22/04/20

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Pensar es la mejor bendición y maldición que se nos pudo ser dado. Es decir a eso se debe la evolución de la humanidad, pero así mismo lleva a la desesperación y reflexión de los aspectos más profundos de la humanidad.

Para suerte o desgracia de la humanidad la segunda requiere un pensamiento más profundo que la primera, por ello y por la sociedad de hoy en día, hay pocas personas en proporción al total que llegan a pensar en profundidad en la segunda. Los filósofos probablemente rasquetearon la superficie de la segunda y a cambio fueron grandes referentes académicos para el mundo, pero para aquellos que se hundieron demasiado en ello probablemente no les esperó nada más que la locura y una muerte trágica y temprana envuelta en misterio. Eso a menos de que de alguna manera les llegara la "iluminación" o un milagro pudieron escapar de su destino y vivieron su vida felizmente en algún sitio. Por eso es mejor vivir distraído, en no admitas que consuman tu tiempo.

El punto es que, si en algún sitio existe un dios, le hice algo terrible, tanto, que decidió enviarme a este mundo con una capacidad de pensamiento superior al promedio para que sufriera aún más en este asqueroso mundo, y para rematar me otorgó la tendencia al segundo para que no tuviera escapatoria.

Si realmente existe un dios no tiene nada de piadoso y mucho menos de misericordia o perdón, aunque quien lo culparía, probablemente yo sería igual.

Pensamientos desbordadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora