33. Cuando se suponía que...

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Cuando se suponía que nada podía ir mal.


La heladería quedaba prácticamente, en la esquina de al frente del instituto. Caminábamos distraídamente por el aparcamiento, la mayoría de los alumnos entraban a sus respectivos autos mientras que otros se detenían a conversar un rato. A pesar del supuesto ambiente normal que rodeaba a todos, algunos no dejaban de lanzarnos algunas miradas acompañadas por una leve sonrisa. Era más que seguro que eso se debía a la guerra de comida y lo muy divertida que había sido, digo, ¿quien regularmente tiene una de esas en su instituto? Absolutamente nadie.

Antes de que pudiéramos cruzar completamente el aparcamiento para alcanzar la salida, Anahí apareció seguida por sus dos secuaces. Lucía otra ropa diferente a la del almuerzo y una amplia sonrisa en el rostro. Pensé que se dirigiría hacia nosotros para atacarnos o al menos hacernos una escena pero me equivoqué, siguió de frente pero sí que nos dirigió una especie de mirada maliciosa la cual no pude comprender.

—¿Qué estará planeando esa perra? —susurré hacia Alfonso.

Él pareció sorprendido por mi pregunta.

—¿Anahí? ¿Qué pasa con ella?

—No has visto la mirada traumática que me ha dirigido.

Una sonrisa de diversión adornó su tranquilo rostro.

—Dudo mucho que se atreva a hacerte algo... al menos si no quiere enfrentarse a mí.

Reí. —¿A ti?

—Oh créeme preciosa. —pasó una mano por mi cintura y acercó sus labios a mi oído. —Puedo ser realmente peligroso.

Muy bien, ahora había tenido un flashback del viejo Alfonso que hizo recorrer un placentero escalofrió por mi espalda.

—Oh vamos. —la voz de Ginny nos sacó de nuestro momento. —No se pongan todos románticos...

Le dirigí una mirada de pocos amigos a mi mejor amiga.

—Cállate. —le dije entre risas.

Nosotros cuatro nos pusimos a reír. Estando en la puerta de salida del instituto para dirigirnos a la heladería, un chico vestido con el buzo de natación se acercó hacia donde nos encontrábamos.

—Alfonso. —el chico se dirigió a el sin antes lanzar una mirada hacia mi lado. —El entrenador quiere que vayamos a la practica.

—¿Practica? —Alfonso lució confundido. —La ultima practica fue ayer en la tarde, tengo este tiempo libre.

El chico dudó un poco antes de responder.

—No lo sé. Solo me dijo que te pasara la voz para que fueras a la practica.

Intercambié una mirada extraña con Alfonso, el día de ayer lo había acompañado a la practica y había escuchado claramente como el entrenador les decía a todos los chicos que esa sería la ultima antes de las finales estatales. Por lo visto el entrenador parecía haberse olvidado de sus palabras.

—Bueno, supongo que tengo que ir.- Alfonso giró hacia mí esbozando una media sonrisa. —Vuelvo pronto, linda.

—Te estaremos esperando en la heladería. —le respondí y deposité un beso en sus labios que inmediatamente me respondió. —No tardes mucho.

—Lo prometo. —volvió a besarme.

Observé con cierto pesar como Alfonso caminaba siendo acompañado por el muchacho de nuevo al instituto. Ginny junto a Charlie se pusieron a mi lado, supongo que la salida se vería frustrada durante unos segundos pero eso no quería decir que se hubiera echado a perder.

—Ven, vamos. —pidió Ginny. —Ya nos alcanzará. Conociendo a Alfonso es capaz de escabullirse.

Sonreí en respuesta. Giré hacia mis amigos para seguir caminando con dirección a la pista, además mi apetito mismo me obliga a decidir que ir a la heladería era lo mejor. Mientras cruzábamos la pista escuché como alguien desde atrás gritaba mi nombre, era Alfonso. Giré hacia él inmediatamente deteniéndome, y antes de que pudiera toparme con esos ojos verdes que tanto me fascinaban, fue cuando lo vi.

Era un auto color negro viniendo directamente a mi dirección, por más que los frenos se hacían sonar ante el inútil intento del conductor, no había la menor duda que impactaría contra mí. No existía forma en que pudiera correr estando tan cerca, pero antes de lo pensado, sentí como unos brazos me envolvían para tirarme hacia un lado, alejándome del peligro.

Fue un golpe no tan leve pero casi imperceptible, simplemente cae contra la pista golpeándome el brazo, apresuradamente giré hacia donde un momento atrás se hallaba el auto y antes de lo que pensaba, el cuerpo inmóvil de Alfonso se hallaba en el costado derecho, un poco alejado. El impacto lo había hecho volar por los aires.

Él me habia salvado y ahora...

Escuché los gritos de los que estaban alrededor, inmediatamente di un grito pidiendo ayuda o que alguien marcara el numero de emergencias. Mi cabeza empezó a dar improvisadamente vueltas pero a pesar de eso me levanté y corrí hacia donde se encontraba Alfonso.

Cogí entre mis manos su rostro, una línea de sangre proveniente de un golpe en su cabeza me hizo soltar un alarido. Los ojos verdes se entreabrieron para poder encontrarse con mi mirada.

—Alfonso. —imploré temblorosamente. —Por favor, amor... resiste.

—Dulce... —susurró débilmente antes que sus ojos se cerraran por completo.

—¡Ayudenme maldita sea! ¡Auxilio!

Un dolor nunca antes sentido en mi pecho parecía consumir cada centímetro dentro de mi cuerpo. Tener a Alfonso, así entre mis brazos, era como estar sosteniendo la otra mitad de mi alma que estaba a punto de desvanecerse.

Las lagrimas salían inconteniblemente de mis ojos, escuche la voz de Ginny a mi costado mientras pedía ayuda al igual que yo... la voz de Charlie pidiendo a gritos que enviaran un ambulancia por medio de su celular. Cada uno de ellos muy preocupados pero ni siquiera lejos conforme como yo me sentía.

Aun con la vista nublada, logré percibir la imagen de Anahí ubicada en el pavimento al igual que el resto de observadores preocupados.

Una sonrisa adornada en su maldito rostro y justo por debajo, casi como si quisiera que fuera sutil... su dedo índice levantado hacia donde yo me encontraba con Alfonso inconsciente entre mis brazos.

 su dedo índice levantado hacia donde yo me encontraba con Alfonso inconsciente entre mis brazos

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Bueno bueno, aquí están los dos capítulos como había dicho. He cumplido. 😅

¿Cómo vieron este capítulo?
😭😭

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DULCE & ALFONSO (TRENDY) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora