Looking Glass *Traducción*

17.

Advertencia: un poco de lemon antes de la tormenta que viene a continuación.
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—Que tengas un buen día, cariño. —Draco le sonríe a su bruja mientras ella corre alrededor de la habitación, agarrando sus cosas e intentando volar por la puerta. Llegará tarde, le dice, probablemente porque él la mantuvo despierta más allá de la hora de las brujas, por falta de un término mejor que, "sexo de reconciliación"... si puede hacer tal cosa sin tocarla. Basado en el agotamiento de sus huesos y la ligereza de su corazón, él piensa que se puede y mucho.

Habían discutido la naturaleza de su relación antes que nada, tanto del pasado como del futuro. Draco entendió que su desaire no había sido intencional, pero aún lo había lastimado profundamente. No le había importado dejarla convencerlo de sus afectos. Y, como resultado, ella fue aún más juguetona y apasionada de lo que él se había dado cuenta antes. Su bruja se había estado conteniendo durante semanas, tratando de proteger su propio corazón al no apegarse. Ahora que ella está siendo completamente abierta, él está aún más enamorado de ella.

Ella le da una mirada de exasperación, pero, ante su falsa sonrisa inocente, la expresión se funde en adoración. Podría fingir que es dura, pero él parece saber cómo reducirla a un gatito. Lo cual es justo, ya que ella lo puede destruir completamente a cambio. —Estaré en casa después del almuerzo. —le dice, abriendo la puerta y deteniéndose en seco, un pequeño chillido de sorpresa salió de su boca.

—Theodore, ¿Qué demonios?

Nott está de pie al otro lado del umbral, con el brazo en alto y el puño en posición de tocar la puerta que ya no está entre ellos. —Granger. —saluda, imperturbable por su expresión de asombro, luego gira su mirada hacia Draco. —Pensé que podría mantenerte ocupado mientras ella está haciendo pociones de glamour o lo que sea que haga en su pequeña tienda.

Draco puede decir que Hermione no está impresionada. Ella comienza a decir algo, con la boca abierta, luego se detiene y sacude la cabeza. —Es todo tuyo. —le informa a su amigo. —Estaré en casa alrededor de las dos.

—Y luego soy todo tuyo. —Draco se apresura a decirle, ganando un exagerado giro de sus ojos por parte de Theo, pero una sonrisa de despedida de su chica.

Theo le da un saludo alegre y entra en la habitación, cerrando la puerta detrás de él. —Merlín, estás completamente enamorado.

Entonces, tal vez Draco está mirando a una puerta cerrada por un momento demasiado largo, sonriendo a Hermione, pero él rápidamente habla y levanta una ceja a su amigo. —¿Cómo está Potter? —pregunta, mordaz y desconcertado.

Theo sonríe ampliamente a cambio. —Insaciable. —dice, y Draco puede decir que su amigo está bastante orgulloso de sí mismo.

—Entonces, ¿cómo sucedió eso, eh? ¿Tú y el chico dorado?

Encogiéndose de hombros, Theo se deja caer en la cama de Granger. —Interés mutuo en los pasatiempos. Circunstancias convenientes que a menudo nos ponen en la misma habitación. Una apreciación saludable de los atributos físicos. —Hace un gesto vago hacia la puerta, indicando la partida de Hermione. —¿Tú?

Draco sonríe, pensando en las noches de lectura erótica en el pequeño dormitorio de Granger, atrapado en una habitación con ella y sin importarle un poco. —Lo mismo. —dice, y pasan un momento de profunda reflexión.

—Entonces, ¿Bill Weasley al rescate? —Theo está toqueteando el juego de té en la mesita de noche de Hermione, jugueteando con el pequeño reloj que hace un alboroto irritante cada mañana a las siete y treinta y cinco en punto.