Nadie Como Tú - Sebastian Stan y tú-

Epilogo

Sebastian  y _______ paseaban por Londres cuando sonó el móvil de él.

— ¿Cómo está _______? —preguntó Chris.

—Igual que ayer. —Sebastian miró embobado a _______, que estaba ya en su séptimo mes de embarazo—. Chris, te juro que si pasa algo te llamaré en seguida. No tienes que llamar cada día.

_______ se acercó a Sebastian y le dio un beso antes de quitarle el teléfono de las manos.

— ¡Chris! ¿Dónde estás?

—En el aeropuerto de Nueva York. Acabo de aterrizar.

— ¿Qué tal el vuelo? —le preguntó mientras Sebastian le compraba un refresco en un quiosco.

—Como siempre, aburrido y cansado. Pero después de despegar me he peleado con una chica.

— ¿Ah, sí? —Chris nunca mencionaba a nadie en sus llamadas, así que _______ supuso que esa pelea había sido importante.

—Sí, tenía una teoría muy interesante sobre cómo sentarse en un avión. En fin —suspiró Chris—, seguro que a ti te caería simpática... Espera un momento. ¡Se está llevando mi maleta!

— ¿Quién? —_______ se dio cuenta de que Chris ya no la estaba escuchando, y que había empezado a gritar.

— ¡Señorita! ¡Ésa es mi maleta! ¿Por qué me compraría una maleta negra?

«Porque eres un soso», pensó _______ mientras Chris seguía refunfuñando.

—_______, te dejo, la impresentable que se ha pasado todo el vuelo con el sillón reclinado, se está llevando mi maleta. ¡Llámame cuando vayas a Barcelona!

—Lo haré —respondió ella, pero él ya había colgado.

— ¿Qué le pasaba a tu hermano? —preguntó Nathan antes de sentarse a su lado en el banco.

—No lo sé, creo que una chica se estaba llevando su maleta por error. —________ sonrió—. La compadezco, Chris enfadado da miedo.

—Lamento ser yo quien te lleve la contraria, pero tu hermano da miedo incluso sin estar enfadado.

—Muy gracioso. —ella le besó el cuello. Desde que estaba embarazada, el olor de Sebastian la volvía loca—. Me encanta cómo hueles.

—Para o tendremos que regresar a casa antes de que hayas caminado todo lo que te ha dicho el médico.

—Está bien, aguafiestas. —_______ se levantó y siguieron andando—. ¿De qué te ríes? —preguntó al ver cómo sonreía.

—Me estaba acordando del día en que fui a buscarte al aeropuerto —respondió él enigmático.

— ¿Y?

—Pues pensaba que si a tu hermano le pasa lo mismo que me pasó a mí, esa chica de la maleta no tiene ninguna posibilidad.

— ¿Qué te pasó a ti? —_______ se detuvo delante de él y lo miró a los ojos.

—Que te vi.

— ¿Y? —Aun ahora, cada vez que él la miraba de ese modo se le derretían las piernas.

—Y perdí la capacidad de razonar.

Él la besó hasta que vio que un par de ancianos que pasaban por allí los miraban mal.

—Vamos, creo que ya has caminado bastante.

— ¿En serio? —A ella le encantaba tomarle el pelo.

—En serio. Además, creo que hay un modo mejor de hacer ejercicio y de demostrarte lo que quiero decir.

**

Fueron a su casa. Habían decidido que la niña nacería en Barcelona, pero luego regresarían allí, a aquel edificio con un portal naranja donde se habían enamorado.

Después de hacer el amor, Sebastian acurrucó a _______ entre sus brazos.

—Te amo, _______. —Él aún se sorprendía de que fuera tan fácil decirlo.

—Yo también te amo, Sebastian. Las dos te amamos. —_______ apoyó la barbilla en el pecho de él—. ¿Sabes una cosa?

— ¿Qué?

—Ojalá tengas razón con lo de mi hermano.

— ¿A qué te refieres?

—No sé, me gustaría que por una vez perdiera la cabeza por amor. Igual que nosotros.

—No creo que él pueda ser igual de... ¿Cómo era eso que me decías hace unos minutos? —Se burló él—, ya me acuerdo, «maravilloso», que yo.

—Ya, bueno, pero puede intentarlo.

Sebastian volvió a besarla para dejar claro que su hermano tenía aún mucho que aprender.

Y aqui esta el ultimo capitulo. Muchas gracias a @byAna15 y a @ilhamhannaoui por ser unas grandes fans incondicionales de esta gran historia, y aunque se que en algunos momentos he tardado mucho en subir algun capitulo, vosotras  habeis estado ahi. De verdad muchas gracias.

Nos leemos.....

Besos