Tócame | Vkook+18

Capítulo 15

Por la mañana preparé un desayuno bastante normal para el rubio, que aún seguía dormido, y para mí.

Normalmente me ahorraba toda la tarea de cocinar, porque estaba yo solo, y podía comer cualquier cosa y estaba bien. Sin embargo ahora estaba con Jimin.

Me senté en la encimera esperando algunos segundos para darle vuelta al hotcake y mi celular sonó con varias notificaciones desde lejos. Le di vuelta y caminé rápidamente hacia el celular en la mesa para tomarlo y caminar de vuelta a la cocina.

Mi pulso se aceleró de inmediato pensando era Taehyung de quien no había sabido nada desde el otro día, ya que ayer no había ido a la universidad, pero no, no era él.

Mamá:

Hola, cielo.
¿Cómo estás?

Mh, tendremos de esas
convenciones a las que te gusta
ir y pensé que podrías venir con
nosotros hoy por la tarde.

Sólo si quieres, ¿vale?

08:37am.

Leí el mensaje varias veces dándole vuelta al hotcake y apagué la hornilla suspirando, claro que me gustaban esas convenciones a las que íbamos, pero las cosas con mi papá no iban nada bien. No desde que le dije que quería mudarme, y que me iban los chicos. Más por eso que por otra cosa.

Respondí diciendo que iría y serví en un plato todos los hotcakes pensando de forma distraída. Era sábado, no tenia planes y me gustaba ir a esos lugares, por qué no.

Nada iría mal.

|•|

-Hijo, estás aquí -saludó mamá con la alegría en todo su rostro, me sentí entonces bien de verla así por mi presencia. Ella lucía tan bien, siempre estaba así de preciosa. Tenia un vestido elegante color verde olivo, dándole un aspecto imponente. -. Tu papá está por ahí, el dueño de algunas pinturas le ha ofrecido un trato importante de acciones. Le conoceremos, así que sé amable y todo.

Asentí interesado, y me paseé por la zona mirando las pinturas, algunas más comprensibles que otras, y otras más llamativas, pero todas impecables y hermosas.

Me gustaba el arte, mucho.

En otro tiempo, yo había querido dedicar mi vida por completo al arte, pero no era muy viable en el momento. Así que decidí irme por donde era fácil, o por lo menos donde tenia asegurado un futuro exitoso.

Mamá poco después jaló de mi brazo para hacerme conocer algunas personas importantes, yo metí mis manos dentro mis bolsillos y repasé mentalmente lo que siempre debía decir.

-Me sorprende que seas tan joven, y que estés en esto de los negocios -dijo extendiendo su mano, un hombre, unos tres años mayor que yo le suponía. -. Soy Jung Hoseok, yo tengo el 25% de las acciones de esta galería -se presentó y yo tomé su mano estrechandola.

-Jeon Jungkook, un gusto -dije sonriendo cortamente en un gesto cortés. No tenia acciones en nada aún, y tampoco era dueño de algo en si, pero ahí estaba congeniando con personas que sí eran mucho más importantes de lo que era yo.

Me sentía a gusto, porque vinieron copas de, con charlas largas explicando algún trabajo importante que tenían en mente para el que necesitaban tener socios asegurados, para triplicar todas las ganancias.

Estaba casi seguro de estar en ese proyecto, me interesaba conocer personas, y pasé largos años aprendiendo de mi papá, así que me sentía ligeramente seguro de lo que podía hacer.

Papá llegó poco después con el tan importante socio del que hablaba mamá, vistiendo un traje con corte diferente al que todos llevábamos en ese momento, todo gritaba elegancia y él parecía estar seguro de que se vestía bien, él sabía que parecía un modelo de revistas gucci.

La vida en ese momento pareció estarse burlando de mí, porque él con una sonrisa embriagante extendió su mano hacia mí, aquella mano de venas pronunciadas y largos dedos adornados por anillos de metal.

-Jeon Jungkook -pronuncié tratando de parecer normal.

-Vale pero si ya nos conocemos, señor Jeon, su hijo es uno de mis estudiantes estrella -dijo apretando mi mano y soltandola luego para dirigirse a mi papá.

-¿Eres profesor de la universidad de aquí? No me lo esperaba -dijo mi papá entonces sorprendido. Taehyung no me apartaba la mirada de encima y yo me mordí el carillo. -. Jungkook, Taehyung es un importante accionista, dueño de algunas pinturas que haz visto por aquí, de hecho él las hizo. Y nos está ofreciendo ser parte de un importante negocio, para el que tú trabajarás.

Asentí lentamente tragando mi nerviosismo. No medí entonces la importancia de las palabras de mi papá.

Yo trabajaría con Taehyung, pasaría tiempo con él, mucho más.

Sí, la vida se estaba burlando de mí. Y Taehyung se mordía la sonrisa satisfecho del resultado de todo esto.