a mi lado se podría decir que está pasada de copas.

—¿Niall? ¡Niall, que gusto verte! ¡Pero mira que guapo te ves! —dijo la voz femenina que tanto amo, la miré con sorpresa.

—Emma, estas ebria —dije con una mueca.

—Lo estoy, pero ¡qué más da! Soy joven y quiero disfrutar —dijo sonriente, le sonreí de vuelta.

—Mañana te arrepentirás —reí, se encogió de hombros.

—Una resaca duele menos que un corazón roto.

- - - - - - ¡¡Ayy Chris nooo!! - - - - - -

Que triste, pobre Emma. No quiero estar en sus zapatos :/
En fiiin... aquí está el cap de hoy wohoo!
Hasta luego bye byee
-PS<3

INSANE || n.h.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora