Alba está especialmente contenta por su concierto en Pamplona, ¿tendrá algo que la ver la presencia de cierta persona en él?
🌧
Narra Alba
Acababa de salir de la academia y tenía el corazón en un puño. Volver a entrar en la academia había sido algo impactante. Me había despertado un sentimiento de nostalgia impresionante. Recordé todos los grandes momentos que viví ahí y que muchos de ellos volvería a vivir sin lugar a dudas. Pero sobretodo echaba de menos los momentos con cierta persona cuando estaba encerrada allí.
-¿Cómo te sientes?- Me preguntó Noe cuando ya habíamos bajado de la academia.
-Es raro pero bonito.- Le sonreí a la directora sinceramente.- Me ha entrado mucha morriña.- Puse un puchero.- A veces me gustaría volver.
-Ay pequeña.- Dijo Noemí abrazando de nuevo.
-Mujer es normal que tengas sentimientos encontrados.- Me dijo Manu con una sonrisa en los labios.- Hace un año estabas tú ahí.- Me acarició la espalda cariñosamente.
-Hay veces que me gustaría volver.- Suspiré pensando en lo bien que me lo había pasado en la academia.
-Esta es tu casa Alba, puedes volver cuando quieras.- Me sonrió Noemí.
-Bueno, y poco se habla de lo mucho que has gustado ahí arriba.- Dijo Manu intentando cambiar de tema. A mí me salió una sonrisa involuntaria.
-Son súper lindos.- Dije sin dejar de sonreír.- Me encantaría conocerlos a todos un poquito más.
-Gerard te acaba de pedir matrimonio Alba.- Me informó Ismael mirando su móvil riendo.
-A mí me encantaría pero no puede ser.- Dije haciendo que todos soltáramos una sonora carcajada.
Estuvimos un rato hablando con ella hasta que decidimos que el momento de volver al hotel donde nos estábamos hospedando Ismael y yo. Por el camino, no pude evitar pensar todo mi paso por el programa. Aunque estuviéramos expuestos 24 horas y había veces que no me hacía mucha gracia, no cambiaría mi paso por la academia por nada del mundo. Había conocido a personas maravillosas a las que quería y admiraba muchísimo. Y por no hablar del calor de mis fans. Siempre estaba el típico comentario a malas pero prefería quedarme con los buenos, esos me llenaban el corazón.
-Alba, ya hemos llegado.- Me avisó Ismael viendo que me había quedado mirando por la ventana sin decir nada.
-Voy.- Dije rápidamente bajándome del coche que nos habían puesto.
-Te has quedado empanada pequeña.- Me dijo Ismael entrado por la puerta del hotel y pasando un brazo por mis hombros.- ¿Te encuentras bien?- Preguntó preocupado el andaluz.
-Estoy bien, solo me había quedado pensando.- Suspiré pesadamente llamando al ascensor.- A veces me gustaría estar incomunica como en la academia, todo esto sería más fácil.- Dije una vez dentro del aparato.
-No siempre el camino más fácil es el mejor Alba.- Dijo acariciando mis brazos para animarme.
-Lo sé.- Murmuré cerrando los ojos hasta que sentí como se abría la puerta del ascensor.- Nos vemos mañana Isma.- Le dije el productor cuando llegamos a nuestra planta.
-Hasta mañana pequeña.- Dijo besando mi frente para después irse por el pasillo contrario del mío.
Caminé por el pasillo del hotel en dirección a mi habitación, tenía unas ganas tremendas de acostarme en la cama. Abrí la puerta con mi tarjeta y entré a la habitación cerrando la puerta tras de mí. Nada mas entrar pude cerciorarme de que alguien había hecho la cama que había deshecho ese medio día para echarme la siesta.
