Capítulo Diecinueve: Nada cambiará ¿o sí?

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Se jodió esto, fue lo único que logré pensar después de que Daniela saliera por esa puerta, acababa de despertar, y lo primero que hice fue terminar con ella ¿en qué demonios estaba pensando al hacerlo? me pregunté mil veces los días que estuve en el hospital, mi papá y Vale me regalaron un regañó maratónico por ser tan malditamente impulsiva y yo no pude decir nada porque estaba ahogada en llanto.
— ¿Por qué si estás sufriendo tanto aún así la dejaste? — me pregunto Vale tratando de calmarse por hacerme entender su punto de vista, sobre el peor error de mi vida, según sus palabras.
— Porque nos hemos hecho ya tanto daño que tengo miedo que sí seguimos juntas las cosas seguramente se pondran peores, Vale nos pusimos el cuerno mutuamente, nos metimos en una relación abierta sin saber ninguna de las dos realmente en que problema nos estábamos metiendo, y estoy demasiado enfadada con ella, estoy que no puedo ni verla, aunque la amo y quisiera besarla con locura también quiero convertirla en material de funeraria, y veo su cara y solo puedo pensar en todo el daño que me hizo, en cómo me engañó, en como la engañe y en como nos hicimos daño — le grité con todo lo que tenía guardado dentro de mi, mis lágrimas comenzaron a caer lentamente por mi cara. 
— Hija, el daño se lo hicieron las dos, no nada más tú, porque como dijiste hace un rato, las dos aceptaron meterse a esa relación para nada convencional, bueno al menos para mí no lo es, tampoco fuiste una santa porque como lo dijiste tú misma ahora, también tú le pusiste los cachos — me señaló mi papá con amor pero duro al señalarme mis errores.
— ¿No pueden simplemente estar de acuerdo conmigo y ya?, digo yo soy su hija y su hermana no ella — les dije cruzandome de brazos toda berrinchuda porque no entendían mi punto de vista.
— No — dijeron al mismo tiempo y se comenzaron a reír de mí cara.
— Pienso que no piensas lo que haces Poche, simplemente actúas, cosa que con el tiempo te mal influyó mi nuera por cierto  — dijo mi papá como si nada, mientras seguía comiéndose la ensalada que se supone yo me iba a comer, pero gracias a las tretas de mi hermana yo estaba disfrutando una hamburguesa de corral y ellos picaban mi comida del hospital porque se habían ido a comer sin mi. 
— Ya no es tu nuera — repele.
— Claro que es mi nuera y lo seguirá siendo con todo y tus decisiones a la carrera, aunque la verdad no sé cómo vaya a reaccionar cuando se te pase tu berrinche y quieras arreglar las cosas con ella, yo creo que o termina rendida ante ti o te la pone difícil — comento como si nada hubiera pasado haciendo gesto de seriedad.
— Papá, nos destrosamos, nos engañamos de una forma cruel y fastidiosa, nos hicimos pedazos y para colmo nos metimos en lugares demasiado dolorosos, me engañó, la engañe, sus sueños son mis mayores miedos y mis sueños son su mayor punto fragilidad y falta de confianza y temor, una pareja así no puede funcionar, no quiero que lo volvamos a intentar para hacernos daño y terminar peros, estoy hospitalizada y tu todavía la defiendes no te entiendo papá — le dije ya molesta, derramando más lágrimas.
— Está bien hija, termina con ella líbrate del dolor, pero si hay algo que duele más que la tradición o el despecho de que algo no salió bien con tu pareja, es la ausencia de esta persona en tu vida, tal vez me equivoqué y ustedes no se amaban tanto como decían, solo se que sí yo estuviera en tu lugar, iría a dónde fuera a sanar para no volver a perder a tu mamá y disfrutar la vida que me quedara a su lado sin pensarlo — me dijo serio.
— No es lo mismo — seguía montada en mi macho y me valió lo que mi papá me trató de explicar.
— No me preocupa eso amor, porque lo vivirás y cuando sientas el dolor de saber que ya no está la persona que más amas y sientas la soledad tal vez en ese momento te plantees si fue lo correcto realmente terminar con ella mi cielo — no me dijo nada más simplemente cambiamos de tema y seguimos platicando como si nada Vale estaba un poco callada pero no dijo nada en todo el tiempo que estuvimos ahí.
Después de eso, yo me encargue de comunicarle a todos que habíamos terminado nuestra relación incluidos a los medios de comunicación, creí que eso era lo correcto, me sentía furiosa con ella, pero ni haciendo eso mi dolor calmo o la furia desapareció al contrario creo que fue más grande y me sentí peor porque ni quisiera le avisé solo lo hice por mis ganas de terminar por fin con todo. 
Me enteré que estuvo internada tiempo después, había enfermado por haberse descuidado tanto al estar al pendiente de mi en el hospital y me senti ligeramente culpable por eso, pero el día que por fin decidí ir a verla para saber cómo estaba me dieron la noticia de que se había dado de alta como si nada, dejando preocupados a más de uno en el hospital y a su familia, principalmente a Juliana que al igual que yo no sabía ni siquiera en donde buscarla, me regresé a casa pensativa y poco a poco el peso de mis impulsos comenzó a darme lata, sobre todo porque yo valientemente decidí regresar a casa como si nada después de mi estadía en el hospital, el día que llegue ya no estaba nada de ella acá, solo algunas cosas de su despacho pero de ahí más nada.
Estaba pintando cuando escuché a Ramón ponerse como loco, había llegado, le abrí y la persona que me encontré frente a mí no era ni la sombra de quién yo conocía, estaba tan mal que a pesar de tener los lentes puestos pude ver el color nada sano de su piel o la grandeza de sus ojeras, sentí un poco de más culpa porque nunca hablamos sobre si íbamos a hacer publica o no nuestra ruptura y yo elegí por ella y si la conozco lo suficiente se que eso fue de las cosas que más le dolieron, pero a mí también ella me había echo mucho daño.
Entro como un zombie y guardo sus cosas, Ramón entró con ella y se veía ansioso mi perrito desde que volví la había pasado mal, jugaba conmigo pero a determinada hora se sentaba frente a la puerta para esperarla. Se llevó todo, hasta esa manta que le había regalado años atrás como si fuera lo último que le quedará para no sentir tanto dolor y eso me destrozó mucho más.
Hablo con Ramón y le explicó que ya no lo vería en algún tiempo y mi hijo se soltó a llorar literalmente de una forma tan dolorosa que no supe cómo reaccionar pero lo pero fue cuando cruzo la puerta.
En ese  fue como si el chip funcionará de nuevo en mi mente, ¿qué pendejada hice? estuve muy triste y de la nada llore y lloré y lloré y no pude detenerme, trate y trate y trate de que no me dolíera pero fue en vano por completo.
Y exploté creo que lo peor vino después porque yo me había quedado en la casa donde habíamos creado tantos recuerdos bellos, pero ahora no eran más que torturas mi papá tenía razón, me arrepentía de haberla dejado, pero no la quería cerca de mí por ahora, esto era una estupidez por completo y un desastre peor, pero yo la había cagado y ya no sabía que hacer con claridad y más porque Calle cumplió con lo que me dijo,no nos volvimos a ver días después pero yo ya no podía más así que decidí i rme por un tiempo a pensar y pedír ayuda porque todo era demasiado complicado para que pudiera entenderlo yo sola. Aún así no hubo día que no la amara, la odiara, me enojara porque no eran las cosas como yo quería o la extrañará con toda mi alma.
Antes de irme fui de nuevo con Elisa necesitaba hablar con alguien que me ayudara a comprender mi mente y toda esa bola de pensamientos que no tenían lógica ni razón de ser.
Mis pensamientos estaban tan revueltos en mi cabeza que ya no sabía ni siquiera cómo mantener a raya todo lo que pensaba y sentía, ella simplemente me miró me escuchó y me dijo que en mí estaba la respuesta, algo muy cliché, me dijo, además que en una sesión no podía ayudarme a  encontrar lo que realmente quería pero me aconsejó que si me iba a ir lo hiciera con todo y trabajara en mi persona, pero de a deberás y en lo que quería y eso fue lo que hice me alejé me fui a Brasil.
El destino es curioso porque me la encontré ahí y me abrazó, hablamos un poco y supe que siempre la voy a querer, que siempre la amare y que nunca podré olvidar esa historia de amor tan fuerte que teníamos.
Siempre me quise ir a Brasil, estuve ahí bastantes meses hasta que un día lo supe era momento de regresar, tenía muchas cosas pendientes y como ella me lo había dicho Elisa trabaje en mi persona reconocí y entendí que si nuestra relación se había ido al carajo no había sido solamente por cuestiones de Calle sino que las dos habíamos hecho todo lo posible por lastimarnos.
Creyendo que teníamos la razón y actuando en función de eso pero aún así estoy segura de que yo merecía un cierre y quiero saber qué fue lo que pasó con ella y como está al final no puedes dejar de amar a alguien que fue el centro de tu vida por casi 10 años con problemas y todo.
Necesito saber que este amor no fue en vano, además es un poco difícil tratar de olvidarme de ella cuando nuestros fans cada dos minutos nos etiquetaban en cosas diferentes ambas tratando de que recordaremos que fue lo que nos unió y lo que hizo que nos enamoramos la una de la otra había momentos en los que yo quería ir corriendo con ella con un montón de videos en mano de nuestros mejores momentos juntas pero, no lo hacía porque eso me daba mucho miedo y no lo creía lo más correcto, así que deje de usar mis redes sociales con el tiempo para evitar ese dolor.
Habíamos abandonado nuestras redes sociales las dos gracias a esa situación y aunque sabía muy poco de ella, sí sabía que no la pasó mejor que yo, pero aún así necesitaba verla sea como sea que estuviera, no me importaba saber si me ha olvidado porque yo ya no quiero nada con ella simplemente, necesitaba arreglar las cosas con ella y concluir esta historia porque no creo que cambie nada si la vuelvo a ver, mi forma de pensar y sentir respecto a ella no iba a cambiar nada o sí.
Y aquí estábamos desnudas en la cama después de una tarde hermosa llena de pasión, solo nos entregamos sin esperar nada, me puse demasiado celosa cuando la vi sonreír tanto después de esa junta tan incómoda, y es que en cuanto entro por esa puerta solo me la quería comer entera de las formas más puercas posibles y vaya que nos dimos con todo lo que teníamos, nos entregamos sin medida y sin esperar nada solo disfrutando el momento.
— ¿Cómo diablos te voy a embarazar? Poche, no seas ridícula — me dijo haciendo un puchero enorme y yo sólo me reí de la cara de boba que puso.
— Ya lo se pero fue super divertido ver tu cara de angustia — me reí de ella, se enojo y se iba a parar de la cama pero no la deje en lo más mínimo me le monte encima como si fuera un Koala.
— Bájate mono loco — me dijo aún brava ,yo no le hice caso y comencé a besar su cuello de nuevo deleitándome de su sabor y su calor contra mi piel. 
— Cálmate por favor, era una pequeña broma para quitarle lo pesado está situación que de por sí ya es rara — le dije sin bajarme de ella, metiendo mis manos debajo de ella a la altura de sus senos, los cuales comencé a acariciar a mi antojo sin dejar de besar sus hombros y espalda, podrán pasar miles de años pero para mí jamás voy a dejar de amar su espalda y hombros como me excitan esas partes de su cuerpo.
— No seas tramposa — me dijo en un suspiro disfrutando de mis manos.
— No puedo cansarme de ti aunque lo intente — le dije antes de clavarle mis dientes con toda la fuerza que pide en el cuello a la altura de su yugular, ella solo gimió tan sexy contra la almohada.
— Debemos hablar — me dijo entre gemidos.
— Hablemos mañana, hoy tengo demasiadas ganas de ti, como para perderme la oportunidad de tenerte entre mis piernas de nuevo y probar tu sabor, comencé a morder su espalda siguiendo el camino que formaba su columna y nos perdimos en el sabor y el deseo de la otra.

Continuará...

😍 Efecto Mariposa (Fuerza Interior)😍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora