The boy with no name [T.k] ✔

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La alarma sonó al lado de su oído, y Taehyung por puro reflejo lanzó su celular al piso. Había olvidado que la noche anterior estuvo charlando hasta tarde con Jimin por un trabajo que no habían terminado y él no tenía la mínima intención de terminar.

El muchacho se levantó de la cama y se dirigió a paso lento y a regañadientes al baño. Quería seguir durmiendo pero sabía que debía respetar un poco el horario de su universidad, sino, después de todo, el esfuerzo que habían hecho sus padres al enviarlo a New York no había valido la pena. Él vivía solo y con dinero que le era enviado por correo todo los meses gracias a sus padres aunque él estaba trabajando en una tienda de mascotas cerca de su casa, le pagaban muy bien pero no se compraba con el gran monto de dinero que sus padres le dejaban.

Taehyung se apresuró a ducharse y luego a buscar la ropa del día. Usaría su conjunto negro como de costumbre. Estaba haciendo frío así que completo todo su estilo con una chaqueta de cuero blanco... Se pintó un poco los labios con bálsamo de fresa y tomo sus cosas para salir de la casa.

A pesar de que la universidad estaba a tan solo tres cuadras, él deseaba tener un auto, solo para llegar en él y lucirlo. Taehyung caminó hasta llegar al parque, quería esperar por su amigo pero algo le decía que el muy idiota llegaría más tarde que él, sabía perfectamente que si Jimin se quedaba hasta tarde madrugando, no se despertaría a tiempo para llegar con él.

Cuando Taehyung iba a doblar la esquina del parque que cruzaba a su universidad, un chico en una banca alzo una taza de plástico.

— Hola señor — saludo amablemente el chico cuando Taehyung quiso pasar de él, pero esa palabra lo hizo detenerse y mirarlo con mala cara. — ¿Tiene una moneda que pueda darme? — el chico le hizo una especial de puchero y Taehyung puso los ojos en blanco.

— Primero, no me digas "señor" — le contestó Taehyung algo furioso ya mirándolo de frente. El chico sin nombre se sintió diminuto ante la presencia del hombre con cabellos negros rizados — y segundo — Taehyung levantó dos de sus dedos — no tengo porque darte algo, solo te pondrás borracho o te irás a drogar por ahí.

El chico lo miro un poco sin entender, pero luego le dijo:

— No hago esas cosas... — se defendió y luego de poner un puchero le mostró la taza vacía — solo una moneda que no le sirva... — el chico bajó la voz — no podré comer nada en todo el...

— ¡Taehyung! — una voz aguda se hizo presente bastante cerca de ellos. Jimin venía corriendo con su bolso moviéndose para todos lados. El anterior mencionado se llevó una palma a la frente, genial ahora Jimin había revelado su nombre a un posible asesino serial... Claro porque todas las personas sin hogar tenían que serlo ¿No?

Taehyung era un estúpido en todo el sentido de la palabra.

— Holaa — Jimin corrio hacia él pero se detuvo al ver al chico que seguía con la taza levantada. — ¿Haciendo caridad TaeTae? — Jimin se alegro mucho, claro pensaba que el descarado de su mejor amigo le daría dinero al chico que se lo pedía.

Taehyung se volteó y se alejo del chico en la banca, Jimin solo se quedó allí parado viendo a Taehyung irse.

— Lo siento. — Jimin se disculpó por la actitud de su amigo — ¿No te ha dado nada, verdad? — el pobre negó con la cabeza, lamentando. — Ten.

Jimin saco de su billetera unos veinte dolares y los puso en la tacita. Ese día Jimin había olvidado todo el cambio en su casa ya que se levantó de pura casualidad y vio que se le hacía un poco tarde. Hasta había olvidado su celular y no tenía intenciones de volver y buscarlo.

— Cómprate algo rico. No lo malgastes por favor. — y se fue corriendo para alcanzar a su mejor amigo, dejando al chico sentado en la banca con la boca abierta: Jimin le había dado más dinero de lo que él llegaba a juntar en una semana y media.

Cuando Jimin alcanzó a Taehyung éste lo regañó.

— ¿Por qué le diste dinero a ese idiota? — sonó rudo. — ahora te pedirá todos los días. Veamos cómo te las arreglas.

Jimin no pudo evitar molestarse por la actitud del contrario.

— Taehyung, deberías dejar de ser tan despectivo — llegaron al salón y se sentaron en la parte de atrás. — ¿Acaso no notaste que estaba súper delgado? Pobre chico, debe tener mucho frío allí afuera..

— Que se joda, debería buscar un maldito trabajo para ganarse la vida, como todos nosotros.

Jimin solo lo observó tristemente mientras que Taehyung acomodaba sus cuadernos.

— Cuando regresemos le darás dinero y si no lo haces te juro que yo jamás volveré a terminar un trabajo práctico para ti.

Taehyung soltó una risa seca.

— Prefiero eso antes que darle dinero para que lo gaste en drogas.

— Pero... Parecía inofensivo... Ni siquiera tenía los ojos rojos o bueno, tampoco olía al alcohol.

— Todos fuman, beben y se drogan es una vida de mierda.

— Eres muy malo Taehyung. Ese chico debe haber pasado cosas feas. — Jimin tenía un gran corazón. — en serio, deberías ser un poco más generoso, te sentirás bien luego de hacerlo, creeme. Aparte, tienes mucho dinero que te sobra al mes, no te cuesta nada dejarle unos diez dólares, quizás con eso hasta lo salves de morir de hambre.

Taehyung volvió a resoplar.

— ¿A mí tiene que importarme la vida de ese vagabundo? ¿En serio? A nadie le importa ¿Porque a mí sí debería de importarme en lo más mínimo?

— Para que aprendas a ser mejor persona, Taehyung.