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Esperé pacientemente a que todos terminaran de entrar a la sala de juntas.

Habían decidido de que, aunque yo pudiese infiltrarme, harían una redada para sacar todo lo que pudieran o a quien pudieran. Entrarían por el sótano que comunicaba con el edificio de al lado.

El plan era que yo entraría y grabaría todo. Ya Marín se había encargado que el sistema de adentro, me reconociera como socio y así podría ingresar a todas las instalaciones sin restricción. Marín había tardado cuatro días en ingresar a ese sistema, por lo cual, si Milena terminaba negándose a que yo participara...
todo abra sido en vano.

De ahí mi ansiedad cuando todos finalmente terminaron de entrar y Milena se sentó frente a mi.

Yo había hecho todo lo que ella me pidió. Pero no tenía idea de a qué conclusión había llegado.

Emilio se sentó a mi lado, no hizo falta verlo para saber que estaba expectante y nervioso. No era un secreto para nadie que él no quería que me infiltrara y que saltaría de alegría si Milena se negaba a que participara.

-Después de pensarlo mucho... - Habló Milena- y teniendo en cuenta tanto los factores psicológicos como los físicos... creo que no es buena idea que Joaquín se infiltre.

A mi lado Emilio soltó un hondo suspiro de alivio y se dejó caer contra el respaldo de su asiento.

El resto de los asistentes se miraron unos a otros decepcionados mientras yo me quede con la vista fija en Milena. No podía creérmelo, sentía enojo.

-No sería buena idea, pero... clínicamente hablando puede hacerlo.

Sentí como si pincharan mi burbuja de rabia.

-¿Lo dices en serio?- pregunté emocionado.

-Dijiste que no era buena idea- dijo Emilio incorporándose en su silla.

-Y no lo es... no tiene suficiente experiencia, se crió en un ambiente tóxico, donde le metieron todo tipo de ideas que quisieron a la cabeza y ha sufrido maltrato. Pero... Joaquín a demostrado estar mejorando y controlando sus demonios, todos los tenemos. Considero que hará un buen trabajo.

¿De verdad estaba mejorando?

No iba a cuestionarla. Ya estaba.
¡Podía hacerlo!

-¿Y como mierda sabes que no se quedará paralizado una vez esté dentro? ¡Cómo lo permites después que te dije que tiene pesadillas todos los malditos días sin excepciones!

Me giré hacia Emilio echando humo.

-¿Qué tú qué?

Emilio se levantó tan bruscamente que su silla chocó con la pared trasera.

-¿Creías que no iba a decírselo?- me dijo mirándome desde arriba - ¡A penas duermes dos horas seguidas!

Se hizo el silencio y note que todos me miraban, cuestionándose las palabras de Emilio y si en verdad estaba preparado para aquello.

Emilio fulminó con la mirada a Milena y con veneno en la voz, dijo:

-Eres una incompetente de mierda y una irresponsable...

Nunca desde que nos conocíamos, había visto a a Emilio faltarle el respeto a alguien de esa manera. Luego salió de la sala dando un portazo que hizo temblar hasta las paredes.

Trague saliva y giré hacia Milena. Parecía afectada por sus palabras pero lo disimulaba bien.

-Este es mi informa- dijo tendiéndoselo a Karen- En el planteo consecuencias que tendrá después que lo haga, así como las terapias que deberá seguir.

Karen empezó a hojear el informe.

-Gracias por haberme ayudado- le dije en voz suave.

Milena se levantó y me sonrió con calma.

-Cuídate mucho, Joaquín. Espero que cuando esto acabe, puedas seguir adelante y vivir una vida.- Dicho aquello, se despidió de los demás con un gesto de cabeza y salió.

-Entonces manos a la obra...- dijo Emmanuel.

Que empezara la caza de brujas.

Después todos salimos al mismo tiempo de la sala, lo primero que vi fue a Emilio recargado contra una pared pero este me ignoró y fue directo a Karen.

-Quiero hablar contigo- dijo en tono que no admitía réplicas.

Karen suspiro pero le indico que pasara.

Se encerraron y no salieron hasta después de más de una hora. Al verlos acercarse, temi que Emilio hubiera sido capaz de convencer a Karen para que yo no participara. Pero no fue así... fue peor.

-Cambio de planes- informó Karen con Emilio serio al lado- He decidido que Emilio vuelva a su puesto anterior.

Emmanuel se paró para replicar pero Karen lo callo con un gesto de mano.

-No les estoy preguntando o pidiendo su opinión. La decisión está tomada: Emilio liderará el operativo y no se diga más. Él fue quien lo empezó y es justo que él lo termine.

Los chicos terminaron por aceptar la decisión de Karen... menos yo, no del todo.

Sabía que se aprovecharía de que ahora podía dar las órdenes. Sabía que haría las cosas basándose siempre en mi seguridad y no en la misión.

Karen se despidió y luego se marchó. Entonces Emilio se dirigió a todos nosotros.

-Nos vamos en tres días a Miami- dijo con seriedad- No quiero fallos, no quiero a nadie cuestionando mis decisiones y mucho menos quiero a gente desobedeciéndome- Eso ultimo lo dijo mirándome fijamente- Deberas seguir entrenando estos tres días, Joaquín. Estarás al cargo de López y quiero que Marín, le expliques todo lo que tiene que saber sobre ese edificio. Deberá aprenderse de memoria las entradas y salidas, incluso las ventanas. ¿Está claro?

Todos asintieron en silencio.

-Bien. Pónganse a trabajar.

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Amix ustedes son muy lindos :( gracias a los que me escribían y perdón la demora.

Solo quiero contarles que ya volví a mi vida de universitaria y no se como vayan a estar las cosas ahora. Pero siempre que tenga tiempo, cuenten con las actualizaciones.

Vendetta- Emiliaco. (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora