Narra Lourdes

21 2 0
                                    

Cuando yo tenía 5 vivía en la ciudad de Balcarce, a 4 horas de donde ellos Vivian. Claro que no los conocía todavía y de hecho no fue hasta muchos años después que lo hice. Vivía con mi mama con quien nos mudamos seguido. Conocía a mi papa pero no lo visitaba nunca, me daba igual. Tenía un novio en el jardín, vivía hablando de él y el hacía lo mismo en su casa. Ahora cuando lo recuerdo me hace mucha gracia.

Cuando cumplí 6 años comencé la escuela primaria en una escuela privada que mi mama apenas podía pagar, pero hacia su esfuerzo. Ahí encontré a una amiga muy especial y por especial me refiero a que estaba bastante tocada, pero no es como si yo fuera la persona más lógica del mundo. Después de todo yo pensaba que si mirabas la tele desde los costados podías ver lo que no veías desde el frente. Son tonterías que los que crecieron con las pantallas planas no comprenderán.

Supongo que tuve una infancia bastante buena: vivía al lado de una casa llena de chicos de mi edad así que jugábamos todo el tiempo en la calle a la pelota, con barriletes, hacíamos carreras con bici y a veces juntábamos a todos los vecinos de la cuadra y jugábamos a la escondida de a grupos de 15 chicos. Odiaba contar en ese entonces y mucho no ha cambiado eso al día de hoy, solo que ahora odio las matemáticas y en ese entonces para las escondidas era para lo único que las usaba. Otra cosa que me gustaba hacer era ir a las plazas y bendito sea este gusto. Si no fuera por eso, muchas cosas hubiesen sido distintas.

La Historia que nunca ocurrióDonde viven las historias. Descúbrelo ahora