¿Cómo puede afectar la prensa y los fans De Alba a su relación con Natalia?
🎼
Narra Alba
Estaba tirada en mi cama sin hacer nada con el móvil. Ese día, estaba bastante aburrida. Mi hermana había salido y no podía entretenerme haciendo algo con ella. Suspiré pesadamente mirando al techo y tras pensarlo unos segundos, me metí en instagram para hacer un directo.
Tenía un poquito abandonados a mis seguidores aunque no era mucho de hacer directos y de estar posteando todos los días. La verdad era que me había hecho un personaje público casi sin pretenderlo. Estaba acostumbrada a ir a muchos eventos con mis padres pero cuando me empezaron a invitar a mí solo, me di cuenta que había saltado a la fama casi sin pretenderlo.
No es que me gustase mucho que los medios se metieran en mi vida pero por otro lado siempre que leía las cosas positivas de mis fans me sentía genial. En mis redes me dedicaba a subir contenido sobre mis pinturas y un algo de música. Eso a la gente parecía gustarle porque me había vuelto muy conocida y seguida. Hasta me paraban por la calle para echarse alguna foto conmigo.
-¿Para cuándo una cover?- Leí uno de los mensajes que iban poniendo el directo.- Pues estoy esperando a que mi novia tenga un poco de tiempo para que me ayude con la guitarra y poder grabarla pero espero que sea para pronto.- Dije sonriendo abiertamente.
Si había algo que me gustaba de mi fandom era que la mayoría se habían tomado muy bien mi relación con Nat. Ya podía subir tranquilamente contenido con ella en la redes sociales sin miedo a que se formase un revuelo.
Cuando hicimos público lo nuestro, lo primero que hizo Nat fue privatizar sus redes sociales. La entendía muy bien, mi chica no era un persona que estuviera acostumbrada la fama y se sentía más cómoda estando en la sombra al principio. Después de unos meses de relación, y cuando la cosa estuvo más calmada, mi novia decidió volver a hacer público su perfil. Por suerte no se armó un gran revuelo. Es más, las canciones que subía Natalia a su cuenta se habían ganado un montón de fans.
Hablaba con mis seguidores tranquilamente cuando oí como tocaron a la puerta tímidamente. Miré hacia la puerta y entoné un pequeño adelante. La puerta se abrió lentamente dejando ver a una cabecita pelinegra. Sonreí inconscientemente al verla. Ella me lanzó un beso desde la puerta y me hizo saber que se iba ya.
-Bueno chicos, voy a dejar por ahora el directo.- Informé a mis fans que ya estaban haciendo tenías sobre quien había llamado a la puerta.- A lo mejor, en un ratito vuelvo a hacer otro.- Expliqué y tras despedirme, salté de la cama para correr a sus brazos.- ¿Pensabas irte sin despedirte Nat?- Le pregunté con puchero apoyándome en su pecho.
-Jo Albi, es que estabas con tu fans y no te quería molestar.- Dijo mi novia apretándome con más fuerza, mi bebé de metro ochenta.
-Tú nunca molestas cariño.- Le sonreí separándome de su pecho para acariciar su mejilla.- ¿Te vas ya?- Le pregunté y ella me besó la palma de la mano.
-Sí mi amor.- Contestó rodeando mi cintura cos sus brazos.- Ya he terminando la clase.
-¿En serio no te puedes quedar?- Le pregunté con puchero y poniendo mis mejores ojos de gata para convencerla.- Aunque solo sea ha cenar, hace mucho que no pasamos un ratito juntas cielo.- Le pedí tiernamente. Habíamos estado muy liadas las dos con los exámenes finales y apenas habíamos pasado tiempo juntas. La echaba mucho de menos.
-Sabes que me encantaría reina.- Sonrió mi novia agarrando mi cintura.- Pero ya sabes que no quiero molestar.- Rodé los ojos cuando la oí decir eso.