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Estaba triste. Desilusionada, más bien. Jungkook no me había dicho nada desde que llegué en la mañana, por lo que cuando llegué a casa, a pesar de los obsequios de mi familia, me encerré en mi habitación para ser aturdida con música y no salir. Wolf de Exo se hacía escuchar a través de mis paredes, pero dejó de sonar cuando mi teléfono comenzó a vibrar.
Ronie me estaba llamando.

—Oye, estoy con Taehyung y... queremos ver películas. ¿Quieres venir?

—¿Qué rayos haré yo entre ustedes?

Pues, ver la película. Duh... —rodé los ojos—. Además, Jungkook se fue con los demás, y dudo que regresen temprano. Haremos maratón, veremos las que tú quieras. Vamos, di que sí. —suspiré.

—¿A dónde se han ido?

No tengo idea, pero Tae no quiso ir con ellos.

Bueno, ya voy...

Me parecía extraño todo lo que me había dicho, es decir, ¿se ha ido todo Bangtan a algún lado y Taehyung no quiso ir? Además, si eso fuera cierto, tenían toda la casa para ellos dos solos, ¿por qué querrían que yo esté?
Me cambié de ropa y partí hacia la casa, aún dándole vueltas al asunto en la cabeza.
Toqué la puerta y se abrió unos segundos después, dejándome ver a la nada misma detrás de ella. ¿Pero qué...?

—¿Ronie? —la llamé, pero no obtuve respuesta. La casa estaba a oscuras completamente, lo único que se podía ver era mi sombra por la luz de fuera. Cerré con cuidado la puerta detrás de mí y las luces se encendieron, dejándome ver a Taehyung con una radiante sonrisa frente a las escaleras.

—Hey, llegaste. Ven vamos a la sala.

Me tomó de los hombros y prácticamente me empujó hacia la habitación, donde apenas me asomé, saltaron todos de detrás de los muebles sólo para darme un susto de muerte y gritar "sorpresa". Todos estaban ahí, hasta Hyunjin y Jeongin.

—Feliz cumpleaños, Katherine. —dijo Namjoon.

—Gracias, chicos. Es un lindo gesto de su parte. —Taehyung me rodeo con sus brazos y yo volteé para abrazarle correctamente.

Me acerqué uno por uno a todos para abrazarlos también, recibiendo palmaditas en la espalda y algunos besos en la mejilla. Jungkook fue el último, y sin que le importase demasiado estar en una habitación repleta de personas observándonos, se apoderó de mis labios de manera posesiva, tomándome del mentón y de la cintura.

—Disculpa mi comportamiento en el día de hoy, todo era parte de la sorpresa. Feliz cumpleaños, Kath.

—Gracias.

Jin entró en la habitación con un gran pastel cubierto de crema de color blanco y rosita pálido, con diecisiete velitas celestes. Comenzaron a cantar mientras yo observaba el pastel y cuando acabaron soplé, recibí un beso en mi cabeza y Ronie le subió el volumen a la música que había colocado. Una pequeña fiesta de cumpleaños en la que me la pasé hablando con Hyunjin, Jimin y Yoongi, y probando la delicia que Jin había preparado. Jungkook tomó mi mano en un momento, guiándome hacia el patio trasero, hacia unas escaleras que llevaban a la terraza. Subió él y luego yo lo hice, para sentarnos en el borde del final de la construcción, donde la brisa fresca del próximo invierno me envolvía y despeinaba algunos de mis cabellos.

—Aún no te he dado mi obsequio. —dijo tranquilo, sacando del bolsillo de su campera una pequeña bolsita, que tenía un moño azul y una pequeña tarjeta con mi nombre—. Espero que te guste. —abrí el paquete y observé hacia dentro, observándolo luego extrañada.

—¿Qué es esto?

Dejé caer el contenido en mi mano y abrí mi boca sorprendida. Eran un anillo plateado, con una inscripción en la parte interna, con una cadenita del mismo color. Lo observé.

—Sé que no ha pasado el suficiente tiempo, pero quería que tuviéramos algo así. —observé sus manos y él tenía exactamente el mismo en su dedo anular—. Supuse que no te gustaría llevarlo en las manos, por eso la cadena.

—Es muy lindo, Jungkook. Gracias.

Pasé la cadenita por el anillo, leyendo la inscripción. "Jungkook". Fue detrás de mí y tomó ambos extremos de la cadena, con la intención de prenderla, por lo que sujeté un poco mi cabello para facilitarle el trabajo.
Regresó a su lugar y observamos el atardecer.

—Kath, ¿puedo hacerte una pregunta? —me rodeó con su brazo derecho y recosté mi cabeza en su hombro.

—Dime.

—¿Por qué has aceptado ser mi novia? —lo observé extrañada.

—¿Por qué preguntas?

—Pudiste haber elegido a Hyunjin... u otro. Pero no.

—Creo que... sabía que tú serías el que podía intentarlo todo para que yo viera todo lo que tenía para mostrar, que por alguna razón yo no podría hacerlo salir por mi cuenta. Cosas de lo más sencillas, por ejemplo, hablar. Antes de conocerte, puedo asegurarte que no hablaba ni siquiera con Verónica, me costaba mucho expresar lo que sentía, y ahora que estoy contigo siento que... es todo más fácil. —sonrió—. También era muy tosca. Ante los cumplidos no reaccionaba muy bien y a veces hacía sentir mal al otro. —reí—. Pero ya no soy así. O bueno, intento no serlo.

—En otras palabras, era "el elegido". —bromeó, por lo que ambos reímos.

—Algo así.

Vimos a Namjoon salir de la casa y observar hacia nuestra dirección.

—Oigan, no es por echar a nadie, pero mañana tienen escuela y ya es algo tarde.

Reímos y bajamos. Jeongin y Hyunjin nos saludaron y se fueron por su lado, a nosotras nos acompañaron a mi casa. Al llegar, los saludamos y entramos, Ronie se fue a mi cuarto y yo me quedé en la cocina, mi madre estaba hablando con mi hermana.

—Por eso es que hay que volver. —la oí decir, luego se calló cuando entré.

—¿Qué pasa?

—Kath, hija, siéntate. Debemos hablar sobre algo.

—No me espanten, ¿qué ocurre? —las observé a ambas.

—Mamá y papá tuvieron un pequeño inconveniente en el trabajo, Kathie... —Katrina me tomaba del hombro, con un toque de tristeza en su mirada. Observé a mamá.

—No podremos quedarnos más tiempo en este lugar, hijita. Debemos regresar. —y ahí fue cuando se me vino el mundo abajo otra vez. Justo cuando la vida parecía sonreírme, de nuevo me abofetea y se ríe en mi cara, viendo gustosa cómo todo lo que más quería, jamás podría verlo otra vez—. Lo siento mucho, por todas las amistades que has formado y... todo lo que has encontrado de bueno aquí.

Sin decir nada, con la mirada perdida y los ojos a punto de estallar en lágrimas, abandoné la habitación para irme a mi cuarto, donde Ronie al verme me rodea en un fuerte abrazo. Había escuchado la mala noticia.

⩩ ♡̶ !𝐘𝐨𝐮. ─ 𝐽𝑢𝑛𝑔𝑘𝑜𝑜𝑘 ✔︎ ©𝐌𝐢𝐤𝐡𝐚𝐢𝐥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora