Capítulo 48

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Camila Pov

Pasaron semanas. Semanas en los único que sentí fue un vacío por dentro, como ahora. No tengo ganas de nada últimamente, ni siquiera comer, solo me levanto de la cama cuando la necesidad de ir al baño es muy insistente.

Mi día se basa en despertarme, mirar el techo, llorar y dormir, y así todos los días.

Todavía no puedo comprender como es que lo perdí, que hice mal para que toda esta mierda pasara. No quiero nada, lo único que hago es escuchar el llanto de mi hija y pelear e ignorar a mi esposa que pareciera que no comprende nada de lo que siento. Para ella es muy fácil pedirme que me levante como si nada si no tiene ni puta idea de lo que es perder a un hijo.

-¿Camz?

-No quiero hablar ahora.

-Camila basta-Se sentó en la cama a mí lado y continué dandole la espalda-Estoy cansada de esto, ¿Dónde quedó mi Camila feliz?

-Deja de decir estupideces, no existe ni existió ninguna Camila feliz o a lo que te refieras.

-Sí Camz-Dijo mientras mimaba mi espalda con la palma de su mano-La Camila que eras antes de todo esto-Me dí la vuelta y la miré a los ojos.

-No era feliz antes, ¡¿Qué te hace pensar que ahora lo soy?!

-Sí eras una mujer feliz, con nuestra pequeña familia.

-¡Tú no tienes ni la más mínima idea de lo que estás diciendo Lauren!-Me reincorporé, quedando sentada a su lado mientras la miraba furiosa-¡¿Cómo mierda vas a saber cómo me siento o me sentía?! ¡No lo sabes porque precisamente no eres Camila! ¡Yo lo soy!

-¿Sabes qué?-Se levantó-No tengo idea de cómo te sientes, pero intento ayudarte porque te amo.

-¡Justamente por eso no opines! ¡Tú nunca estuviste embarazada! ¡Tú nunca pariste una vida! ¡Tú nunca amamantaste! ¡Tú nunca has experimentado ni la mitad de las cosas que yo, así que mejor cierra tu bocota!-Una vez que dije todo eso simplemente me dí la vuelta y hundí mi cara en la almohada.

-Tienes razón Camila, pero hay más cosas que nos diferencian además de esas. Tú decisión y deseo fue desde un primer momento egoísta y lo sabes. Puedo entender perfectamente que te duela, pero ¿Sabes qué? Estoy harta. ¡Estoy harta de tí y tus berrinches de niña de 5 años! ¡Te ofrecí un millón de veces en las dos ocasiones que perdimos un bebé quedar embarazada yo para probar suerte! ¡Y la que no quiso fuiste tú!

-¡Cállate Jauregui, no sabes nada!

-¡No me callaré Camila, estoy cansada de tí y tus peleas estúpidas porque sabes perfectamente que luego puedes venir a pedirme perdón y sabes que yo haré como si nada, pero me cansé!

-¡¿Y qué mierda vas a hacer?! ¡¿Te vas a hacer una escena de telenovela y te vas a ir de la casa?!

-¡No, Camila! Cuando quieras hablar como una persona civilizada y sin ganas de atacar al que se te acerque, búscame. Iré a consentir a mi hija, no sé si recuerdas que tienes una que la haces sentir como la mierda solo porque no quieres superar tu perdida-Se dió media vuelta y se dirigió a la puerta-A mí también me duele el hecho de haber perdido a Theo, pero eso no hace que menosprecie lo que tengo-Luego de eso salió de la habitación.

-¡No sabes de lo que hablas, lo que menos sientes es dolor! ¡Eres una piedra con tus sentimientos Lauren!

No me siento bien, otra vez, sentí como mis ojos se llenaron de lágrimas. Hace semanas que lo único que hago es llorar, pero no puedo evitarlo. Tome mi teléfono que a pesar de estar prendido había ignorado por bastante tiempo.

Grace [CAMREN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora