7 - Relato

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Es cortísimo, lo sé. Mañana vuelvo con otro en compensación.

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Anna se aferra a Elsa por un par de minutos. Ella y Kristoff la llevan hasta donde está su improvisado picnic y la sientan entre ellos con un vaso de chocolate caliente que poco a poco ayuda a devolverle el color a la cara.

Los rubios mantienen un silencioso respeto por la chica, que quince minutos después de la discusión, toma aire profundamente y cierra los ojos fuerte.

"Gracias," susurra. "No sé qué hubiera hecho sin ustedes."

"¿Quieres contarnos qué pasó?" consulta Kristoff con voz suave. Anna se remueve un poco, pero abre la boca un par de veces antes de comenzar, mirando fijo hacia el césped frente a ella.

"El miércoles... salí rápido de la clase para ir a mi cuarto a prepararme para una cita. Con Hans. Pasó por mí a las 7, fuimos al cine y a comer a un lugar caro, pagó todo él. Quiso que lo acompañara a la casa de la fraternidad, pero me negué..." Suspira de nuevo. "En ese momento se comportó como un caballero, me acompañó a mi edificio... Me besó antes de irse." Una lágrima se le escapa al cerrar otra vez los ojos. "Hoy me lo encontré esperándome en la puerta cuando quise salir a correr. Caminamos hasta aquí, volvió a invitarme a la casa de SYK... Y cuando lo rechacé, me tomó de la muñeca y me dijo que yo se lo debía, porque..." No puede evitar que se le quiebre la voz. Se toma un momento, pero continúa con un hilo de voz. "Porque él pagó todo en la cita. Y por eso debo ir con él y..."

"Hijo de-" comienza Kristoff. Elsa lo interrumpe con tono gélido.

"Debes reportarlo." Su compañero la mira serio. "No debe ser la primera vez que lo hace. Y no será la última. Si lo reportas, puedes detenerlo."

"No, no importa..." Anna está visiblemente incómoda. "No quiero problemas..."

"No vamos a presionarte ni haremos nada que no quieras," agrega, mirando significativamente a Kristoff, que asiente enérgicamente, aunque sus puños están apretados y su mandíbula muy tensa. "Pero podemos acompañarte cuando lo desees."

Tras unos segundos de silencio absoluto, Anna vuelve a inspirar profundo.

"Gracias," susurra otra vez. "Les avisaré."

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