Segunda parte de SIPHON - Es necesario haber leído la primera parte para entender su trama.
Milla se ve obligada abandonar Beacon Hills y viajar a Nuevo Orleans para encargarse de viejos y nuevos enemigos que amenazan su seguridad y la de alguien es...
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Un deseo.
Era lo único que tenía con ese collar que tanto tiempo atrás fue dado a su abuela con una promesa, y que ella había reservado en caso de que las siguientes generaciones de los Claire pudiesen necesitarlo.
Pero el riesgo era tan alto como la recompensa.
Davina había repasado en su mente todas las historias que su abuela había contado sobre ella desde que supo que estaba en el barrio. Todas las cosas atroces que hizo la última vez que estuvo aquí y de las que su abuela había sido testigo siendo apenas una niña, la hacían comprender el miedo que debería sentir con solo pronunciar su nombre.
Pero más que solo una asesina despiadada, como la veían la mayoría, los Claire veían todo el panorama. No solo el numero de muertes, sino el quienes eran las víctimas y que fue lo que hicieron para terminar siendo sus objetivos.
De algo estaban seguras; Kara nunca asesinaba por el mero hecho de asesinar a cualquiera, como lo hacían los vampiros o los lobos cuando la luna los dominaba.
Ella asesinaba con un propósito: Limpiar el mundo de maldad.
La maldad eran sus verdaderas presas. Asesinos, violadores, psicópatas. Todo aquel con una mancha de pecado sin retorno del infierno, Kara se encargaba de mandarlos sin demora.
Para Davina, Kara era alguien a quien se le debía admirar como una justiciera.
Aunque eso no quita el que le tenga un gran temor.
¿Qué si no aceptaba ayudarla? Su abuela había recalcado que cuando el momento de usar el collar haya llegado, debía ser por una causa verdaderamente digna del interés de la leyenda, o podría tomarlo como un insulto. Y sabrá dios qué haría con ella si se siente insultada.
Y el que lo utilizara para pedirle salvar la vida a un miembro de la familia quienes personifican la maldad, era más que un plan suicida.
Pero no podría verse de nuevo al espejo si al menos no lo intentara.
Ahora, si por un milagro ella aceptase, tendría que lidiar con que el brujo se dejara ayudar por la mujer que tiene secuestrada a su sobrina y que actualmente los tiene bajo amenaza.
