Sugar, daddy ; kth, jjk [+18] COMPLETA

30. [estás muerta]

¿Alguien echa de menos al Sr. Kim? .❛ ᴗ ❛.

Jungkook

Agradecí haber cerrado las cortinas de la cama, porque opacaban la luz natural.

Era una de esas típicas camas que habían en los hoteles de destinos exóticos, esos lugares privilegiados que los enamorados elegían como viaje de luna de miel.

¿Tendría yo una luna de miel?, ¿o al menos un viaje solo con Areum?

Todavía recuerdo haber pensado en ella cuando compré la cama: en todas las veces que se quedaría a dormir aquí, cuando su casa no se sintiera como un hogar y necesitara un refugio.

Estaba más que bienvenida a estar aquí conmigo

Mi cerebro comenzó a tomar consciencia de la noche de ayer, y también del peso externo que había sobre mí. Mis manos apreciaron la calidez de la superficie, y no me autoengañé más al percibir el familiar olor a cerezas de su champú.

Al abrir los ojos, confirmé que Areum estaba encima de mí. Lo que tenía en la mejilla no era una almohada térmica, sino la curva de su cuello; ese magullado.

Reviví la discusión de anoche en mi cabeza, y se me encogió el corazón al haberle hecho llorar. Me ponía muy mal ver a Areum triste; parecía que ya tenía suficiente con Kim, y yo no quería hacerla sentir igual.

En vez de despertarla, me quedé en silencio bajo ella. Acaricié su espalda en mociones lentas, y no me separé de la calidez de su cuello.

Me daba igual quién le hubiera hecho qué en la piel, lo importante es que ahora estaba conmigo.

Está dormida encima de ti como un bebé, ¿acaso tiene el puto Kim esa confianza? No.

Abracé su cintura para dejar de pensar, disfrutando de su peso sobre mí, de tener su pecho apretado contra mi barbilla. No me podía mover aunque lo quisiera, y tampoco era el caso.

En algún momento de la noche, me había quitado la camiseta por costumbre; y Areum se había subido encima de mí. Y por supuesto que mi subconsciente no se lo había negado, ¿cómo iba a rechazar el contacto físico con ella?

Notaba su respiración en mi pelo enmarañado, y también el compás regular de su pecho. Debería quitármela de encima, dejarla durmiendo lejos de mí.

¿Qué sentido tenía estar durmiendo así de juntitos si luego se iría con Kim?

Maldecí para mí mismo, pero hice caso a mi voz interior y comencé a desenrollar sus brazos y piernas de mí.

-Hmmnn... -obtuve un gemido quejumbroso como respuesta, y cesé los movimientos para no despertarla. Volvió a enganchar los dedos en mi hombro, y por un momento me permití disfrutar el suave roce contra la sensible piel.

Llevaba algunos días sin excitarme, la tristeza y el estrés desde siempre me producían disfunción eréctil. Y actualmente, estar en una escena así de bonita con Areum no me afectaba físicamente; nada de erecciones matutinas.

Así, al menos, no haces tanto el puto ridículo delante de ella

Me tumbé de lado sin avisar, y dejé su cuerpo dormido en el colchón. Me sentí un poco extraño al notar la falta de calor que Areum había dejado, pero aproveché para hacer inspiraciones profundas.

-Mmmnn...

Apoyé la mejilla en la almohada para ver su boca fruncida, y su mano comenzó a buscar la almohada humana que le acababa de quitar.