Doce.

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La noche no era fría como alguna noche anterior, y si hacia frío, no lo notaba.

Comenzamos a caminar por la orilla de la playa, ninguno decía nada.
Él miraba al final interminable de la playa mientras que yo miraba como el agua mojaba mis pies. No era un silencio incomodo, aun así se me hacia raro todo esto.

Cuando menos me di cuenta, Luke paro de caminar y yo sin darme cuenta seguí caminado.

-No te vayas.

Giré mi vista hacia él, que ahora se encontraba sentado en la arena. Volví a caminar en su dirección sentándome a su lado.

Seguíamos sin decir nada.

Comencé a jugar con la arena entre mis manos hasta que la suya atrapó la mía.

-Me gustan tus manos, son muy pequeñas a comparación de las mías.- Entrelazó nuestros dedos notando la diferencia de tamaño.

-¿Te pasa algo? Es raro que no me digas nada para cabrearme.

-¿No te pasa que cuando bebes, hay veces que te quieres comer el mundo, pero otras veces sientes que el mundo te come?.- Me miró con semblante serio. No pude evitar mirar aquellos ojos.

Asentí sin saber que decir.

-Hoy siento que es el mundo el que me come.

-No entiendo por que me cuentas esto Luke.

-Posiblemente te lo cuente porque los efectos de el alcohol me hacen decirlo.

Le mire, tenia una mirada perdida. Parecía un niño perdido entre mucha gente.
Un impulso se apoderó de mi, por lo que le abracé.Él se quedo un poco sorprendido por aquel acto, pero enseguida aferro sus brazos alrededor de mi cintura. Alguna vez hacia más presión en el abrazo, como si no me quisiera soltar.

-Estoy lleno de mierda y no se como solucionar todo lo que me pasa. Y lo peor es que involucro a las personas que quiero, cuando ellas no tienen la culpa.

Seguí abrazándole mientras me contaba esto. Es raro ver a un Luke así. Y la verdad, no me gustaba.

-No se a que te refieres, pero supongo que todo se acabara solucionando, tiempo al tiempo.-Susurré mientras Luke clavaba de nuevo sus ojos en los míos. Todo esto es tan raro.

-Volvamos con los demás, no quiero fastidiarte otra noche por mi culpa.

Se levanto, sacudiéndose los pantalones debido a la arena. Me ofreció la mano, que acepte sin dudar y comenzamos de nuevo a caminar hacia los demás.
Cuando estábamos por llegar su mano atrapó mi brazo haciéndome girar sobre mi propio eje para así poder quedar enfrente suyo.

-Gracias por no preguntar nada Danna. Solo, no le digas nada a nadie. Por favor.

-Tranquilo, no diré nada a nadie. Ahora solo disfruta de la noche.

Le di una sonrisa y fui hacia los demás. Una vez sentada me quede hablando con Kristin y Lou, las cuales se han llevado bien toda la noche. Mientras que Luke bebía intentado pasárselo bien.

Al rededor de las cinco y media decidimos volver a casa ya que comenzaba a hacer frío y la mayoría nos queríamos ir.

A la mañana siguiente me levante con una pequeña resaca. Fui directa a por las pastillas para comenzar a estudiar los exámenes. Me espera un semana llena de exámenes y noches largas junto a café.

Ya era viernes y hoy tendría un examen muy importante, necesitaba aprobarlo. Cuando terminé de hacerlo decidí pasarme junto a Kristin a casa de Calum para ver a Jess, llevaba desde la fiesta sin verla y sin hablar con ella.

Cuando llegamos a casa de Calum, Jess nos abrió en cantada. Debido a mis días de estudio no he sabido nada de nadie. Pero tengo ganas de ver a todos, incluido a Luke.

Pasamos toda la tarde viendo películas junto a un cuenco de palomitas.
Calum dijo que saldría con los chicos, yo no tenia ganas de salir, después de una semana tan ajetreada solo quería estar relajada al menos unos pocos días y las chicas decidieron hacerme compañía.

Cuando termino la segunda película de la noche recibí un mensaje en el móvil, mire de quien era y en la pantalla estaba el nombre de Luke, decidí cambiarle el nombre por si acaso me pillaba.

"¿Porque no has venido?"

"No tengo ganas de salir hoy de fiesta,¿Me echas de menos Hemmings?"

Me apetecía jugar un rato.

"¿Yo? No te creas nena, se pasármelo mejor aun que no estés"

"Y entonces ¿A que se debe tu mensaje?"

"Solo quería el saber porque no ha venido la pequeña insoportable Danna"

Sera idiota, aquí el único insoportable era él.

"Vamos reconoce que quieres que este allí, deja de negarlo"

"No voy a negar nada, si queréis venir, yo estaré encantado"

Un cojín se estrello justamente en toda mi cara mientras Kristin realizaba un pequeño baile bastante gracioso y la escuche decir "Pleno". Idiota.

-Chicas, dicen los chicos que si queréis acercaros un rato con ellos.

-¿Y tu? ¿No vendrás?.-Menciono Kristin, la cual si que tenia ganas de salir.

-No me apetece, prefiero irme ya y así descansar.

-Eres aburrida Danna. Ven Kristin, te presto algo.

Las dos fueron hacia el cuarto de Jess el cual compartía con Calum, decidí prepararme para volver a casa.

Antes de salir, me despedí de ellas y comencé a caminar hacia casa, daba gracias de que no era muy tarde y no estaba muy lejos.
Cuando llegué, fui rápidamente a ponerme cómoda.
Una vez lista no tenia nada de sueño para irme a dormir, por lo que comencé a leer un libro que encontré por ahí perdido.

Por culpa de aquel libro me quedé dormida en el sillón del salón con una pequeña luz a mi derecha que provenía de una lampara de mesa.
Eran ya las nueve de la mañana, fui a hacerme el desayuno cuando el timbre de la casa hizo que me sobresaltase.
Cuando abrí me lleve la sorpresa de ver a mis alcohólicos amigos con chocolates y churros.

-Ya que no querías salir con nosotros, desayunaras con nosotros.- Dijo un alegre Mike el cual creo que seguía bebiendo de una botella de alcohol.

Me fijé que estaban todos. Todos excepto Luke, lo que realmente me defraudó.

Quería ver a Luke.

Confident. (Luke Hemmings)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora